Narra Rubby:Me encuentro en la cocina desayunando un buen bol de cereales. Mi padre está al otro lado de la mesa intentando resolver el encrucillado del periódico. Siempre lo hace, se rompe la cabeza en cosas inútiles. ¿De qué le va a servir saber el sinónimo de la palabra espinacas?
Prendo la radio ya que odio el silencio que hay entre ambos.
- Papá, ¿cómo va la búsqueda de empleo? - pregunto mientras lavo los platos del desayuno.
- Pues... Ya sabes... No veo ninguno que me llame la atención y que además paguen bien - dice sin apartar la mirada del periódico.
- Pero papá. Llevas más de un año buscando trabajo. Casi no llegamos a final de mes con el paro y pronto finalizará. No puedes elegir al "pito pito" ni ser meticuloso. Debes presentar tu currículo y esperar que ocurra un milagro para que te eligan - le explico poniéndome en su situación.
- ¡Rubby! Te dije mil veces que no te metieras en estos asuntos. Eres muy pequeña para entenderlo -me regaña.
- Papá, tengo 17 años. ¿Cuándo te entrará en la cabeza?
- 16 y cuarto... - susurra subiendo el volumen de la radio.
- ¡Es lo mismo! - grito para que pueda oírme. Me volteo y cojo la cubertería.
Refunfuño. Otra vez, vuelve a ignorarme de nuevo.
La interlocutora de la radio invade mis timpanos.
" ...Y no han encontrado al asesino. La policía junto con un equipo de detectives profesionales siguen alerta ante un nuevo ataque. Es posible que haya sido un animal debido a las diversas mordeduras por todo el cuerpo de la víctima. Los investigadores afirman que las marcas solo pudieron hacerse con un material afilado. Colmillos. Tal vez, un tigre, lobo... O otro animal del bosque. Una persona normal no podría hacer eso. El pueblo sigue revolucionado ante la noticia. Les preocupa más el asesino que la propia víctima del mismo. Esperemos que logren averiguar lo que realmente sucedió y que puedan solucionarlo sin perder más vidas de por medio. Os seguiremos informando..."
Mi padre baja el volumen de la radio. Ya había escuchado montones de casos como este. Siempre ocurría lo mismo. El asesino o era un animal que se había escapado del zoo o simplemente un asesino en serie rondando por la ciudad. Ok no. El asesino era una persona que buscaba venganza.
Por eso no me gusta escuchar las noticias de la radio. Nunca ocurre nada nuevo es constantemente lo mismo de siempre.- Papá, tengo que irme o llegaré tarde. Nos vemos - cojo la cazadora dirigiéndome a la puerta principal. Él solo asiente y continúa concentrado en la búsqueda de la resolución del encrucillado.
¡Ah! Odio a la persona que inventó los periódicos.Recojo mi bandolera junto con el casco de la motocicleta. Sí, es rosa. ¡Mi color preferido! En cambio la moto... es... como decirlo...
UN AUTÉNTICO MAQUINÓN donde no existen los cuentos de hadas ni otro tipo de objectos o marcas femeninas.Salgo de casa y me pongo en marcha.
Piso el pedal y me sujeto al manillar de la moto. La hago rugir a más no poder. Me encantaba ese sonido.
Me coloco el casco y enciendo el radiocaset.
Nunca viene mal un poco de Nirvana antes de aguantar el coñazo que nos sueltan los profesores.
Hago rugir de nuevo el motor y conduzco por el camino más corto al instituto pasando por delante de Mousse, la típica vecina cotorra de la manzana. Siempre tiene que alojarse una en cada pueblo.Mousse gruñe al verme pasar por delante de sus rosales a una velocidad de 90 Km/h. Luego pronuncia unas palabras que no consigo escuchar debido a la estridente voz de Krist, el que toca el bajo.
El viento juguetea con mi melena. Yo solo puedo sonreír a la vez que controlo el velocímetro. Me gusta ver como va avanzando la aguja. Me siento llena de adrenalina.
Al llegar, aparco justo en frente del instituto y comienzo a caminar hasta la entrada.
