SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

Capítulo 10

Kasandra
-Mamá, llegó Ximena-gritó fuertemente.
-¡Dios, cállate! Tu hermano está durmiendo.
-Todo el día duerme ese niño!!
-Señora buenos días.
-Hola Ximena, feliz cumpleaños.
-Gracias señora.
-Hoy almorzamos polllo al horno, pueden esperar, en un rato estará.
-Sí mamá ya sabemos. Ximena ven, vamos a mi cuarto.
Las dos se dirigieron al cuarto de Kasandra que quedaba en la parte trasera, amplio y bonito, se sentaron sobre la cama y empezaron a conversar, fue cuando Ximena se dio cuenta de la verdadera razón por la que Kasandra le invitó a su casa.
-¿Y cómo estás?
-Ahí bien.
-Mia me contó lo del baño, me siento demasiado culpable.
-Sabía que tenía que tener algo de malo esa chica-lo dijo en son de broma-No sabía que te hablabas con ella. No que no te caían?
-Ella me habló, para decirme lo del baño. Ella me está cayendo mejor. Patricia jamás en la vida.
-Ah. Tanto odio?- se burló Ximena-A mí sólo me llega que se comporte como regalona, siempre detrás de Pablo- terminó enfureciéndose.
-Esa es la Ximena que ne gusta!!
-A sí, cuál?
-La que me va ayudar con una travesura.
-Cuál?- miró con cara de intriga y algo de preocupación. Kasandra se le acerco al oído.
-Buenas tardes Kas- saludó Adriano, novio de Viviana, algo sudado y con mal olor.
-Hola Adriano, no sabía que estabas aquí- le respondió de mal humor.
-Sí Kas, eso ya lo hablaremos con tu madre.
-Buenas tardes señor- se metió Ximena, con la intención de dejar atrás el momento incómodo entre Adriano y su amiga.
-Oh no, no soy señor, tengo apenas 28 años ¿Y tú eres?- le respondió de una forma más coqueta de lo normal. Ximena había causado la atención de Adriano.

Viviana y Kasandra se dieron cuenta de la extraña actitud de Adriano, y aunque madre e hija tenían una difícil relación, para esto se volvían muy unidas. Kasandra levantó las cejas al mirar a Adriano y Ximena conversando, y con la mirada intentó mostrar a su madre la actitud diferente de Adriano, Viviana le respondió de la misma forma, es decir imitando su gesto, intentando demostrar su enojo.

-Bien, tomen asiento por favor.
-Gracias señora- respondió Ximena, más incómoda aún, se había dado cuenta de la actitud de Adriano, y a la vez, la reacción que causó en Kasandra y su madre.
-Gracias mamá.
-Gracias amor.

El almuerzo, muy delicioso. Viviana y Adriano se la pasaron preguntando a Ximena sobre diferentes cosas, Viviana fingiendo interés, Adriano por curiosidad, interés y llamar su atención. Kasandra, como de costumbre, en su casa no sumaba ni restaba, es decir no le presentaban atención, tal vez por esa razón buscaba llamar la atención en el colegio.

-Mamá, Ximena ya se va, es tarde.
-Sí hija, es lo mejor- hizo una pausa, antes de seguir hablando.
-Porque se va hacer más noche.
-Hasta luego señora. Adiós Adriano ¿Kasandra, me acompañas?
-Sí.

Bajan por la escaleras negras, la tarde se volvía oscura, Ximena había perdonado a Kasandra, le agradó el gesto de haberla invitado a almorzar. <<Es mi mejor amiga, yo soy la de ella, a pesar de nuestros errores>> pensaba, mientras terminaban de bajar las escaleras.

-¿Oye, cómo estás haciendo para bajar tan rápido de peso?
-Buenos hábitos alimenticios Kas- mintió.
-Ah.. Yo intenté, pero mis senos bajaron.
-No tienes, no gustas, mírate Ximena, ya nadie se te acerca.
-Quiero enamorar por mi sonrisa, no por mi cuerpo. Para ser más exactas, no quiero ser como tú.
-Al menos yo no soy una zorra y coqueteo con el novio de tu mamá.
-Qué te pasa? Estás mal, Kasandra.
-Tú no tienes derecho a criticar a Patricia, eres igualita.
-Mejor parecerme a ella que a ti, querida- se fue llorando, se había equivocado respecto a su "mejor amiga".

Otra semana más de abril, entre la segunda o tercera, no recuerdo muy bien. Todos van llegando al colegio, las seguidoras de "BTS" veían videos o escuchaban su música, Kasandra fue en busca de Luz y contó el beso de Pablo y Patricia, Ximena que pasaba por ahí lo escuchó todo, e incluso se molestó más que la propia Luz. En eso llegó Patricia, antes de que suene el timbre se quedó conversando con Mia, Victoria y unos chicos de quinto año.

