Aprendiendo a ser Appa.

Capítulo 4: Aprendiendo juntos.

—Supongo que tienes razón, no puedo separar a Min Jung de su padre. Pero tampoco le puedo dar esa noticia de golpe, así que dejaré que convibas con él, pero no le diremos que eres su padre sino hasta mas tarde— susurró Megan cansada.
—Gracias, muchas gracias— dijo Minho feliz, acercándose a Megan para abrazarla.
—¡Alto, Minho!— dijo ella deteniéndolo—. Que vallas a cuidar de Min Jung no cambia las cosas entre nosotros, tú y yo ya no somos nada.
—Lo siento, yo solo...olvídalo— dijo él desanimado.
—Puedes venir cuando quieras a verlo— habló ella.
—Gracias ¿crees qué pueda llevarlo con los chicos? Apuesto a que a ellos les encantaría verlo— dijo Minho.
—Claro, si eso es lo que quieres— respondió Megan.
—De verdad muchas gracias, quiero que me digas todo sobre él— pidió Minho.
—Me encantaría hacerlo, pero tengo que ir a trabajar— respondió la chica revisando su reloj.
—¿Quieres qué te lleve a tu trabajo?— preguntó Minho.
—No, tengo que llevarme mi auto para poder volver a casa y pasar por Min Jung— respondió la chica mientras recogía sus papeles, su bolso y otras cosas.
—¿De verdad no quieres que te lleve? Podría pasar por ustedes después— sugirió Minho.
—No es necesario, además Min Jung sale antes que yo y lo llevo conmigo al trabajo— respondió Megan.
—Podría llevarlos y comer con ustedes tal vez— agregó él.
—De verdad que no hace falta, si quieres estar con Min Jung te llamaré cuando salga del trabajo— dijo Megan apunto de salir de la casa.
—Gracias— susurró Minho.
—No es nada, vamos— dijo Megan abriendo la puerta y saliendo por ésta hacia su auto seguida por Minho—. Nos vemos, Minho.
Megan cerró la puerta de la casa y entró en su auto dejando solo a Minho.
El chico entró a su auto con una sonrisa en el rostro y manejó rumbo a su casa.
Al entrar a su hogar encontró a los chicos sentados en la sala, Key leía una revista, Jonghyun y Taemin jugaban videojuegos, y Onew revisaba su celular.
—Ya volví— habló Minho.
—¿Y bien?— preguntó Key sin dejar de leer su revista.
—¿Y bien qué?— cuestionó Minho.
—¿Cómo qué? Pudiste verla sí o no— exclamó Key apartando la mirada de su revista y posandola en Minho.
—Sí, sí la ví, a ella y al niño— respondió Minho.
—¿Y cómo es él?— dijo Jong levantándose de inmediato al igual que los otros miembros.
—Se parece demasiado a mí, Megan dijo que podía traerlo después para que lo conozcan— dijo Minho sonriendo.
—¿Y le gusta el Banana Milk?— preguntó Taemin emocionado.
—No lo se, Tae ¿por qué?— dijo Minho extrañado.
—Porque a mí me gusta el Banana Milk y si a él le gusta, entonces eso lo sacó del tío Taemin— respondió el chico sonriendo.
—Taemin los gustos no se heredan, eso tiene que ver mas con el estilo de vida de las personas; y aunque se heredaran ¿qué parentesco tienes tú con Megan o Minho?— dijo Key.
—¿Ser parte del mismo grupo musical no cuenta?— cuestionó Tae.
—No— respondió Key.
—Pues yo pienso que sí— opinó Onew.
—Pues no es así— sostuvo Key.
—Ah, no me importa yo solo quiero pollo— habló Onew caminando hacia la cocina.
—Vas a engordar si sigues comiendo así— le advirtió Key.
—Pues seré el gordo más sexy del mundo— respondió el líder desde la cocina.
—Yo no lo creo— murmuró Jong.
—Te escuché— dijo Onew saliendo de la cocina con un bote de pollo—. Oye Minho ¿y cuándo lo verás de nuevo?— agregó el líder comiendo su pollo.
—¡No hables con la boca llena, es asqueroso!— regañó Key.
—No lo sé, quería ir a cenar hoy con ellos cuando Megan salga del trabajo— comentó Minho riendo.
—Entonces es oficial, ya eres papá— dijo Jonghyun con una sonrisa.
—Algo así, primero tengo que ganarme al pequeño después hablaremos sobre si me acepta como su padre o no— dijo el chico.
—Los niños te aman, apuesto a que tu pequeño lo hará también-—dijo Taemin.
—Gracias, Tae; lamento mucho haberlos decepcionado— dijo Minho mirando al suelo.
—Lo importante es que te estás esforzando por remediar las cosas— dijo Onew.
—Sí, es cierto chicos. Gracias por su apoyo— dijo Minho.
—No es nada, además queremos conocer a ese bebé— habló Key.
—Muy pronto lo harán, lo prometo— dijo el rapero.

—Entonces, ¿por qué llegaste tarde?— preguntó Soo Min viendo a su amiga que organizaba unos papeles.
—Estaba hablando con alguien— respondió Megan simple sin voltear a ver a Soo.
—Oh, y ¿puedo saber quién era?— insistió la chica.
—Nadie importante, quedate con eso— contestó Megan.
—¡Oh, vamos! Somos amigas, nos contamos todo, yo te cuento todo y quiero saber qué pasa por tu cabezota que no te deja concentrar— dijo Soo con un puchero.
—Es Min Jung— dijo por fin Megan.
—¿Le pasa algo?— preguntó preocupada Soo.
—Su padre regresó y al parecer quiere convivir con él, pero me preocupa lo que piense mi pequeño— respondió Megan.
—¿Ya se conocieron?
—Algo así, solo intercambiaron un par de palabras y Min Jung no tiene ni idea de que es su padre— habló Megan.
—Oye, he visto a Min Jung y tiene mas rasgos coreanos que americanos no creo que tarde mucho en darse cuenta de que ese hombre y él se parecen demasiado; además, eres su madre debes decirle la verdad, no puedes mentirle por siempre. Dime ¿cuándo planeabas hablarle de su padre?— dijo Soo.
—Cuando llegara a la universidad— respondió Megan más como una pregunta.
—¿Ves? No puedes huir de ese tema por siempre; tienes que atacarlo de frente, tomarlo por los cuernos y arrancarlo de raíz y si para eso es necesario que tu hijo y su padre convivan tú debes permitirlo— explicó la chica.
—Y es lo que haré, ambos tienen que conocerse y lo digo por Min Jung, me preocupa que le cuesta hacer amigos y en los festivales del día del padre no quiere ir. Mi pequeño está sufriendo, y me preocupa que yo no pueda hacer nada— dijo Megan.
—Tú solo deja que las cosas fluyan por si mismas, no presiones al universo para que actúe conforme a tus deseos, deja que la madre naturaleza haga su trabajo y siga su curso— dijo Soo.
—Eres una hippie, ¿cómo rayos has logrado trabajar aquí como abogada?— se rió Megan.
—Oye, no hagas bromas de mis creencias— dijo la chica mirando a su amiga molesta—. En fin, tienes que aprovechar que ese hombre ha vuelto— agregó—. Podrías usarlo a tu favor.
—¿A qué te refieres?— cuestionó Megan.
—Podrías dejar a Min Jung con él mientras tú sales con citas, ya sabes recuperar tu vida— explicó Soo.
—¡Oh, no! Eso no, no podría dejar a mi bebé por ir detrás de hombres. No busco una pareja ni un rato de diversión— dijo Megan.
—Pero no es bueno que estés sola, necesitas un compañero, un amigo y tal vez una figura paterna para Min Jung— insistió Soo.
—No puedo, además los hombres no buscan a una mujer que ya está cargada de hijos. Apuesto a que en cuanto les diga que tengo un bodoque saldrán huyendo y yo no quiero eso para mí— dijo Megan segura.
—No todos son así.
—Pues yo no quiero arriesgarme, solo quiero dedicarme completamente a mi hijo— aseguró Megan.
—Bueno, bueno como quieras— se rindió Soo—. Pero, ¿qué harás ahora que el padre de Min Jung volvió?— agregó con una sonrisa perversa.
—¿Y ahora de qué hablas?
—Hablo de que en algún momento los dos estuvieron enamorados, y ahora que regresó puedes volver a caer. Además, eres una chica guapa, Megan y extranjera, no creo que te hayas enamorado de un pelmazo, supongo que él debe ser un chico muy guapo, tal vez hasta es famoso, y no será tan difícil que vuelvas a caer en sus brazos— explicó la coreana.
—Él no volvió para enamorarse de mí; volvió por su hijo y eso debe tenerlo muy en claro— dijo Megan.
—No puedes hacer nada contra el amor— dijo Soo románticamente.
—Claro que puedo y lo haré, él está aquí por Min Jung y solo por él, yo no entro en esa ecuación— afirmó Megan.
—Está bien, lo que tú digas. Pero mientras tanto ese chico, Min Jung y tú estarán aprendiendo juntos a actuar como una familia— aseguró Soo dando por terminado el tema y caminando hacia su oficina.
"Aprendiendo juntos a ser como una familia" pensó Megan.