SyL: Scorpius y Lily

El secreto de Albus

Lily no lo podía creer, esa noche se había peleado con su hermano y Daniel le había dicho que sentía algo por ella.
La verdad, Daniel le parecia lindo pero no estaba lista para llegar a tener más que una amistad con el.

Llego la mañana y un rayito de sol le iluminó la cara, tenía ganas de levantarse inmediatamente de la cama e ir a dar un paseo sola. Se vistió y bajo hacia el retrato de la Señora Gorda, pero antes de salir completamente vio que alguien la esperaba afuera.

- Necesito tu ayuda, no se que hacer por favor, acompañame.

- ¿Qué te pasa Al? ¿Te han hecho algo?

- Ven y te lo diré

Salieron del castillo y fueron a las orillas del lago.

- Ahora ¡dime! ¿qué te pasa, porqué estás tan serio?

- Lily... antes prometeme que no se lo dirás a nadie.

- Te lo prometo pero dime

- ¿Recuerdas que les dije a ti y a James sobre... sobre que me gustaba alguien?

-Cómo olvidarlo, ¿pero que con eso?

-Lily... Scorpius...

- ¿Qué con el?

- Scorpius... el le pregunto a ella...

- ¿QUÉ?

- Que si... que si queria...

- ¡Albus Severus termina!

- ¡Que si quería ser su novia! - dijo tristemente

- ¿Qué?- dijo con tono debil

- Si... el no sabe que me gusta y...- se tapó la cara con ambas manos - ella le dijo que sí.

- ¿Qué? - Lily estaba perdida.

- le dijo que sí Lily, no sabes como me siento, por eso me alejo de él, luego la lleva a almorzar con nosotros y... y ya te imaginarás,

Ella se acercó a se hermano y lo abrazó, no le importó que ya todos estuvieran saliendo del castillo, solo queria que su hermano se calmara, le tenía la suficiente confianza para contarle eso y eso se lo agradecía.

A el se le derramó una lágrima pero la trató de disimular, aunque a Lily no la pudo engañar.

- No me gusta verte así- por una extraña razón a ella también se le estaban saliendo las lágrimas- tu vales mucho, y cualquier chica estaría orgullosa de tener a alguien como tú, eso nunca lo olvides, que no lo sepan es su problema, no tuyo.

- No es sólo eso...- Lily se quedó callada - también... me he dado cuenta de algo, a Scorpius... a el le interesa otra chica pero no se quién es, la noche en que fuimos a Las Tres Escobas, vi que en su cama había una carta que su abuelo le escribió, algo sobre que no lo quería con una sangre mestiza, que su padre estaba mal al pensar que no importaba la sangre y que sí no elegía a la sangre pura que se olvidará de el.

-¿Pero... le preguntaste a el que significaba?

-Sí, cuando llego lo hice, me dijo que a el le gusta aparte de Jane otra persona, pero lo mencionó un día en su casa y su abuelo lo escuchó. Se mantuvo alejado del tema hasta ese día, pero no sabía que hacer, así que... la eligió a ella.

- ¿Te dijo quién era la otra persona?

- No quiso hablar de eso, dice que es mejor olvidarla.

- Lo siento Al, no se que decirte... creo que debiste de decirle todo lo que sentias por ella, por favor no quiero que estes triste -lo miró a los ojos- te quiero mucho y no me gusta verte así. Cuando no quieras estar cerca de ellos ven conmigo, inventa que tienes que hablar muy seriamente de todo lo que pasó ayer por ejemplo o que mamá te mando a que me dijeras algo, no lo se pero siempre estaré para ti.

- Gracias Lily, por eso puedo confiar en ti, yo te quiero más enanita. Creó que debemos darnos prisa o no alcanzaremos nada. ¿Puedo almorzar contigo? No quiero escuchar los interrogatorios de Scorpius.

- Claro que sí, me lo debes recuerda.

- Si, ayer no me respondiste, ¿qué paso?

- A ti si te lo puedo contar, pero ¿prometes no decirle a nadie, mucho menos a papá?

- Si - le explicó todo lo de la noche anterior y cuando hubo terminado habían llegado al Gran Comedor.- era obvio ¿no crees? Se veía en su cara cada vez que te miraba, hasta Scorpius se daba cuenta y eso que...

- Hola, ¿puedo sentarme?- pregunto el susodicho (Malfoy)

- Mmm, si, siéntate- respondió Lily.

- ¿A donde fuiste está mañana? Te estaba buscando.

- Afuera, fui por ella y dimos un paseo.-contestó algo impaciente

- Bueno...

- Como te decía Lily, se veía en su cara y todos nos dabamos cuenta, James ya lo había amenazado un par de veces pero al paracer lo ignoro.

- ¿Y que piensas que debo de hacer? Lo quiero, es un buen amigo pero... no se que hacer.

- Siempre he tratado de disimular que no me importa mucho que quieran salir contigo, pero la verdad me importa y mucho, me da miedo que te hagan daño y si se atreven a hacerlo se arrepentirán de haberlo hecho. No estoy preparado para verte con alguien y te lo digo, aún estas pequeña y probablemente nunca te deje de ver así. No quiero imaginarme como se pondría papá si te viera con alguien.

Scorpius casi se ahoga con el jugo y dijo:

- No pude evitar escucharlos pero ¿Cómo se pondría tu padre?

- Pues... primero creo que querría atacarlo, pero se daría cuenta que es menor que el así que lo correría de su vista, me mantendría castigada sin poder verlo y...

-...se ganaría la desconfianza de el, de mi y tal vez de James, por no cuidarla bien. Dice que en eso debería parecerme mas a él, proteger a su niña.- dijo Albus

- Creo que te cuida mucho, no digo que este mal pero... bueno. ¿Te invitaron a salir? Si se puede saber, claro.

- Pues algo así- dijo dudando- cuando llego James creo que lo iba a hacer.

- Pero ¿te gusta? -preguntó con mucha curiosidad disimulada

- Creo que si, ¡no lo sé Malfoy! Estoy tan confundida, no se si me gusta el o si e... -se detuvo, confundida ante sus palabras- ¿pero qué es lo que digo? ¡Por Merlín! No me puede gustar el.

- Pues creo que estas confundida - le dijo Albus- si en verdad te gusta Daniel...

- No me refería a él

- Entonces ¿A quién Potter? - volvió a preguntar con interés.

Pero en eso llegó una chica por detras de Malfoy, lo abrazó y le dio un beso en la mejilla con un "hola". Albus se quedó mirándonos, ella debía de ser Jane.

- Hola, -contestó suavemente- ¿qué ibas a decir Potter?

- A nadie Malfoy - su voz era dura, se notaba enojada, él la miró fijamente como si nunca la hubiera visto antes, ella se levantó y miro a su hermano, se veía mal- Albus, ¿me puedes acompañar? Creo que necesito hablar de una vez con Dani.