-Mira, ahí está, si no le haces nada todos creeran que eres una cobarde.
-Sí sí, cállate Kasandra, yo me encargo- respondió Luz, mientras se dirigía a Patricia.

-Eres una perra- Luz volteó a Patricia, agarrando fuertemente su brazo.
-Déjame- apartó ka mano de Luz -Veo que te contaron lo del cumpleaños de Valeria- se burló y luego le dió la espalda.
-Te crees bien pendeja no?
-Pendeja yo? Pendejo tu novio, que está contigo y quiere estar conmigo- los de quinto empezaron a silbar, gritar y burlarse de Luz por lo que dijo Patricia.
-Pero tú eres quien lo beso.
-Todos saben que si él no hubiera querido no hubiera aceptado mi beso. Ahora déjame en paz- en ese momento sonó el timbre, todos fueron a su salón, Luz le seguía diciendo estupideces a Patricia, hasta que ella le cerró la puerta en su cara.

Pablo recién llegaba, se cruzó con Luz, ella le hizo una escena de celos, el la terminó. Deseaba tanto tener a Patricia a su lado, por lo que ese día le pediría para estar, era muy pronto, pero ya que ella había aceptado su gusto por él, decidió hacerlo.

-Me exitas Patricia- Andy la agarró de la cintura.
-Ay no, ya llegó!- Patricia soltó una carcajada y logró soltarse.
-Asu me botas? Esta bien- fingió resentirse.
-Sabes que es broma, cariño- le respondió algo coqueta, pero solo por joder.

Andy y Patricia tenían bastante confianza, demasiada que parecía otra cosa, incluso para Pablo, quien había visto todo.
Fue cuando Pablo por primera vez había sentido celos, él había visto a varias chicas con las que salía coquetear con otros, él se molestaba, no por celos, si no había amor, mucho menos celos, él se molestaba porque quedaba mal, sin embargo con Patricia todo era distinto, ella ha echo que él sienta algo nuevo, para ser más exactos, celos. Aquellos celos él los recibió con enfurecimiento, pero prefirió hacer algo que a Patricia le causaría decepción.

-Xiomara ven, tú te vas a sentar conmigo.
-No Kas, hoy me toca con Ximena.
-No se te vaya a pegar lo..
-Yo me sentaré con Ximena- se metió Pablo, abrazando a Ximena cariñosamente, ella se había dado cuenta de su intención, es decir darle celos a Patricia, pero no le importó le gustaba tanto como para no seguir su juego. <<Sí que era diferente a Patricia>> pensaba Pablo, quien volteaba de rato en rato, para ver si a Patricia le había dado celos, pero al parecer ni cuenta se había dado, o al menos eso creía él.

-Pablo- le habló Patricia, quien aprovechó el cambio de hora para acercarse a su sitio. Pablo fingió no haber escuchado.
-¡Oye imbécil te estoy hablando!
-¿Qué pasa Fernández, no puedes vivir sin mí?- le respondió de la peor forma. Los demás rieron.
-Pero si tú eres el que no deja de buscarme, ojalá que Luz te controle, así ambos dejan de joder.
-Oye pero no te conviene, tu amas a Pablo- se burló Ximena.
-Yo no me dejo tocar por él, mi amor, no te confundas- hizo una pausa -Y a mí me dicen perra?!- pensó haberlo dicho en su mente.
-Ximena la miró con odio.
-Ya no te va a molestar, no estamos, yo tampoco lo aré, Andy me ganó, seguro el te aprovechará muy bien- dijo Pablo, todos escucharon. A Patricia se le llenaban los ojos de lágrimas, las resistió y no las dejó caer. Se acercó a Pablo, más que las veces anteriores, miraba sus labiis con deseo, haciéndole creer que se moría por un beso suyo y aunque era cierto, el dolor que le había hecho sentir era grabde, tenía que pagar. Él cerró los ojos y ella aprovechó el mínimo momento para darle un golpe con las rodillas, en su parte.
-A ver si se te hinchan y tienes un poco más de huevos para admitir lo que me dijiste! Es que no te acuerdas? <<Yo no busco a otras, te busco a ti>>- se burló de lo que Pablo le había dicho el día anterior.
-Mierda, eres u..- Pablo calló, por más molesto y celoso que este, la quería tanto como para decirle perra.
-Sí sí, perra, golfa, lo que sea , pero oye, te enamoraste de esa perra y golfa.