Hogsmeade

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Era todavía temprano cuando despertó, se veía oscuro a través de la ventana, estaba preparando todo lo que ocuparía en el día, pues se le había quitado el sueño. Cuando terminó, ya sus demás compañeras estaban despiertas, ella bajó a la sala y esperó a que Hugo también lo hiciera, habían quedado en almorzar juntos.

—Ya —anunció Hugo.

—Vamos, ya tengo hambre —dijo ella.

Ya ahí se sentaron en casi medio de la mesa, más tarde llegó James que según Lily, tenía cara traviesa, estará tramando algo, seguro, pero bueno no quiso saber de que se trataba, pues no quería meterse en problemas.

También vio que Albus había llegado y estaba con aquel rubio de la noche anterior, Scorpius, era un chico raro segun Lily, lo estuvo observando casi todo el almuerzo y parecía que cambiaba mucho de humor,
"...cuando llegaron al Gran Comedor estaba normal, después enojado y ahora está... ¿mirandome?..." Lily se extrañó demaciado al ver que Scorpius la estuviera observando y además que ahora estuviera sonriendo, inmediatamente bajó la mirada hacía su plato.

Durante los siguientes días no habló mucho con Albus, que estaba siempre con Scorpius a donde sea que se lo encontrará.

Lily tenía nuevos amigos, Bonnie,  que antes era muy tímida con ella pero cuando la fue conociendo lo era menos, "...pensaba que no reías pero me equivoqué..." le dijo cuando ya la conoció un poco mejor. Tambien estaba Edward de Ravenclaw, compartían la clase de Herbología, pero su mejor amigo era Alan Sinclair, una persona muy apuesta a su corta edad, con ojos azules y cabello negro, ayudaba a Lily en todas las ideas que se le ocurrían.

Pronto serían las salidas a Hogsmeade y sus hermanos claro que irían, a ella le gustaría ir pero no podía pues era a partir de tercer año. Le encargaría a sus hermanos que le llevaran algo, y cuando tuvo oportunidad se los hizo saber, James le dijo que le llevaría unos calcetines y que se conformará, mientras que Albus le llevaría algunos dulces.

La tarde en la que fue la salida, casi toda la escuela se quedó vacía, tenían para ellos solos la sala común pero sinceramente era muy aburrido, intentaron avanzar con sus deberes pero fue inútil, así que salieron a dar un paseo a la orilla del lago Alan, Bonnie y ella, aprovecharon que estaban cerca de la cabaña de Hagrid y fueron a visitarlo pero estaba vacía.

Jugaron naipes explosivos a la orilla del lago y entonces Alan vio que Albus, Scorpius y otro chico de Slytherin se dirigían al castillo, por alguna razón los tres estaban enojados y por sus caras no soportaban un olor. Detrás de ellos, un poco más alejados, estaban James y luego la profesora McGonagall, "...no otra vez James..." decía Lily cuando ocurría eso, no era la primera vez que pasaba, mandarían otra carta a sus padres.

Ya más tarde, en la cena, Lily se fue a ver a Albus, ya se había enterado por el mismísimo James Potter que les habían lanzado bombas fétidas, aprovechó que no habían muchas personas cerca de él y además, Scorpius en mucho tiempo, no estaba a su lado, tenían que platicar muchas cosas.

—Esta vez si se pasó James —decía Lily— además de bombardearlos hizo que los castigaran a ustedes también y solo por defenderse.

—Sí, todo porque una señora que estaba en el pueblo, a la que le caemos mal le dijo eso a la profesora McGonagall, ¡hasta le inventó! y cómo no había alguien más ahí pues... —dijo Albus.

—¿Por qué le caen mal? No le han hecho nada, ¿verdad?

—Claro que no le hemos hecho nada, solo no le quisimos dar dinero para comprarse una botella de hidromiel y se enojó.

—Cierto, empezó a decir que nos iba a ir muy mal y que tendríamos mala suerte por... ¡Ah, sí! Tres años —dijo una voz que venía detras de Lily.

Lily volteó y se dio cuenta de quien se trataba, de cerca se veía más lindo, con sus llamativos ojos grises.

—¡Oh, lo siento! Me senté en tu lugar —dijo Lily al ver el rostro de Malfoy.

—No te preocupes, eres hermana de Al... —tras una mirada de éste se apresuró a completar la frase— Albus y me imagino que no eres igual a James. Se te olvidó esto —dijo dirigiéndose a Albus— se lo ibas a dar, ¿no?

—Sí, gracias, Lilu esto es para tí, no son muchos dulces pero espero que te gusten, también te traje una nueva pluma —y le entregó una bolsa llena de cosas— Scorp me ayudó a elegirla así que si no te gusta es su culpa.

—Gracias —dijo con una sonrisa— seguro que es mejor que lo que me trajo James si es que lo hizo, me iba a traer calcetines, te tengo algo que decir, mamá me dijo que puedes invitar a alguien a la casa en vacaciones, tu decides el tiempo.

—Bueno, ¿Scorp quieres ir a mi casa? Nunca has ido, ya se que ahí también estará James pero mamá se encargará de él.

—Te avisó después, pediré permiso pero no lo sé, mis padres y los tuyos no son los mejores amigos pero la vez pasada tú fuiste a mi casa, así que haré todo lo posible para ir.

—Bueno creo que ya me iré a la mesa de Gryffindor.

—Mmm... ¿no te quieres quedar a cenar con nosotros?, ya tiene tiempo que no lo hacemos, yo que te quiero evitar que camines, ademas casi no hay nadie aquí, ¿que dices?

—Mmm... esta bien, ya me tardé y me imagino que ya se fueron mis amigos a la sala común, pero harás lo mismo algún día.

—Esta bien, bueno a comer a sido un día largo y... —dijo en un bostezo Albus- ya tengo sueño así que mejor empecemos.

Lily se sintió algo incómoda estando sentada ahí pero a la vez feliz, estaba con su hermano, debía admitir que ya lo extrañaba y además Malfoy no era como decía su tío Ron que era su padre, el señor Malfoy, sino que divertido, buena persona y amistosa, sin duda se la pasó mejor que otras noches.

SyL: Scorpius y LilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora