Help

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20. Help.

Ya han pasado dos días desde que estuve en el cine con Michael y su hermana junto a mis mocosines, y bueno, a parte de que me tocó discutir con él de que nos invitaba a cenar y que yo no paraba de ponerle escusas, entre tanto alboroto conseguí que al final nos fueramos a casa consiguiendo mi cometido.

Pero no se quedó ahí la cosa, cuando llegué, papá estaba en el sofá tirado con una raya de coca en la mesa y una botella de Beefeater a medio terminar, aparte del cigarro que estaba sobre el suelo encendido a medio consumir.

Tuve que mandar a los niños a su habitación para recoger todo en silencio, mientras el aún estaba acostado en el sofá, durmiendo, con la tele encendida y el olor a tabaco y a alcohol en el salón.

Después preparé la cena y le deje un plato encima de la mesita, mientras que cenamos los tres en mi habitación viendo una película en el viejo ordenador portátil.

Y bueno, ayer no fue un gran día, me desperté con un agarre en el pelo, brusco y fuerte, mi padre me tiró al suelo y me empezó a gritar diciendo que había perdido 20€ en coca, ya que se lo tiré a la basura, pero obviamente teniendo dos niños en la casa no lo podía dejar ahí, ellos son demasiado curiosos y cualquier cosa es un peligro para los dos.

Ahora me duele el estomago, y el costado, por no decir que este último esta rodeado por un gran hematóma negro, aparte de mi labio roto y un corte en la mejilla un poco profundo.

Pero la peor parte se la a llevado mi brazo, como siempre, ya que he perdido totalmente la movilidad de este, ya ni siento cuando agarro algo y menos tengo fuerza.

-Aiden, tenemos que irnos, no puedo llegar tarde al trabajo -digo exasperada, cogiendo algo de dinero para los regalos de Papá Noel que es mañana.

-Si, voy, pero no encuentro la Nintendo -dice revolviendo el cajón de escasos juguetes que había recogido esta mañana-, un momento -agrega y yo solo puedo observar como revuelve todo lo que había tardado horas en recoger.

Genial.

-¡Aiden vamos ya por favor! -me agarro de los pelos exasperada-, ¡No puedo llegar tarde maldita sea! -sus ojitos me observan con terror en la mirada-. Cielo..., p-perdon, n-no te queria g-gritar -me acerco despacio a él para atraerlo a un abrazo.

-No pasa nada, lo siento Moon -suspira dejando todo de nuevo en su sitio.

-Venga, vamonos, mañana buscamos la Nintendo tu y yo juntitos ¿Quieres?

-¡Si! -asiente euforicamente corriendo hacia Noa.

-Bien, portaros bien, porfavor, no quiero que la deis problemas, sabeis que es una mujer muy mayor y si os dice que si quereis comer algo decirla que no, se pondrá a hacer algo en la cocina y ya esta demasiado vieja, cuando vengais ya comereis algo que os preparé yo ¿Vale? -pregunto interrogante.

-¡Sip! -responde Noa remarcando la p.

Cierro la puerta con llave y la meto en mi respectiva mochila.

-¿Cuando vienen los reyes? -indaga la pequeña, mientras subimos por las escaleras llenas de mierda.

Putos guarros.

-Primero viene Papá Noel, mocosina -toco juguetonamente su nariz mientras la beso la cabeza y la cojo en brazos.

-Pero ¿Cuando viene entonces? -juega con ni pelo.

-Mañana estarán los regalos.

-Pero no tenemos árbol de Navidad como Daisy tiene -refuta ceñuda.

Broken Home |m.c|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora