-Buenas tardes, Sophie -contestó mirando su alrededor-. Sabes, no estoy seguro que esta clase de lugares este... abierto.
-No vamos a entrar, solo a caminar ¿te parece bien? -refutó caminando hacia él. Lo había visto mucho antes de llamarlo y es que ella ya llevaba varios minutos en el lugar. Un pequeño paseo frente a un museo.
-Está bien, solo caminar -murmuró frente a ella-. Te extrañé. -Soltó sin pensar. Sin desear más que ese sentimiento se correspondiera. Lo empezaba a entender, parecía que dos días le habían sido suficientes para entender quienes a sus espaldas temían aunque no entendía su temor. No, de Sophie no se podía temer-. Lo siento, yo...
-También te extrañé -murmuró-. Han sido días difíciles ¿no? -comentó empezando a andar con él a su lado.
-Solo... -suspiró-. Más de lo mismo. Y mi manager haciendo sus deberes de niñera -esbozó sacando una sonrisa en ella-. Empiezo a entenderla.
-¿Qué empiezas a entender? -preguntó.
-Sophie, yo... yo he empezado a ver muchas cosas de otra forma, muy distinta a como siempre las veía y también dejé otras a un lado. Eso no sucedía a menudo, digo, eso nunca sucedía -esbozó negándolo todo como si de esa forma también estuviese negando lo que pensaba.
-Ayer escribí una escena dolorosa -esbozó desviando el tema. Siguió el camino de piedras con pequeños pasos y los ojos en el empedrado suelo-. Me hizo llorar. Lo que confirma que soy una sentimental -rio.
-¿Por qué te hizo llorar? ¿Qué sucedió? -Alzó la vista contemplando la mirada apaciguada y tranquila de Kev quien expectante tan solo podía quedarse mirándola. No le era necesario hablar cuando estaba frente a ella.
-Porque quiero una relación como la de ellos -musitó-. Quiero algo tan lindo como la de mis personajes... contigo.
ESTÁS LEYENDO
Un café por amor
Short StoryA veces nos encontramos con todo tipo de personas con las cuales no volveremos a vernos. Otras veces tendremos la dicha de volver a conversar con ellos, pero son contados los momentos en que conoces a una persona especial. Sophie Red es el seudónimo...