¡Annie! Había quedado con ella justo aquí. ¡Lo había olvidado!Reduzco el ritmo de mis pasos y trago saliva haciendo pucheros.
Me acerco a ella. Parece furiosa. Se encuentra cruzada de brazos y pateando el suelo.
¿Queréis saber como es Annie?
Está bien. Pues es... la chica más linda de clase. ¿Quién puede resistirse a una rubia de ojos azules? Es muy popular entre los chicos. Yo creo que ha salido con más de la mitad del instituto. Psicológicamente es simpática, presumida, astuta y muy fiel cuando se habla de amistad.
Aunque... nunca le cuentes tus secretos porque al cabo de 2 segundos. ¡¡¡2 SEGUNDOS!!! Ya lo sabe todo el centro, ¡hasta los profesores!Bien, volvamos a mi tortura. ¿Bronca por retraso? ¡No lo dudes!
- ¡Rubby! - exclama sin mirarme.
Vaya, ¿quién soy ahora? ¿Medusa? Hoy están todos empeñados a no mirarme a la cara.
- Ya sé que llego tarde... pero tampoco es para tanto como para que no puedas ni mirarme a la cara - murmuro jugueteando con mis dedos mientras mantenía el ceño fruncido.
- Calla y acércate - dice consumida en su propio mundo.
No reacciono y pongo los ojos en blanco.
- ¡Ven! - me hizo señas con la mano.
- Está bien - me acerco a ella. Annie me agarra del brazo y me atrae a ella.
- Fíjate - me coje la cara con una mano y la mueve para que conduzca mi mirada hacia esa cosa tan "fascinante" que quería enseñarme.
- Veo un árbol. Un árbol casi sin hojas. Es normal, estamos en noviembre - inclino la cabeza y curvo los labios mostrando mi decepción.
- ¡Vamos, Rub! ¡No te hagas la tonta! Fíjate bien - asiente con la mirada.
- Mmm... - continuó contemplando el árbol - ¿Te da pena que el árbol no tenga hojas? Te aseguro que volverán a crecer no te preocupes.
Hace una mueca y refunfuña.
- Ok, si. No te haces la tonta es que lo eres -voltea los ojos. Vuelve a sujetarme el rostro y me dirige la mirada hacia el árbol de nuevo - ¿Ves a ese chico que camina por el campus?
Asiento sin comprender. Mierda, se me olvidó ponerme las lentillas. No veo el rostro del chico.
- Dicen que era primo de Jacob.
- ¿De Jacob? - pregunto de nuevo.
- ¡Qué si! A veces creo que no me escuchas - frunce el ceño.
- Va. ¿Y qué pasa con él?
- Que es tan hermoso como Jacob o aún más - exclama - Míralo, pelo castaño, ojos verdes oscuro... Aunque no debe de ir al solarium. ¿No?
Golpeo su brazo riendo.
- ¿Estás diciendo que estabas enamorada perdida de Jacob? - finjo que me sorprendo horrorizada.
- ¡No! Los novios de las amigas no se tocan. Es como carne prohibida - alza ambas manos justificándose.
- Pero si no fuera...
- Pues no lo sé, Rub. No creo - ladea la cabeza cruzándose de brazos de nuevo.
- Mmm... ¿Ya que no lo intentaste con Jacob porque no pruebas con su primo? Ya sabes lo que dicen. De tal palo tal astilla. Primos, hermanos... Toda la familia lleva la misma sangre. Es un Miller - respondo creíble.
- ¡Anda! Deja de jugar con tu imaginación y vámonos a clase, ¡o llegaremos tarde! - expresa apartando la mirada del muchacho de ojos verdes.
Recoje su grande bolso de marca y ambas caminamos de ganchete directas a clase. La sirena aún no había sonado pero Annie tenía que saludar a su " rollete" por así decirlo.
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Roja Obsesión
ParanormalÁngeles, demonios... Monstruos sin piedad Que actúan como Dios Sin ninguna muestra de bondad Vampiros, lobos... Se suman a la maldad Siguiéndoles como completos bobos Esa es la cruda realidad. ¿Es qué nadie les salvará de la verdad? ~ Gabriel Mille...