Viaje A Casa Y Nuevas Decepciones

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Ya en un compartimento del expreso de Hogwarts, James y Lily estaban platicando de las muchas cosas que les habían pasado en sus respectivos años en la escuela. Una vez, a James cuando iba en primero,  un chico de quinto le había quitado todos sus artículos de broma, mala elección, pues el se vengó haciendo que a este le salieran varios granos gigantes en la cara...

- ... ¡pero lo hubieras visto! Trató de vengarse después,  pero no pudo,  nunca superó que yo, en ese entonces de ¡Primero! le hiciera eso... ¡Eran unos granos enormes!

Siguieron y siguieron con sus historias y de pronto James dijo:

- ¿Quieres conocer a Rebecca?

- ¿Tu novia? ¡Oh, James! Pensaba que estaríamos solos.

- Pues pensaste mal, así que será mejor que te pongas cómoda,  va a ser un largo viaje...

En eso llegó ella y la saludo con un movimiento con su mano.

- Hola- saludo Lily

- Hola Lily ¿te puedo llamar así?  - ella asintió- bien, James me a hablado mucho de ti...

- Lo normal, no te emociones hermanita.-Rebecca sonrió

- Creó que los dejaré un rato solos...

- ¿A donde vas?

- Al baño- y se fue

Caminó el largo pasillo, justamente cuando iba a entrar vio que Rose la llamaba con la mano.

- ¿Sabes donde se a metido tu hermano? Me a dejado con todo el trabajo, se supone que todos los prefectos deberían de estar rondando los pasillos, pero Albus brilla por su ausencia.

- Ni idea, todo este tiempo me la pase con James...

- Saliste porque entró Tyler ¿verdad?

- Sí, no quiero ver como se comporta James, me ganaría la risa.

- Dimelo a mi, viendo al gran James Sirius Potter, gran maestro de las bromas haciendo quien sabe que cosa con Rebecca Tyler,  la gran sabelotodo

- ¿Ella te hizó algo? Tu no dirías eso si no tuvieras una razón para hacerlo.

- Solo la muy... bueno cuando entré a primero, ella y su grupito de amigas empezaron a decir... ¿como te lo diré?,  que no había heredado ni un poquito de la inteligencia de mi madre

- ¿Y que pasó?

- Solo bastaron unas semanas para demostrar que se equivocaban, le gané en un concurso de hechizos hecho por Wilfred, un alumno de séptimo en ese tiempo,  desde ahí no le caigo muy bien que digamos, pero cuando se supo que andaba con James, ella empezó a hablarme pero sigue sin caerme bien, me da mala espina. 

- No creo que solo por eso te caiga mal

- Cierto, hace un año mas o menos,  ella... - se sonrojó - bueno no se si te enteraste de que... bueno se vengó, me hizo un maleficio que preferiría no mencionar enfrenté de todos, entre ellos el chico que me gusta... Me tengo que ir, si vez a Albus le dices que lo estoy buscando, no puede dejar asi como si nada sus responsabilidades. 

Siguió caminando, no tenía ganas de regresar con James, lo del baño solo había sido una excusa para no tener que ver lo que hacían ese par. Iba viendo quienes iban en cada compartimento, Alan estaba con Valeria, se veían aburridos, el carrito de dulces ya estaba pasando por el pasillo... ¡Albus estaba con una chica! ¿veía bien?  ¿sus ojos no la engañaban? ¡Por eso no estaba vigilando los pasillos! No quiso incomodar a Albus que en cualquier momento podría mirar por la ventana así que siguió caminando, tendría tiempo de sobra para preguntarle que sucedía...

De repente escuchó una voz conocida, era de la persona que tanto esperaba pero estaba con alguien...

- ...Por favor...

Se acerco más, estaba en un compartimento cercano...

- Solo quiero que me digas una cosa... ¿en verdad sientes algo por mi Scorpius?

Al parecer había alguien más, decidió acercarse a la ventanilla

- ¡Estoy loco por ti !

El se acerco a ella, esta se quedó inmóvil, estaba de espaldas a la puerta, no hizo nada, se fue acercando más y más, al parecer aún no descubrían que estaba ahí

- ¡Entonces demuéstralo!

- Creó que con esto te quedará claro...- susurró, se acercó mas a ella y...

- ¡No! - soltó un grito ahogado Lily, estaba viendo a la persona que tanto quería con otra persona, no podia creerlo, no era cierto, no queria aceptarlo, tal vez estaba viendo mal, si eso debia de ser... pero se equivocó, el había rodeado con sus manos la cintura de ella acercandola mas a su cuerpo, mientras que ella, lo abrazaba y se besaban, le comenzaban a salir unas lágrimas, ¿como pudo creer que el la iba a amar a ella algún día? Cerró los ojos, se limpió las lágrimas y se fue corriendo, no quería saber nada de el ni de nadie, solo quería olvidar, por un instante creyó que ella podía ser la persona a la que el queria pero se equivocó, aquella persona era la que estaba con el en ese momento. Se sentía pésimo, se metió a un compartimento vacio y cerró las cortinas, no quería que alguien la viera. Solo queria llorar, pero sus intentos para que no la molestaran fallaron, la puerta se abrió y entró Alan, la vio, descubrió que estaba llorando, se acercó lo mas rápido que pudo a ella y la abrazó, ella también lo hizo, empezó a llorar, el le acarició el pelo.

- Lily... ¿por qué lloras?

- Por... por algo que... -intentaba limpiarse las lágrimas- no vale la pena nombrar...

- ¿Fue Malfoy? - se separó de ella, la miró a los ojos y limpió las lágrimas que recorrían su cara- Fue él ¿verdad?

Ella lo abrazo,

- Deberías estar con Valeria...

- Ella sabe que estoy aquí y que no me iré- le dio un tierno beso en la frente.

- Pero...- se separó de él- no puedes dejarla sola - escuchaba que venía alguien

- No lo está, se quedó con sus amigas, además no es tiempo para que nos preocupemos por ella, sino por ti

- Gracias por estar conmigo,  te quiero... - el le dio un beso en la mejilla, ella cerró sus ojos y lo volvio a abrazar, en ese momento la puerta se abrió y dejo ver a un chico de ojos grises, éste entró y los vio, no dijo nada y Lily se distanció rápido de Alan, miró al chico que había entrado.

- ¿Qué haces aquí Malfoy? - dijo fríamente, tratando de no escucharse triste.

El no respondió seguía mirandolos.

- Por si no te habías dado cuenta éste era mi compartimento,  solo vengo por mi maleta... ¡Tengo a la mejor novia del mundo!- una gran sonrisa lucia en su cara- ¡La amo tanto Potter!, ¡me alegro de que tu también hayas encontrado a alguien! - señaló a Alan con la mirada.

Ella no respondió, el salió con su equipaje, estaba muy fuera de sí. Lily se sentía mal, era verdad, el había besado a esa chica,  ella debía de ser su gran amor del que tanto le había hablado, por fin habia seguido su consejo, ese maravilloso consejo que lo había alejado de ella, se había arriesgado por fin... ahora Lily tenia que seguir su camino, uno en el que no estuviera el... ¿cómo hacerlo? En realidad tenía una idea..

SyL: Scorpius y LilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora