Existe una hora en la que todo se conecta. Los recuerdos llegan, la noche aparece y sólo proviene de algo que desconocemos. Las palabras se entrelazan y crean así un manto en el cual los pensamientos se resguardan. Mira al rededor y verás palabras. Atiende al rededor y oirás tonadas. Escucha.
Sólo une. Porque tú eres el centro de tus recuerdos. Porque tú eres creador de todo lo que proviene de lo desconocido. Porque tus manos se mueven, tus palabras se escuchan, tus letras se leen y tú, creador, sigues el camino que ya otros iluminaron.
Existe un tiempo en el que entendemos todo. Todo, para nosotros. Todo, que es nada para otros. Sólo quieres que en ti se apodere ése sentimiento de tener el control, y manejar como bien te parece. Pero la verdad es que el camino ya estaba hecho.
Sólo lo descubriste. Sólo te toca pasar y parar donde tú quieras.
Donde puedas. Donde esperas.
Existe un día en el que el mundo espera por nosotros en silencio. En que te sientas en el suelo, y cierras los ojos. En el que te agrada el frío. En el que odias el calor. En que sólo lloras y tu sonrisa se dibuja, traviesa, vulgar, patética.
Pero sientes. Sientes dentro de ti un remolino que
Para la vista de otros
No existe.
Existe un segundo en el tiempo en que pronuncias un nombre, y tu rostro cambia. Paraste en una de las bahías ya hechas, pero no encontradas. Admira. Presientes un dejavú porque ya estuviste en una situación igual. Pero nada es parecido. Susurras tus sentimientos en voz baja, dentro de tu mente, donde nadie sabe que existe. Pero tú, le has creado el mundo, que nadie más ha hecho antes.
Crear, no va más allá que el construir algo por tu nombre. Por los remolinos en silencio. Por las lagrimas secas, que pesan para abrir los ojos. Por las risas eternas, y los recuerdos. Porque sin ellos, no somos quienes para crear.
Porque sin memoria, no se aprende. Sin aprender, vives en una parte donde la bahía está hecha de tierra, y sientes que no eres lo que deberías.
Porque lo que deberías, no lo has descubierto.
Los años existen por algo
Y ese algo será siempre un misterio para la ciencia en silencio lejos de las páginas explicadas en detalle.
Pero para ti
Son piezas para tu creación.
Son piezas que trataras de unir, aunque no les veas sentido, aunque tus puños se aprieten tu voz no se escuche. Aunque lo que sientes no es bueno, pero qué bien se siente. Duras, fuertes, piezas. Te pondrás a prueba en tu propios años, te podrán a prueba en tu propio mundo.
Pero, como ya ha sido antes previsto, aunque tú no lo sepas.
Estas listo para ello.
Solamente, tendrás que descubrirlo y aprender de ello que te llevó hoy hasta ahí.
Antes de que te pierdas y no sepas diferenciar.
Como todo humano, como toda persona
Sólo los que ya han vivido, sabrán como pasar al carril
En que encuentras lo que tiene sentido
Para ti.
Existirá un día, en que estas palabras tengan más sentido
En el que habré vivido suficiente para voltear la vista sin negar.
Existirá un día en que lo que ames será lo que creaste
Y te ayudó a crear.
Porque no hay nada que lamentes más
Que no haberlo hecho
Y seguir en el camino
Que ahora te pertenece.
Sólo a ti.
