Capitulo 13

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Dos semanas después, habíamos pasado todo lo que teníamos en el apartamento de Mia, a nuestra Casa, la despedida por parte de Mia y Julia fue emotiva, parecían que no se volvieran a encontrar, solo nos iríamos a un par de calles del apartamento.

Cuando Mia ya tenía 4 meses de embarazo, empezamos a llenar el cuarto del bebé, le compramos su cuna, su coche, sus juguetes, ropa, obvio amarilla por que aún no se sabía que sexo era, y no lo queríamos saber hasta el momento del parto. Mia le hablaba a nuestro hijo las 24 horas al día, ya su barriga se podia notar un poco, no faltaban los antojos de fresas con crema de leche a las 3 de la mañana, y batidos de mora con galletas oreo, para desayunar. Un tiempo me sentí "embarazado" ya que mis nauceas no sesaban, y mis dolores de cabeza menos.

Mia iba a todos sus controles, la primera ecografía, no logre ver nada,pero ya en la tercera logre ver a mi hijo, muchas lagrimas brotaron de mis ojos..... teníamos ya una lista de posibles nombres de niños y de niñas.

Salomé, Anna, Victoria, Stefany, Nancy....

Ángel, Ray, Jack, Dylan, Peter.........

Estábamos emocionados....
Un día en el que visité a mi madre al cementerio, le lleve unos pequeños zapatos, los puse en su lápida.

"Nancy Todd, querida madre y amiga, la hermosa flor de mi vida..... Palabras de Josh Pete Peterson Todd (hijo)"

Odiaba leer mi nombre completo jejejejeje pero al parecer ni a mi madre ni a Mia les molestaba jejej,
Entre lágrimas le conté a mi madre que seria abuela, el género no se sabría, pero lo unico que le pedí a mi madre, era que protegiera a mi adorado hijo que venia en camino, desde el cielo......

***

Perdón por la interrupción de mi increible historia, pero recordar esta parte de mi vida es un poco dolorosa.......

....

...... prosigo.!

***

Al terminar de "conversar" con mi madre en el cementerio, pasé por la heladería y le compré un batido de fresas, el cual siempre me pedía Mia, al llegar a casa..... (que bien se siente decir, al llegar a casa jajajaj).... encontré a Mia escribiendo en su pequeño libro de tapa roja, le pregunté que tanto escribía en ese libro.....

-solo cosas para no olvidar.... me respondió.

No seguí preguntando sobre el libro. Era el momento de dormir, mientras me duchaba Mia leía en la cama, un libro de maternidad durante y después del embarazo, cuidados y demás.

Nos dispusimos a dormir......
Esa madrugada, a las 4:30 am, Mia me levantó con un estremecedor grito....

-PEEEETEEEEEE!!!

Salté de la cama, encendí la luz lo mas rápido que pude y me llevé la grata sorpresa de que las sabanas estaban llenas de sangre. Provenían del vientre de Mia, puse mis brazos bajo sus piernas y su cabeza, la cargué, baje cuidadosamente las escaleras hasta llegar al garaje, abrí mi carro y la puse en la parte de atrás del carro, volvi a subir, me puse una camisa y mis zapatillas, empaqué en un morral ropa de Mia, al escuchar un grito de Mia, pero esta vez de dolor, bajé lo más rápido que pude. Entré en el auto y salimos rumbo al hospital, se me hacia difícil ver por donde conducía, ya que era una noche lluviosa.... Mia acostada en los asientos de atrás, se quejaba mucho por el dolor, tardé unos 30 minutos en llegar al hospital.

LA DEBILIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora