¿Epilogo?

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Epilogo

Su risa envuelve la sala de estar, tan fuerte que debe sostenerse el estomago. Loren le mira con reprimenda. Sin más con el cejo fruncido coge el álbum fotográfico que antes estaba sobre la mesa y se va directo y sin escalas a su habitación. Alex no hace más que reír.

¿Qué acaso le resultaba tan difícil el dejar de reír?

Alex por fin termina su momento de risas y mirando a su alrededor cae en cuenta que Loren se ha ido, tal vez les tocaría dormir nuevamente el sillón.

-se enojo.- Oliver se encoje de hombros y va directo a la cocina.

Este nuevamente mira la sala ahora vacía y por su mente solo pasa una ligera pregunta "¿Ahora qué hice?"

***

-mama se ha molestado bastante.-Alex conduce tranquilamente, por el retrovisor mira a Karla.

-¿Por qué lo dices?-Karla se encoje de hombros y mira a julia esperando que esta le salve.

Ambas sabían muy bien cual había sido el motivo de la molestia de su madre, pero se habían prometido no decirlo.

Por la mente de julia pasa una ligera idea, la mirada que logra hacerle a Karla le dice que le siga la corriente.

-Pa, es que simplemente has olvidado pasar por su encargo.-un par de metros adelante detiene el coche.

Federico finge tocar la batería en sus rodillas y con los ojos cerrados canta casi omitiendo a las personas que le rodean. Oliver desde la parte trasera del coche graba con su móvil a su tan peculiar hermano.

-¿Cuál encargo?-pregunta con duda.

Lisa le saluda desde lejos y Jared corre hasta subirse al coche. Todos los presentes le saludan, menos Oliver quien aun graba.

-salúdala idiota.-Karla le da un codazo, este deja caer el móvil torpemente.

Mira con molestia a la menor de sus hermanas y le maldice entre dientes.

-te mire.-le recrimina Alex.

-pero ella empezó.-el coche emprende su marcha nuevamente.

-es tu hermana, debes respetarla como tal.-mira al fondo de la camioneta, Jared parece estar serio.- ¿Cómo te ha ido?

-bien.-contesta secamente.

Julia recoge el móvil de Oliver y se lo entrega, no sin antes borrar el video de Federico.

El resto del camino sobre ese coche es igual que siempre, cuchicheos entre las chicas, y un par de pleitos entre los chicos.

***

Con su índice recorre sobre la fotografía el rostro de su pequeña, aquella quien le hizo sentir por primera vez un poco de vida dentro de su ser, sonríe. Julia su pequeña, no tan pequeña tenía ya 15 años. Era la copia exacta de su abuela, claro y aquella pequeña naricilla al igual que su tía Valeria.

Federico él, bueno tenía 13 años al igual que Karla su melliza. Ambos eran tan parecidos, y no solo físicamente, por que cuando estos querían buscaban la manera de confabular hasta planear las mejores bromas.

Oliver era como la pequeña luz de sus ojos, aun recordaba la primera vez que le vio en aquel parque, tan pequeño y sonriente, con ese par de ojos café claro que le robaron el corazón al instante, ese momento siempre se recreaba en su cabeza. A pesar de ya tener 22 años y un titulo como ingeniero aun vivía en casa.

Rompiendo Silencios (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora