Rompiendo Silencios (terminada)

11- sensaciones

11- sensaciones

"Loren"

-¿segura que estas bien?-me pregunta Alex tomándome por la cintura.

-sí, no es nada.-miento.

Los dolores de cabeza y mareos han ido en aumento, las horrorosas punzadas se incrementan. Pestañeando un par de veces repetitivamente me sostengo el lado izquierdo de mi cabeza.

-¿Qué no es nada? Loren, no puedes ni escuchar un ruido mínimo, estas que lloras, tus ojos muestran cansancio.

-estaré bien, tal vez se me ha pasado una dosis del medicamento, ya verás que para mañana estoy bien.

-desde la inauguración estas igual, ¿crees que no me di cuenta?

Ignorando sus palabras que son como regaños corro al baño, devuelvo todo lo que había comido. Sé que esto solo aumentara los reclamos.

-¿Qué me ocultas Loren?-pregunta Alex acariciando mi espalda.

Limpiando mi boca le miro con vergüenza, vergüenza por que me mire en esta situación y no saber qué es lo que me pasa.

-no lo sé, simplemente todo se está complicando.-con el cepillo de dientes en mano le miro.-Alex, yo no quiero ser una carga.

Me cepillo los dientes frente al espejo, Alex continua acariciando mi espalda.

-no eres y nunca serás una carga.-suspiro mirándole de frente.

-eres un imán de chicas enfermas. Podrías estar con alguien sana, alguien que no se quede sorda día a día.

-¿te he dicho cuanto te amo?-pregunta en un tono dulzón ignorando mis palabras.- te amo mucho, y por qué te amo es que estoy aquí a tu lado.

Sonrió ante sus palabras y mirándome al espejo noto lo pálida que luce mi piel, las ojeras comienzan a notarse. ¿Hacia cuanto que no dormía?

Mirando la hora comento triste.-ya debes irte, Garrett ya ha salido del cine con los niños.-tomándome por la cintura besa mi cuello.-Garrett puede cuidarles un poco más.-muerde el lóbulo de mi oreja. Un gemido escapa de mis labios.

-prometiste ir a platicar con Garrett.

-ahora mismo tengo mejores cosas que hacer.

Cargándome en brazos me lleva hasta la cama, sonrió como una adolescente enamorada, su tacto aun me provoca nerviosismo.

-estoy algo cansada en verdad.-admito tristona cuando sus manos quitan mi jersey.

-nadie dijo algo respecto a actividades que cansen.- me hace recostarme boca abajo.

Siento sus manos deslizarse por mi espalda, brindándome un suave roce. Estas masajean mi espalda, miles de sensaciones se presentan en mi interior. Quitando mi sostén reparte besos por toda mi columna, las tensiones dejan de sentirse tan fuertes. Entre suaves masajes y besos logra mi relajación. Mis ojos se cierran de apoco y una última sensación provoca un cosquilleo en mi interior antes de quedar dormida, Alex me ha besado.

***

No puedo más que admirar su rostro, el rostro del hombre que amo. Con dulzura y delicadeza roso mis dedos por todo su contorno, una ligera sonrisa se asoma en sus labios.

Durante un par de minutos admiro su rostro hasta que decido que es momento de levantarme y preparar el desayuno.

Con las tortitas servidas y el jugo recién exprimido camino hacia la habitación, la cama esta vacía y el sonido en la ducha se hace presente.