Broken Home |m.c|

Run, run lost boy.

3. Run, run lost boy.

-¿Que hay de comer? -me pregunta Aiden nada más entrar por la puerta.

-Sopa de fideos -murmuro dejando sus mochila sobre la mesita desgastada de la entrada, llena de cartas abiertas o sin abrir y papeles con numeros apuntados, en fin, todo muy colocado.

-¿Otta vez? -pregunta Noa.

-Si, cielo, mañana prometo hacer espaguetis.

-Cavonada -sonrie Noa.

-A la carbonara entonces -sonrio acariciando su suave piel, los pequeños corren a la cocina.

Suspiro, necesito que sea la una para acostarme ya. Es muy tarde pero apenas termino de hacer la cena para luego ayudarlos con sus deberes, no me da tiempo a mi a hacer mis deberes y a estudiar.

-Toma Aiden, llevalos a la mesa con cuidado -le doy los platos negros para él y su hermana-, ten Noa, ya sabes, despacito -asiente lentamente cogiendo los dos vasos echando a andar -literalmente- despacio hasta el cuarto de estar.

Niego riendo, esta niña es muy comica cuando se lo propone, pero es un pequeño bombón, dulce y delicado, a la par de achuchable, aparte de tener una sonrisa mellada, pero preciosa, pues se la cayeron el otro dia un colmillo y un paleto.

-Bien, voy a recoger todo -aviso echandoles la sopa de fideos que echa humo fuertemente.

-Yo quiero mas fideos -murmura Noa. La gusta que la sopa este espesa, como mamá hacia para comer.

-Yo... ¿No comes con nosotros? -murmura Aiden, niego mandandole una sonrisa pequeña.

Termino de echarla toda la olla a Noa que incluso siendo la más pequeña en todos los sentidos come más que Aiden.

Me siento al lado de Noa para ayudarla a comer, pues aún es muy torpe y se la puede caer encima de la ropa.

-Venga abre -digo cuando esta más atenta en la tele que en su plato de enfrente.

Aiden mira hacia abajo todo el rato con el ceño fruncido, a él a diferencia de Noa no le gusta mucho la tele si no es para ver peliculas de Marvel.

-¿Que pasa? -le pregunto después de un rato que sigue igual, dandole otra cucharada a Noa.

-Nada -murmura volviendo la vista hacia mi.

-Aid -me corta Noa antes de poder terminar de decir algo.

-Se a caido en el patio y ahora tiene los pantalones rotos -sonrie mirando hacia arriba, clavando sus ojos pardos en mi.

-¡Callate Noa, te he dicho que no hablaras! -grita dejando la cuchara bruscamente sobre el planto, haciendo que pequeñas gotas de sopa salgan volando.

-Pero no esta bien mentir -murmura bajando la cabeza.

-¡Eres tonta! -grita juntando sus brazos a su pecho.

-¡Aiden! -grito.

Se cruza de brazos refunfuñando.

Miro a Aiden culpable y minutos después se levanta de su asiento para llegar a su hermana, que esta al lado mio.

Coge entre sus manos su mejilla cariñosamente y se la besa repetidas veces, pasando tambien por los labios como yo los beso y por la nariz, arrancando una risa involuntaria de la más pequeña. Sonrio por acto reflejo.

-No queria decirlo -murmura acariciando su pelo-. ¿Me perdonas? -saca el puchero mas tierno que hace cuando sabe que a echo algo malo.

-Si -sonrie besando los labios de su hermano en un pico.