38

90 3 0
                                    

-Nadie más los ve.-musité y sus ojos se clavaron en mi.

-No es eso, linda.

-Claro que si. Nadie más puede verlos. Estoy volviéndome loca.

-¿Por qué lo estarías?-preguntó el otro chico.

-Porque ellos no los ven. Porque nadie más lo hace. Porque no son... Ustedes no son reales.-lloré sin quererlo así.

Entonces recordé todos esos momentos, todo lo que pasamos, todo lo que se suponía que habíamos vivido juntos y sentí ese inmenso vacío. Ellos nunca habían estado ahí realmente.

-Espera, por favor.-pidió uno de ellos cuando intenté irme.

-¿Sabes mi nombre?-pregunté.-¿Alguno de ustedes lo sabe?

-No te hagas esto.-pidió.

-Lo sabían. Todos sabían que ustedes no estaban, incluso ustedes, pero no me dijeron nada. ¿Por qué?

-Porque lucías feliz.

-¿Y cómo me veo ahora?¿Como una estúpida adolescente viviendo de ilusiones?

-Linda...

-No. No hay nada que puedas decirme. Ya es tarde.

-¿Para qué?-preguntó uno de ellos, acercándose.

-Para todo.

La música se apagó, ellos se desvanecieron, miré hacia atrás y solo me topé con recuerdos fingidos, inventados, dolorosos.

-Estaba sola, todo este tiempo lo estuve. No importó cuantas veces ellos dijeron que estaban ahí, que me amaban, que jamás me dejarían. Todas esas promesas fueron en vano porque, desde el primer momento, mintieron. Ellos jamás estuvieron aquí.




ReflexionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora