Capítulo 37. Persecución

3.4K 259 17
                                    

Capítulo 37. Persecución

Las manos de John me detienen y él me mira, mis ojos llenos de lágrimas y mi ira me impiden sentir algo más allá de la rabia o el dolor, sus brazos impiden que continúen y causan un tipo de calmante para la rabia que nace desde lo más fondo de mi pecho.

Esta vez no será tan fácil olvidar lo que hizo.

—llévenla al hospital. —dice George, Logan toma a Leila en sus manos y yo ni siquiera puedo mirarla mientras su estómago está manchado de sangre.

Ellos se van mientras la culpa me invade, Leila ni siquiera sabía algo, ella siempre trato de ayudar sin saber, de estar ahí sin pedir explicaciones.

Y ahora está sangrándose, posiblemente ya ni siquiera respire y eso me llena tanto de rabia hacia mí, hacia Lucy que logró escaparse, que una parte de mi me dice que no puedo dejar las cosas así y ahora esta Casey. No podemos dejar que ella se escape y se lleve a su hija.

—vamos a ir detrás de Lucy, no permitiré esta vez que se salga con la suya.

—iremos nosotros, tu quédate.

— ¡claro que no! —me alejo de John y empiezo a caminar hacia a fuera, él intenta detenerme pero yo me meto a un auto, lo enciendo rápidamente pero antes de poder arrancar la puerta del copiloto se abre. —vete John...

— ¡Uff! Que suerte que no soy él. —miro a Ethan sin poder creerlo, él sonríe diciéndome que está conmigo, antes de arrancar vuelven a abrir la puerta y Megan entra mirándome.

Esta vez no digo nada, ella y yo sabemos que no hacen falta las palabras, yo la perdone en el mismo momento en que me dijo que me amaba, por más que la idea no me fuera tan creíble y que pensara que ella se había equivocado.

Todos nos equivocamos, y ella solo lo hizo por amor.

Pero no alcanzo a arrancar, la puerta del copiloto se vuelve a abrir y John saca a Ethan, este se queja pero le pide que se pase para atrás y se monta a mi lado.

—no me detendré. —le digo sin mirarlo a los ojos, puedo sentir la ira correr por sus venas pero eso no hará que me detenga.

—yo no te lo pediré.

Y solo presiono el acelerador, sé que no le gusta la idea de estar aquí, o de que yo esté aquí, pero esta vez no me detendré a pedir ayuda, encontrare a Lucy y hare que ella pague por lo que hizo.

—se fue en un BMW negro. —anuncia Ethan señalándome el camino que vio tomar a Lucy, yo voy hacia esa dirección acelerando, por suerte me puse el cinturón de seguridad y veo como Ethan hace lo mismo.

Acelero cuando veo un auto detrás de mí que nos persigue, es Ray y Edwin, sigo acelerando sin importarme que ellos vengan necesito encontrar a Lucy.

De pronto, veo el auto y sigo acelerando.

—está a tres autos mas adelante. —anuncia Ethan, la energía que causa el motor en mis venas hace que me olvide de todo, y acelere cada vez más haciendo que Megan pegue un chillido.

—Aria.

Sé que su amenaza silenciosa me pide que vaya más despacio, pero Lucy está manejando muy rápido y necesito alcanzarla así que vuelvo a presionar contra el acelerador y traspaso varios carros que pitan al verme, sin embargo solo sigo traspasando autos hasta que estoy detrás de Lucy, necesito que se baje, impedir su camino.

Intento ponerme delante de ella pero Lucy ya sabe que estoy tras sus talones, así que me rebasa haciendo que dé una vuelta que casi me hace perder el control, pero sigo arrebatándola como si de una carrera de autos se tratase.

Imposible estar contigo, profesor II  ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora