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Últimos minutos que contaba el reloj
Y yo ya estaba preparada para avanzar
Últimos momentos que recordar
Sin extrañeza de la realidad
Y sin temor a lo que se avecinaba,
No fue hasta los últimos segundos
Donde él contaba sin consideración
Cuando las lagrimas se precipitaban
Peligrosas y sinuosas
Ocultas entre matorrales que no tomé en cuenta
Hasta que los abrazos iban y venían.

Tenía miedo.
Miedo de que los días cambiaran
Miedo de que no estuviera lista
De que lo hermoso se volviera ordinario
Pero la realidad es distinta.

He vivido con temor
Hay días que puedo dormir
Estoy feliz, más que nunca
Pero ¿Qué hay de esos días que no quiero dormir?
¿Volverán a mi?

El miedo, es la constante entre el tiempo
Que hace tic tac hasta llegar.

Hay algo nuevo desde éste día.

Me siento valiente.
Me siento fuerte y resistente.
Más que nada, me siento agradecida.
Puesto a que ése temor del pasado se ha disipado
Y no ha de volver en el futuro.

No ha de molestar, porque ya no está invitado.
No hay espacio en mi para que
De manera fulminante
Hunda mi pecho en lágrimas.

Estas lagrimas, entre abrazos, son nuevas.
Se sienten cálidas
Pero no duelen,
Sólo puedo reír, dejando que recorrieran mis mejillas.
Una risa constante y temblorosa.
Pero nunca más atemorizada.

Quiero tanto
Y tengo tanto que hacer éste año.
Tengo promesas
Tengo deberes
Tengo sueños y deseos

Pero más que nada
Tengo tanto amor
Por dar y recibir.
De una única persona
Que se ha vuelto mi nueva constante.

Tiempo, creo en ti.
No me decepciones siendo lento
Cuando necesito que seas rápido
Y no seas por favor veloz
Cuando necesite lentitud.

Éste año, temor no está invitado.
Porque siento esperanza
Por ti y de mi.
Hasta que el tic tac termine.

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