Máx despertó debido a la voz de aquel hombre que resonaba por todo el hotel. "Buenos días, son las 8 am. Comienza un nuevo día.". Máx gruñó un poco al escuchar esa voz, no contento con encerrarlos en aquel lugar ahora tenía que poner una maldita alarma con su voz a esas horas de la mañana. Al final después de varios intentos fallidos de volver a dormir decidió ir a desayunar.
Max bajó las escaleras y se sorprendió al ver a Candy, a Harry y a Sonia. Los 3 estaban sentados en el suelo del vestíbulo rodeados de botellas de cristal vacías y montones de fichas de colores que se alzaban como pequeñas torres de un castillo. Al parecer estaban jugando al poker.
- ¿Están jugando al poker a estas horas?
- Hola Maxine -dijo Candy con una voz de ultratumba- Buenos días.
- ¿Cuanto tiempo llevan jugando a esto?
- Toda la noche.
- ¿¡Que!?
- No te sorprendas... -dijo Harry con la misma voz cansada que su compañera- Estar despierto toda la noche jugando es parte de la rutina se un Gamer ...
- Pues no los veo muy bien que digamos... Por favor Sonia dime que no estuviste jugando con ellos toda la noche.
- Claro que no, jugué con ellos un poco y luego me fui a dormir ¿Tu no jugaste con nosotros?
- El fue de los primeros en irse a dormir anoche - Dijo la voz de Rex el cual bajaba las escaleras bostezando-.
- Espera... ¿Tu también jugaste con ellos?
- Claro, jugamos los 15 pero íbamos perdiendo contra esos dos asi que nos íbamos a dormir tras perder nuestro dinero.
- ¿Fui el único que no jugó?
- Iba a llamarte para que te unieras a nosotros pero cerraste tu cuarto con llave.
- ...
- No te preocupes, podemos volver a jugar esta noche.
- Vale... ¿Cuanto duró el juego aproximadamente?
- Veamos, Sonia y yo fuimos los últimos en perder y nos fuimos a dormir sobre las 1 o las 2 de la mañana.
- ¿Y aún siguen jugando?
- Ambos están empatados con casi el mismo dinero -aclaró Sonia-.
- ¿Y esto acabará algún día?
- Creo que ya lo ha hecho -señaló Rex- Se han quedado dormidos
- Estaban en su límite...
- Yo también estoy en mi límite - dijo Max- Me muero de hambre.
- Si no recuerdo mal Audrey dejó los desayunos preparados anoche -comentó Rex-.
- Genial ¿desayunamos?
- Sí, claro.
Los 3 dejaron atrás a Candy y a Harry y fueron a la cocina, allí había varios platos bastante deliciosos que habían estado toda la noche esperando a ser comidos. Cada uno tomó un plato y Máx se quedó con un batido de frutas y un bollo de crema. Empezaron a desayunar hasta que Audrey entró en la sala y gritó al ver la escena.
- ¡Max! ¡Suelta eso ahora mismo! - ¿E-eh?
- ¡Te estás comiendo el desayuno de Mikan!
- ¿Q-que?
- Le preparé un desayuno especial para su sesión de natación matutina.
- S-sí... Lo sabía pero no sabía que era este... Lo siento mucho.
- No te preocupes -dijo quitándole el batido de frutas- al menos no te bebiste su batido de proteínas... terminate el bollo, miraré que puedo darle a Mikan.
- Lo siento.
- No pasa nada, es mi culpa ya que debí ponerle una nota con su nombre.
Entonces Audrey se metió en la cocina. Por otra parte Max tomó otra bandeja de desayuno y se sentó a comer en silencio y avergonzado. Se sentía mal por haber cometido aquel error pero sus amigos se encargaron de consolarlo un poco.
Después de un rato llegó Mikan vestida con su ropa normal al contrario que el día anterior. Al parecer había venido a recoger su comida antes de empezar a nadar como siempre. En ese momento Max intentó no destacar y al parecer funcionó ya que la chica solo dijo un hola y se llevó la comida después de agradecérselo a Audrey.
Después de eso los 3 terminaron de comer y se fueron de la cocina, esta vez Audrey también dejó la cocina ya que su trabajo había terminado. Sin mucho que hacer el grupo se separó pero Rex en un momento de inspiración propuso una actividad.
- Esperad ¿Y si jugamos al poder?
- ¿Que? ¿Otra vez? -se quejó Audrey-.
- Bueno, Max no pudo jugar y esta vez podremos ganar ya que estos dos siguen durmiendo -señala a Candy y a Harry-.
- Me parece bien ¿Que dices tu Max?
- Claro que quiero, veamos quien es el mejor.
Y los 4 se sentaron un poco apartados de los dos que seguían durmiendo en el suelo. Empezaron a jugar y después de varias horas de juego los demás se fueron despertando y bajando al vestíbulo a mirar la partida de poker ya que no tenían otra cosa que hacer. Finalmente Max se hizo con todas las fichas de los cuatro jugadores proclamándose así ganador.
- Eres bueno -Dijo Wendy- Tu gusto en ropa se compensa con tu habilidad con las cartas.
- Incluso podría hacer frente a esos dos -concluyó Rex-.
- No soy tan bueno...
- Tonterías, has barrido a tus oponentes. Sacaré una foto para celebrarlo -dijo Carrie capturando la escena-.
Todo iba perfectamente, Max había tenido su pequeño momento de gloria y había triunfado delante de todos lo que le hacía sentir orgulloso.
Sin embargo esa satisfacción duró poco, un enorme grito se escuchó por todo el hotel proveniente del pasillo derecho del hotel. Fue entonces cuando Rex y Sonia se levantaron rápidamente y corrieron hacia la dirección del sonido. Max corrió detrás de ellos mientras que el grupo se quedó murmurando y preguntandose que había pasado.
Cuando llegó al origen del sonido miró a Audrey que señalaba con lágrimas en los ojos a la piscina. Allí se encontraba Mikan flotando en una piscina boca arriba y con un cuchillo de cocina clavado en el pecho. Su cara antes llena de vida ahora mostraba una mueca de dolor paralizada así para siempre, su pelo antes brillante y con un color cataño oscuro había perdido todo su resplandor. Es como si ese cuerpo de allí no fuera ella sino un maniquí que alguien había dejado para gastar una broma de mal gusto.
El agua de la piscina que estaba a su alrededor había adquirido un color rojizo casi inapreciable pero obviamente era sangre.
Y cuando sus cerebros intentaban procesar todo lo ocurrido un anuncio se escuchó por todo el hotel. La voz de ese hombre con la máscara ahora había dado un nuevo anuncio.
"Se ha descubierto un cadáver. Después de un tiempo de investigación tendrá lugar un juicio ¡Den lo mejor de ustedes para encontrar al asesino!"
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Escapar
RomanceMax es un chico normal, es joven y aún le queda mucho por vivir: encontrar trabajo, formar una familia... Sin embargo su vida da un cambio radical cuando despierta en un lugar extraño acompañado por otras personas que no conoce de nada. Sin muchas...