SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

Capítulo 20

Se colocó atrás de ella, y rodeó los brazos por su cintura, ella cruzó sus brazos, acariciando sus manos <<Es broma cierto>>-susurró-<<Sabes que no ¿Quieres estar conmigo?>>-respondió de la misma forma-<<Te amo PP>>-ya no importaba los padres de familia desconcertados.
-Les ofrezco unas disculpas a todos los presentes, se solucionará rápido, lo aseguró y para el que ha echo esta broma de mal gusto, que se vaya preparando para su expulsión inmediata.
-Mi amor y ahora?- Patricia puso una cara extraña, ternura y preocupación se veía en su rostro.
-Nunca me habías dicho así.
-En serio Pablo, yo no quiero que te expulsen por mi culpa.
-Aunque sé que siempre fui tu amor.
-¡Pablo, basta!
-Tranquila mi amor, vamos y te explico.
-La diferencia es que ahora estamos- respondió con carta de resignación. -Bueno vamos.
Llegaron, los demás ya estaban ahí, al menos los cómplices, cómo decía Xiomara.
-Y llegaron los "PP"- dijo Xiomara.
-¿A quien se le ocurrió ese apodo?- preguntó Mía, burlándose.
-El loco de Pablo- río Patricia, mirándolo con ternura.
-Que original mi hermano- Valeria siguió con la burla.
-Por lo que sé otras parejas juntan sus nombres, ustedes serían "Papa"- se metió Carlos. -Ya entiendo porqué PP.
-¿Bueno, pidan sus helados no?- dijo Benjamín, quién también seguía riendo. Se dirigieron al estante, donde podías elegir el sabor que querías.
-Buenas tardes, de cuántas bolas van a querer?
-Yo ya tengo varias- Pablo empezó a reír.
-¡Pablo!- trató de fingir molestia por su comentario, la risa le ganó.
-Bueno, deme de tres.
-Y usted, señorita?
-A mí de dos.
-Pero si acá ya tienes dos- le susurró, agarrándole de la cintura.
-¿Dónde cariño?- se empezó a burlar.
-Joven, de qué sabor?
-¿Cómo que dónde?- le empezó a hacer cosquillas. -Vainilla, chocolate y lúcuma.
-Y usted, señorita?
-Menta y eso de ahí.
-Qué es eso mi amor?
-¡No sé, pero se ve bonito!
-Es chocochip, señorita- dijo riéndose.
-Sí, eso.
-Ay mi amor, por eso te amo.
Regresaron a la mesa, Patricia estaba entusiasmada por saber como habían participado todos.
-Yo cuento- ofreció Mía.
-Mejor que caga uno diga lo que hizo- respondió Xiomara.
-Yo mande a hacer el cartel con mi hermano, él sabe de eso- dijo Benjamín, con orgullo, mientras molestaba a Xiomara.
-Yo propuse venir acá, sabía que querías saber todos los detalles- habló fuerte.-Por algo somos mejores amigas- bajó la voz, cuando se dió cuenta que Benjamín ya no molestaba a Xiomara, <<se supone que yo le gusto>> pensaba.
-¡Gracias hermosa! A todos gracias.
-¿Espera, yo seré expulsado y no me agradecerás?- Carlos trató de decirlo en broma.
-De eso te quería hablar- Pablo le dijo a Patricia, mientras miraba enojado a Carlos.
-Sí, aclararlo de una vez.
-A ver, calmense tórtolos, yo me ofrecí porque de todas maneras ibs a ser expulsado- empezó a reír, todos quedaron asombrados, aunque ni tanto, era Carlos.
-Gracias, en serio- dijo demasiado avergonzada.
-Cierto, porqué te van a expulsar- preguntó Pablo, con intriga, en esos días le estaba preguntando y Carlos lo evitaba.
-Por lo del cartel pues- respondió nervioso.
-Pero dijiste quere igual te iban a expulsar.
-Ah sí, pero el director a exagerado, para que los padres se tranquilicen, me van a suspender.
-¿Pero porqué?
-Le respondí a la vieja de Tapia.
-¿Por eso?
-Sí pero sólo es suspensión de un día.
-Bueno, ya está todo aclarado no chicos?- se metió Patricia, calmando las aguas.
-Yo obligué a Benjamín que te distraiga con lo de su "perro", me tocaba eso a mí pero soy mala para esas cosas- dijo Valeria, riéndose de sí misma.
-Gracias cuñis- Patricia quería ver la expresión de Pablo con lo que acababa de decir, vio en su rostro, incomodidad, al igual que en Valeria, ella tenía que unirlos.

Terminaron sus helados, se fueron en grupo, dejaron a Xiomara y a Benjamín en el Museo de Artes, quedaba por sus casas, Carlos tomó el autobús, Pablo y Patricia dejaron a Valeria en su casa, abrió Carolina, mamá de Valeria.
-Hola hija.
-Hola mamá.
-¿Por qué tan tarde?- reclamó mirando a Pablo, para ella, su hija nunca tenía la culpa.
-Buenas tardes señora- Patricia saludó amablemente. -<<Saluda>>- le susurró a Pablo.
-Buenas tardes- le respondió Carolina.
-Buenas tardes- dijo él.
-¿Tu amiga hija?- preguntó más que por interés, para obviar el saludo de Pablo.
-Mamá, mi hermano te ha saludado.
-Buenas tardes chicos.
-Soy Patricia, amiga de Valeria, enamorada de Pablo- ya no respondía tan amable, le llegó el desplante que le había hecho a Pablo.
-Patricia, vámonos- dijo incómodo.
-Espera
-¿Ya se llevan bien?
-Sí mamá.
-Siempre debieron hacerlo chicos- se metió Patricia.
-Con todo respeto Patricia, esto es algo de hermanos.
-Con el mismo respeto señora, entonces, ambas salimos sobrando.
-Valeria, entra.
-¡Ya voy! Disculpen, ya no la aguanto.
-No importa, es tu madre- dijo Patricia.
-Sí mi madre, burna la que me tocó- respondió girando los ojos.
-¿Por qué no vives con nosotros un tiempo? Con la escusa de unirnos más- propuso Pablo.
-Claro, eso leer puedes decir a tu papá- volvió a meterse Patricia.
-Me encanta que te preocupes por mí- le dijo con ternura.
-Pero no creo que tú mamá se sienta cómoda.
-Yo la conozco, al principio no le va a gustar las idea pero luego entenderá.
-Valeria, tu pasa de una vez- salió Miguel.
-Hola papi- Valeria lo abrazó fuertemente.
-Hola señor- Patricia, saludó cortésmente. -<<Oye, es tu papá, sa..>>- Pablo no la dejó terminar.
-Hola papá.
-Hola hijo- respondió contento. -Me alegra que seas la primera enamorada de mi hijo- dijo sonriendo.
-¿Primera?- Patricia y Valeria empezaron a reír.
-Sí, las otras chicas que venían con Pablo, silo duraban una semana, era otra de las ciudad por las que discutíamos, hasta que te conoció.
-Gracias señor.
-Papá eso ya pasó- dijo totalmente avergonzado. -Lo que te quería decir era sobre Valeria.
-Sí, quiero vivir con mi hermano por un tiempo, para conocernos más.
-Definitivamente no.
-¿Por qué?
-¿Le has consultado a tu mamá?
-No, pero es obvio que va a decir que sí, tu deberías saberlo, la conoces más que yo.
-Igual habla con ella.
-Esta bien.
-Pablo, vamos por favor, me deben estar esperando en mi casa- habló mirando la gira en su celular, aún era temprano, pero quería pasar tiempo a solas con él.
-En serio eres diferente a las demás- dijo Miguel. -Seguro mi hijo ha visto eso.
-Gracias señor, hasta luego- <<Ojalá que a mi papá lo tome de la misma forma>> pensaba. -Chao Vale.
-Hasta luego papá- lo abrasó fuerte, Patricia, si los estaba acercando, no se había equivocado con ella. -Chao enana.
-Hasta luego chicos.

El sol se iba escondiendo, Patricia se había imaginado varias veces momentos como esos, varias noches sin dormir por pensar en él, nada de esos pensamientos se comparaban con el ahora, él la miraba tiernamente, su padre tenía razón, el había visto lo diferente que era Patricia, se conformaba con conversar con ella toda la vida, no había necesidad de siempre besarla, o eso creía porque nunca antes había deseado tanto a una mujer, por más hermosa que fuera.

-¿En qué piensas?- dijo ella, sin dejar de mirar su rostro.
-Cómo decirle a mi mamá que Valeria viva con nosotros.
-Pero tú dijiste que iba a aceptar.
-Y lo va hacer, pero por mí, sé que la va incomodar.
-Sí, pero eso no va a ser para siempre, Valeria, es la menos culpable en todo esto y yo creo que tú mamá sabe eso.
-Sí, mi madre es inteligente, ella entenderá.
-Sí, tú has salido a ella.
-Porque soy inteligente.
-Porque estás conmigo- empezó a reírse.
-¿Y yo soy en soberbio?
-Es broma- dijo mientras achinaba sus ojos y arrugaba su nariz.
-Eres hermosa- colocó sus cabellos por detrás de la oreja.
-Bésame- no lo dudó ni un sgundo, ella le siguió, tenía que ponerse en cuclillas, estaba muy chaparra.