21. Mientras tanto en España.

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Narra Mario:

Un mal presentimiento recorrió mi cuerpo. Y es que Italia no es lugar para una chica tan guapa como Roxy. Se que "no somos nada" y "no debo preocuparme por ella" pero no puedo evitarlo. Me hace sentir especial. Como si con ella no hiciese falta fingir que soy un Don Juan y me las ligo a todas. Como si pudiese dejar de fingir que soy un creído y ser como soy. Ella saca lo mejor de mi y lo peor también.
Si, lo sé, un mensaje donde solo le decía que se cuidase de Kike no fue lo mas correcto. Que debí decirle que disfrutase de lo bonito que es Italia. Que visitase cada uno el los lugares y que le prometo que nada mas tenga el permiso la llevaré a recorrer en país entero. En moto. En caravana. En furgoneta. En coche. O incluso andando. Deberia haberle dicho que la esperaré aquí, y que se cuidase, que merecía ser feliz y vivir el momento. Pero tan imbécil que soy, soy incapaz de decirle algo así y mi egoísmo me ha llevado a pensar que tendría algo con Kike... Y ahora yo le he metido esa idea en la cabeza. Seré imbécil.

¿Cuanto estaríais dispuestos a arriesgar por la persona a la que amais?

Lo cierto es que yo todo.

No se como explicarlo, pero Roxy es diferente a todas las chicas que he conocido. Ella es preciosa a su manera. Tiene una fuerte personalidad. No se deja dominar ni tampoco le gusta dominar. Es una chica sencilla y a la vez compleja. Tiene su estilo propio y un corazon enorme aunque trata de esconderlo. Ella es capaz de amar. Aunque no se lo crea, puede amar. Y se que amará como nadie ama. Fuerte. Sincera. Amará con el corazón que oculta detrás de esa oscura coraza. No se porque se la creó, ni quiero obligarla a contarmelo, pero voy a encargarme de que esa coraza desaparezca y ame como jamás ha querido amar. Amará sinceramente. Amará de tal forma que querrá darlo todo por esa persona. Sea yo o me rompa el corazón intentando enseñarla a amar, prometo, juro y pido que ella amará. Se merece ser feliz y conocer al amor. Cueste lo que cueste.

Decido andar a la casa secreta. Nuestro secreto.
Por el camino aparece Melissa.

-Oh, Mario. -Se tira a mis brazos. Que pesada.
-Melissa. ¿Como vas?
-Genial Mario. -Me besa en la mejilla ¿que le ha dado? -¿Y tu noviecita?
-¿Que?
-Oh vamos, todo el mundo sabe lo que pasa entre la rara y tú.
-Se llama Roxy. -Me cabreo.
-Como sea. ¿Cuantos polvos van?
-No ha habido sexo.
-Que mal mientes. Se tu cara cuando has tenido sexo recientemente y tu en esta semana has llevado mucho esa cara.
-Melissa... Lo que pasó en tu casa, nunca ocurrió.
-¿Acaso le mentiste a la rara acerca de tu virginidad? ¿No le dijiste que yo fui la primera?
-Es que tu y yo nunca tuvimos sexo.
-No intentes fingirlo. Tu eras el pequeño novato y querías experimentar con esta diosa.
-Melissa, igual deberías aprender un poco de las cosas que te pasan y darte cuenta que no eres el centro del mundo.
-¿No será que te has enamorado de la rara? ¿Es eso? Pobre inocente. -Se ríe.
-Por dios Melissa, ¿quieres superar ya que si no estoy contigo es porque a nadie le gusta tu personalidad? El que aceptase estar contigo estaría enfermo. Eres la persona más malvada que existe y no. No te quiero. Ni te querré. ¿Quien podria querer a alguien así? ¿Quien?

Tras eso avanzo y la dejo atrás.
Llego al edificio y entro en la habitación. Aún huele a ella. La ultima vez se dejó una chaqueta. Y esa chaqueta es mi ambientador.
Suena a acosador. Tal vez. Pero es que me la imagino. Me imagino a ella aquí y conmigo. Cuando me mira con esos ojos. Cuando sonríe, esa sonrisa tan bonita que tiene. Me gusta cuando gime. Cuando grita. Cuando dice mi nombre. Me gusta cuando me abraza. Y sus besos, ¿a que loco no le gustaría?
Roxy es la mujer perfecta.
Y no se merece que le siga ocultando más. En cuanto vuelva hablaré con ella, sobre Melissa. No está bien que le mienta. Aunque aquello no significó nada, lo hice. Que tan imbécil fui al querer que ella fuese la primera.
Y es que la verdad es que acostarse con Melissa, la que hasta que llegó Roxy, era la chica mas guapa del instituto, te hacia sentir muy poderoso y ademas, si Melissa te veía atractivo, todas las chicas lo hacían. Así pues, me convertí en el chico más "guapo" del instituto. Supuestamente Melissa y yo haciamos buena pareja, pero nunca me gustó. Solo lo hice por la imagen, estúpido e inmaduro por mi parte, pero así somos los adolescentes, estúpidos e inmaduros.

Nota de la autora:

¡Hola! Perdonad por el retraso pero estuve ocupada, de vacaciones y etc... Bueno ¡AQUÍ ESTÁ UN CAPÍTULO MAS!
Espero que lo disfrutéis, gracias por seguir♥

¿Finales Felices?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora