-¡Demonios! - Dije y él se separó de mí- su rostro era serio y me tape la boca ¡oh, oh! Eso estaba mal, ahora un demonio saldría del inframundo por mi culpa y se llevaría el alma de alguien, de algún humano y eso... eso era malo-
-¿Sabes lo que acabas de causar con tu palabra?-
-¡Pues tú me hiciste decirla! -
-Vuelvo en un rato- dijo él-
-¿Dónde iras? -
-No dijiste que me fuera... además tengo que buscar al robador de almas y bajar allá, no se conforman con lo que se les da así que tendré que establecer alguna regla-
¡Ashhh! Que he hecho... lo que más me encargaron ¡Porque! ¡Porque! ¡Porque! ¡Porque!
-¡Rayos...rayos...rayos! -
-Descuida regresare enseguida-
~Al siguiente día~
Segundo, minutos, horas, pasaban y no había señal de Lay, salí al balcón y me senté en un sillón a ver hacia abajo... mis nervios crecían ¿Qué pasaría si no cumplía? ¿Y si Dios se enteraba que me he encontrado con el Diablo? Justo cuando pensé en eso Lay apareció a mi lado acariciando mi mejilla.
-¡Llegaste!... pero... ¿Qué...que...que te sucedió? - Dije observándole las marcas de sangre en su rostro, brazos y manos-
-¡Ah! Esto, es que son muy traviesos, se me escaparon de las manos más de 10 veces- dijo sonriendo a penas por el dolor que le causaban las marcas- pero ya están abajo y castigados como siempre- dijo el soltando un suspiro-
-Pero... pero tú tienes poderes ¿puedes curarte? - Pregunte algo preocupada se veía terriblemente mal esas heridas en su rostro y por el resto de su cuerpo-
-No puedo hacer eso esa no es mi especialidad (sonrió) pero estoy bien- dijo tomando un mechon de mi cabello llevándolo atrás de mi oreja-
-Se hizo de noche- dije mirando hacia el cielo, hace segundos estaba en el atardecer-
-Te gusta la noche ¿no? - Dijo él, mirando las estrellas junto conmigo-
-Es que donde vivo solo es...- preferí callarme-
-Sigue hablando...quiero saber que eres- dijo él mirándome-
-No puedo, Dios no me lo permite-
-¿Te prohibió decirme lo que eres?- Dijo frunciendo su ceño, sus músculos se tensaron, claramente podía saberlo con tan solo ver como empuñaba su mano-
-No, o sea si pero no. Es complicado por favor no preguntes más sobre eso- dije tocando su mano en la cual tenía heridas, exactamente desaparecieron al yo hacer contacto con su piel-
-¡Ahhh! Eso se siente tan bien- dijo entrecerrando los ojos tirando su cabeza hacia tras en un gran suspiro-
Comencé acariciar su rostro y enseguida las heridas desaparecían. Después de eso me levante del sillón y me arrimé a la baranda del balcón, ahí miré las estrellas por un largo rato, cuando me di cuenta de que el ya no estaba... entre a mi habitación recostándome sobre la cama.
El señor bipolaridad se había ido sin siquiera darme las gracias...como se nota que es él... el mismísimo...

ESTÁS LEYENDO
El pecado de un Ángel [LAY]
Hayran KurguLas cosas de por sí ya son complicadas en un mundo hundido por la maldad en los corazones de los humanos haciendo que la luz sea imposible de entrar... pero para eso están Abril, el ángel más juguetón de todos y el más fiel; su tarea es sencilla, ar...