See you at six (DDLC #2)

30. Harper

Hoy es el primer día de mi último año de instituto, y también es el primer día en toda mi vida que voy al instituto sin Elliot. La verdad es que se hace un poco extraño, pero sigo teniendo a Olivia.

Le echo bastante de menos, aunque solo hace dos días que se fue, pero al menos tenemos Skype y los mensajes de móvil. Ayer me llamó y me contó que la presentación había sido muy aburrida, pero que había conocido a un tal Mark y una chica llamada Caroline. Siempre he envidiado la capacidad de Elliot de hacer amigos, pero me alegro de que no esté solo en Miami, no quiero que lo pase mal.

-¡Último año! -exclama Olivia cuando me subo a su coche.

-Último año -asiento-. Y luego yo estudiaré Arte y tú Publicidad.

-Yup, y seremos las mejores en ello -contesta, entusiasmada.

Llegamos al instituto tarde, cómo no, y ambas entramos corriendo en la primera clase que tenemos. Ya podrían hacer una presentación o algo más entretenido el primer día, si es que tener clases ya para empezar es de tener mala leche.

-Finlay, Nicholson, llegáis tarde el primer día, qué raro -gruñe la profesora Denovan en cuanto entramos.

Joder, solo llevamos unos diez minutos de curso y esta mujer ya parece torturada.

Para nuestra desgracia, los dos únicos sitios libres que quedan están separados, así que nos sentamos una en cada uno. Yo me siento al lado de un chico al que no había visto antes, al parecer es nuevo.

-Hola -le saludo, susurrando-. Soy Harper, ¿eres nuevo?

-Sí -asiente, usando el mismo tono de voz que yo, pero consigo notar su marcado acento inglés-. Soy Harry.

Al parecer a Harry le importa tan poco la lección de Química como a mí, porque hablamos durante toda la clase. Al parecer destinaron a su padre a trabajar aquí, en San Diego, y tuvieron que mudarse de Birmingham, en el Reino Unido.

-Bueno Harry, ¡nos vemos! -le digo cuando, después de tres horas de clases, suena el timbre indicando que es hora del descanso.

Cojo el sándwich de Nutella que papá Dean me ha preparado y voy a buscar a Olivia, para encontrármela hablando por teléfono, y por la cara de idiota enamorada que pone, puedo asegurar que habla con Dennis.

-Bueno, nos vemos esta tarde, entonces -se despide Oli de él-. Te quiero.

-Aw, pero qué lindo -me río cuando ella cuelga-. Sois tan pegajosos.

-Tú y Elliot también -se encoge de hombros-. Ah, no, espera, que él está en Miami.

-Perra -digo, echándole una mirada asesina.

-¿Cómo fue la despedida ayer? -me pregunta, esta vez poniéndose seria.

-Pues fue una mierda -contesto sinceramente-. A saber cuando vuelvo a verle.

-Bueno, tenéis Skye, se puede hacer todo por Skype. Incluso tener sexo.

-Tú siempre pensando en lo mismo -suspiro.

-Pues por lo que sé, últimamente Elliot y tú estabais como conejos -dice, levantando las cejas repetidamente.

-¿Y qué hago? No voy a verle en bastante tiempo, al menos tenía que dejarme sexualmente satisfecha -contesto, y Olivia se echa a reír.

-¿Quién me iba a decir que mi Harper más virgen que el aceite iba a terminar así? Voy a tener que darle un premio a Elliot, de verdad -ríe.

-Claro, claro...

-Por cierto, ¿quién es el chico que se sienta a tu lado? Es guapo -dice Oli, fijándose en Harry.

-Es Harry, viene de Inglaterra -le explico.

-Oh, qué mono -murmura, mirándole descaradamente.

-Eso, tú disimula más -ruedo los ojos.

— o —

Tras haber sobrevivido a todo el primer día de clases y al interrogatorio posterior de mis padres, que quieren saberlo todo -como si algo hubiera cambiado respecto al año pasado, duh-, me echo en la cama y abro el ordenador para mirar fotos en Tumblr.

Es entonces cuando suena mi teléfono. Hoy apenas he podido hablar con Elliot porque he tenido un día muy ocupado y me han puesto muchos deberes, pero cuando veo su nombre en la pantalla sonrío de inmediato, aunque me extraña un poco que me llame a estas horas, ya que si aquí son las diez de la noche allí debe ser la una de la madrugada.

-¿Hola? -digo cuando acepto la llamada.

-Harpyyyy -contesta Elliot.

Vale, está ebrio.

-Vaya, te veo bien -río.

-No, no estaré bien hasta que esté contigo -contesta, y sonrío involuntariamente-. Aunque el vodka ha ayudado un poquito, sí.

-¿Con quién estás? -le pregunto.

-Con Mark, Caroline y Damon -dice-. He conocido hoy a Damon, es un tío geniaaal, y hace unas copas increíbles, ¡ya tengo barman personal!

-¡Y una mierda! -se oye a alguien gritar desde el fondo, supongo que será el tal Damon.

-Joder Damon, yo te quería -dice Elliot, haciendo como que llora, y me echo a reír.

-¿Habéis salido de fiesta? -le pregunto.

-Sí, bueno, primero hemos ido a casa de Mark a beber y ahora estamos en un bar llamado "Seventy" o algo así... Es un número.

-¿Quién es? -pregunta una voz que no conozco.

-Es mi novia, Harpy -le contesta Elliot.

Se oye un quejido de Elliot y un ruido extraño, y entonces la voz habla, esta vez más cerca, por lo que deduzco que le ha quitado el móvil a Elliot.

-Hola Harpy, ¿qué clase de nombre es Harpy? -pregunta el desconocido-. Bueno, yo soy Mark.

-Me llamo Harper, en realidad -río.

-Ah, eso tiene más sentido, sí -dice-. ¿Sabes? Elliot está loco por ti, a la que empieza a hablar de ti no calla ni en mil años. Lo tienes bien atrapado, eh.

-Supongo que sí.

-Bueno, que sepas que conmigo, Elliot está a salvo -dice, poniendo voz de machote, y río.

-Uy, ahora estoy mucho más tranquila -bromeo.

-Lo sé, lo sé. Bueno, te devuelvo a tu enamorado, que está empezando a golpearme en la pierna y me molesta. Adiós, Harpy Harper.

-Adiós, Mark -río.

-No le hagas caso, es tonto -es lo primero que dice Elliot cuando vuelve a tener el móvil.

-Así que no paras de hablar de mí, ¿eh?

-Cállate.

-Te amo -le digo.

-Yo también te amo, y te echo de menos -suspira-. En cuanto tenga tiempo libre y dinero iré a verte. Uno de los jefes de este bar dice que puede ofrecerme trabajo aquí, ¿no es genial?

-Sí, pero mejor que te haga esa propuesta cuando estés sobrio, ¿sí?

-Vale... Bueno, me voy, ¿hablamos mañana?

-Claro, te llamo por la noche -asiento-. Cuídate y no bebas demasiado.

-No prometo nada -ríe-. Te amo.

-Yo también te amo -sonrío-. Adiós, Elliot.

Cuelgo la llamada y sonrío, sabiendo que aunque yo no esté con él, Elliot ha encontrado amigos y no está solo, aunque nunca tuve ninguna duda de ello.

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Otro capítulo resubido de SYA6 para vosotros. Iré resubiendo al menos un capítulo por semana :) a las que ya habíais leído estos caps os recomiendo leerlos otra vez porque seguramente cambiarán cosas de ahora en adelante.