¿Quieres guerra? Tendrás guerra © #1 [ BORRADOR ]

32. El chico de tatuajes y ¿Playa?

En el capítulo anterior:

{James tomó unas llaves, para luego tomarme de la mano y salir de allí. No me había percatado cuando volví de lo de Patrick que había un auto en frente de la casa.

—Sube —me ordenó mirando una camioneta negra bellísima. Obedecí y entré.

—¿A dónde vamos? —pregunté confundida.

—Ya lo verás.—Dijo sonriendo.}

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Capítulo treinta y dos

El chico de tatuajes y ¿Playa?

Estaba en el auto con James, lo acabo de conocer.

¿¡Y SI ES UN MANIÁTICO!?

¿¡ME QUIERE MATAR!?

¡SE HABLA CON ASHTON!

<<Cálmate, Ashley, Cálmate>> Exigía Elvira.

Gracias Elvi, no se que haría sin tí.

<<Ni yo.>>

Siempre agrandada...

Decidí romper el incómodo silencio que nos invadia.

—James...

—Ashley, no te preocupes todo estará bien.

—No, no es eso —contesté ya calmada—. ¿A dónde vamos?

—Es un secreto... —sonrió.

¿Por qué todos los antiguos Delta y amigos de los Delta tienen que ser atractivos?

—Emm... tú... ¿tienes algo con alguno de los Delta? —preguntó entrecortadamente sin despegar la vista a la carretera.

Pensé en si mentirle o decirle la pura verdad.

—Sí. Obvio, estoy enamorada... —respondí con voz de fresita.

De pronto, James frunció el ceño.

—¿De quién? —preguntó seriamente.

—Pff... de alguien... —comenté obvia, para no decir nombres y que se armara un caos.

—Ashley, ¿con quién rayos sales? —preguntó amenazante.

—Tranquilo —dije tocándole el brazo tenso—... no salgo con nadie.

Su brazo se relajo al igual que su rostro.

—Bueno, entonces no me regañarán luego, llegamos.

Le regalé una sonrisa a lo que repitió mi acción y nos bajamos del auto.

Esperen... ¿me llevó a una playa?

Por mi cara de confusión, James preguntó alarmado:—¿Te gustan las playas, no?

—Sí, pero no es eso. ¿Por qué me trajiste aquí? —pregunté mirándolo confundida.

Sonrió y bajó la mirada al suelo.

—¿Por qué no te traería?

—Mmm... no lo sé. ¿Por qué no nos conocemos? ¿Quizá? —dije sarcásticamente.

—Eso no es problema, ¿quieres conocerme? —preguntó pícaro, caminando hacia el mar. Adelanté mi paso quedando alineado a él.

—Si eso abarca no tener problemas con ningún Delta, ni ningún hermano mío, está bien.