SyL: Scorpius y Lily

Sentimientos Ocultos

-¡Hija, despierta! - la sacudió su madre, quien estaba al lado de su cama, Lily no quería levantarse, no tenía ánimos para nada aunque trataba de disimular no podía.

-Otro ratito mamá, ¡por favor...!

-Nada de otro ratito, hoy irán tu papá y tú a comprar los materiales para la escuela, no podré ir, tengo mucho trabajo, así que ¡levántate o llamaré a tu padre!

-¡Mamá, por favor!

-¡Te quiero ver ya lista en media hora en el comedor para almorzar!

Ginny salió del cuarto y Lily se quedó sola, lo que más le gustaba y a la vez odiaba en esos momentos era la soledad, con ella podía aclarar su mente pero a la vez se sentía peor, no olvidaba lo que había sucedido en el tren algunas semanas atrás, cuando Malfoy había besado a otra persona que no era ella y para mala suerte de Lily, Albus lo había invitado a pasar una tarde en su casa, pero al menos ese momento aún no llegaba.

Se metió a bañar de mala gana, se cepillo su cabello rojizo y trató de parecer lo más normal posible, su pretexto de hoy iba a ser que se había d ormido tarde por haber estado esperando una carta de Alan, y en parte era cierto, pues él había quedado en que le iba a mandar una nota en la que le iba a confirmar que se verían en el Callejón Diagon

Lily

Si voy a ir, te espero en Florean Fortescue a las 11 a.m., además, mis padres me dijeron que puedo pasar la tarde en tu casa ¿No crees que es genial? Hasta dentro de unas horas.

P.D. Ya no sigas así, me preocupas.

Alan

Cuándo entró al comedor, su padre estaba sentado y tenía en mano el diario El Profeta y Albus estaba ayudando a su madre con la comida, así que ella se dirigió a poner los cubiertos y servir el jugo, Harry parecía cansado y era porque había llegado en la noche de ayer de una misión en un poblado lejano.

-Yo me quedaré con Albus, no he avanzado mucho en mi reporte así que será mejor que tu vayas con Lily a comprar todo lo necesario, sé que estás cansado, llegando podrás quedarte dormido hasta la hora que quieras, ¡sin reproches!

-No hay problema cariño, Albus ¿Necesitas algo para tu visita?...

-¿¡Que!? - saltó Lily que hasta el momento estaba metida en sus pensamientos, cuándo se dio cuenta de que todos la miraban con el ceño fruncido trató de disimular el porqué de esa reacción - ¿Va a venir alguien?

-¡Si no estuvieras solo en tu mundo, como últimamente lo has hecho creo que lo sabrías! - le respondió su hermano

-¡Bueno! Mamá... Alan si va a venir al rato ¿te acuerdas que te dije algo? - decidió abandonar el tema anterior antes de que le dieran la respuesta sospechosa que tenía en mente, tal vez no podría controlarse y lo único que lograría fuera que la descubrieran.

Ya en el Callejón Diagon...

-Creó que te hablan, te dejaré un rato, voy por un encargo de tu madre y por los libros, nos vemos aquí en un par de horas- dijo Harry al ver que Alan estaba llamando a Lily con la mano.

-Mmm... Está bien, ¿a qué hora debemos estar en la casa? - Estaba más sería de lo normal.

-Antes de las tres, tu mamá quiere que lleguen temprano a comer, por mi parte... -dio un gran bostezo- me dormiré, ya debes irte, tu amigo te espera.