Imposible estar contigo, profesor II ©

Capítulo 17. Secuestro.

Lean la nota de autora al final. ES IMPORTANTE. 

advertencia: Si no lo hacen no respondo si por la noche sus mamitas comen sus cabezas por no hacerme caso.

Capítulo 17. Secuestro.

Jhon.

Me alejo antes de que mi orgullo se derrumbe y vaya abrazarla. La amo, pero desde el sábado, me prometí a mí mismo que no haría nada para recuperarla hasta que todo esto se supiera, hasta que la verdad saliera a la luz.

Antes de dirigirme hasta mi oficina recibo una llamada, la cual contesto de inmediato.

—Hola, querido. —Lucy dice con un tono cariñoso, pero me irrita que sea tan falsa, no sé cómo ella puede prestarse para este show, no se dé a dónde saca las fuerzas para ser tan falsa, para mirarme a la cara cuando sabe lo que hace, lo que le hace a su propio padre, hasta engaña a su familia.

—Lucy, ¿Qué sucede? Sabes que estoy trabajando y...

—sí, sí, lo sé. —ella me corta antes de que pueda decir algo más. —pero necesito que alguien recoja a Casey del jardín, no puedo ir porque estoy solucionando unos problemas que hay en el casino de papá.

—está bien, iré por ella.

Ella me dice que me ama y luego cuelga, hoy tenía preparada reunirme con la persona que me ayudaba a desenmascarar a Lucy y Ray, así que ir por Casey no me molestara, podría aprovechar para llevarla a tomar un helado.

Hoy tenía preparado decir todo, así que calmaría a Casey, intentaría animarla, porque cuando la bomba explotara, ella estuviera bien.

Sé que Casey es mi hija y me duele mucho que ella se quede sin su mamá, pero cuando recuerdo que esa persona es Lucy se me pasa, sé que Casey estará mucho mejor sin ella.

Una parte de mí, se imagina a Aria cuidándola, pero eso es algo que está lejos de ser real, no puedo pedirle a ella que lo haga, ¡es solo una joven! Aún tiene que vivir, esa es otra de las razones que pienso al estar con Aria, yo la amo demasiado, pero no solo está la edad, o que su familia sean amigos míos, sino que yo tengo a Casey, no sé cómo se sentiría Aria que solo tiene dieciocho siendo madrastra tan joven. Me abruma todo esto.

A la vez me siento mal, ¿Por qué hay tantas cosas que parecen querer separarnos? ¿Por qué no puede ser una relación normal? No tengo más clases que repartir por lo que me dirijo hacia mi auto, mientras manejo hacia el jardín de Casey, sigo recordando en todo lo que pasó la noche con Aria, todo pareció ser tan perfecto, y al final, termino mal.

Y es entonces cuando pienso en eso, tal vez mí la relación de Aria y yo no sea perfecta, no sea color de rosa, pero tal vez es eso, las cosas perfectas terminan mal, porque se necesita algo de obstáculo. Por eso los narcotraficantes terminaban en la cárcel, por eso los políticos ladrones resultaban bajo las rejas, porque ellos buscaban el camino fácil, el más perfecto para lograr lo que querían.

Aunque me estuviera engañando a mí mismo, llegue hasta el jardín pensando en eso.

Casey tomaba un helado mientras me contaba cómo le había ido en su escuela, cuando pensaba en desatar toda esta verdad, Casey siempre estaba en mi cabeza, impidiéndome a que lo hiciera, y en otras alentándome. Ella sufriría mucho cuando supiera todo, cuando estuviera mayor le dijeran lo que había hecho su madre, y tal vez me odiara, porque había sido yo quien la alejo de ella. Pero si Lucy seguía haciendo lo que hacía, la que terminaría mal seria Casey, ella sufriría más adelante si no hacia todo esto.