La puerta hacia otro mundo

13 2 0
                                    

El haber conseguido que Ahrielle recobrase su forma había sido un gran logro para nosotros, jamás pensamos que podríamos conseguir algo así y ver la cara de felicidad de Ahrielle hizo que Todd y yo llorásemos, a pesar de que Todd aún lo niegue. Ahora solo quedaba descubrir que otras cosas podríamos hacer si tuviésemos ese libro en nuestro poder, así nuestro paso estaba bastante claro.
En los siguientes días Todd trató de comunicarse con el Dios Shinto, para intentar hacer una tregua, pero fue imposible. Desde que Todd me tomó como su aliada, ambos nos convertimos en los enemigos del Dios enfurecido. Ahora teníamos que buscar una manera de llegar a esa biblioteca.
Mientras estaba pensando no me di cuenta de que Todd me estaba hablando. Enseguida le miré fijamente y asentí, como si hubiese entendido todo lo que me había dicho hasta ese momento.
-¿Lo has entendido todo bien?
'Acaba de explicar como iba antes a la biblioteca'
-Si.
-Vale, cuéntame brevemente lo que te acabo de decir.
Mierda.
-Ehmm..
-Como pensaba... -Todd agachó la cabeza y se llevó una mano a la frente, algo que hacían muy habitualmente los humanos cuando se estresaban. -¿Vas a usar esos orejones que tienes para algo más que para adornar?
-Si, lo siento. -Qué borde...
'Tranquila, no es que aún te guarde rencor, es que es muy borde el pobre'
Me lo imaginaba, la verdad...
-Lo que estaba diciendo era que yo normalmente usaba este amuleto para abrir un portal a la ciudad de los muertos, solo tenía que "sacrificar" una gota de sangre. Pero desde lo que ocurrió la otra noche a dejado de funcionar.
-¿Y tus poderes?
-¿Qué pasa con mis poderes?
-¿Cómo es que aún los conservas? Es decir, si el te los dio el te los debería poder quitar.
-No puede. Mis poderes están enlazados con mi alma y el no puede matar por si solo. Por eso usa "mensajeros"
-Entiendo... Y, ¿no tienes forma de abrir el portal con tus poderes?
-No... La única manera de llegar a la ciudad de los muertos es con ese amuleto... o muriendo....
'Yo estoy muerta, ¿como puedo llegar hasta allí'
-Dice Ahrielle que ella está muerta, que como podría llegar hasta allí.
-No puede, solo las almas ascendidas pueden ir allí.
-¿Almas ascendidas?
-Son las personas cuyas almas pasan al "más allá".
-¿Eso no deberían ser todas?
-Deberían... pero a veces los sentimientos de un alma la atan a este mundo, obligándolas a vagar en otro plano astral hasta que alguien las salve u encuentren lo que busquen.
-¿Y si nadie las rescata o encuentran lo que buscan?
-Vagaran eternamente por un plano oscuro en el que solo les queda la soledad.
-Qué horrible...
'Odio las historias de fantasmas...'
-Normal.
-¿Eh?
-Nada, solo contestaba a tu hermana.
-A vale. Seguro que te ha dicho que odia los fantasmas. Le dan miedo desde pequeña.
'No voy a discutir sobre eso pero, yo no soy un fantasma. Así que, ¿qué me impide ir a esa ciudad?
-Dice que no va a discutir y que no es un fantasma, que porqué no puede ir a la ciudad de los muertos.
-Porque es como si lo fuese. Su alma está ligada a ti y por eso no puede continuar. No puede ir a la ciudad a menos que "siga adelante", y si hace eso jamás podrá regresar.
'ups...'
Nos quedamos todos pensativos y con la cabeza baja, no teníamos ni idea de que hacer. Estábamos perdidos...
-Hay una manera.
Ambas le miramos enseguida con los ojos muy abiertos, como si fuésemos dos búhos acechando a un pequeño ratón.
-¿Cual?
-Hay una manera de ir allí y volver, pero es arriesgado.
-¿Qué tengo que hacer?
-Besarme.
-¡¿Qué?!
No podía creerme lo que acababa de escuchar.
'Ya te dije que era un cerdo'
-Dejad de mal pensar y eso va por las dos, que aunque no pueda oírte hermanita se de sobra lo que estas pensando.
'Que eres un guarro'
-Por lo que quiero que me beses es porque las kumihos podéis matar a vuestras presas con un beso, pero si os arrepentís también podéis devolverlos a la vida de la misma forma.
Primera noticia... ¿Será verdad o tendrá razón Ahrielle y solo querrá besarme porque es un cerdo?
-Yo no se hacer eso.
-¿Has besado a alguien alguna vez?
-No.
-Entonces te saldrá solo. Ese poder es algo que las kumihos tenéis que aprender a controlar, no algo que tengáis que aprender a hacer.
-Vale, lo entiendo, pero ¿no es demasiado arriesgado?
-Si pero es nuestra única opción.
'No quiero que lo haga'
La voz de Ahrielle sonaba firme pero rota. Se notaba que no quería poner en peligro a su hermano.
-Ahrielle dice que no quiere que te pongas en peligro por ella.
-Que lo hubiese pensado antes de traer animales moribundos a casa.
No puede evitar sentirme fatal cuando escuché eso...
-Lo siento, lo dije sin pensar y...
-Tranquilo.
-Bueno... Para resucitarme tendrás que volver a besarme y tendrás que hacerlo antes de que pasen tres días.
-¿Porqué tres días?
-En tres días hay luna llena, y tu hechizo se terminará en cuanto la luna llena se ponga.
-¿Porque?
-Tu beso tiene un hechizo que hace que seas la dueña de mi vida, pero la luna llena anula el contrato de posesión. Eso es algo que no sabéis las kumihos y por eso me lo contó el Dios Shinto, para que pudiese usarlo en tu contra si llegabas a hechizarme.
-Interesante... Pero, ¿Estás seguro?
-Hombre, teniendo en cuenta que me traicionó y engañó pues no mucho, pero es nuestra única oportunidad.
'Por favor parad'
Mire a Ahrielle y vi como estaba llorando. No vi lágrimas pero si vi su rostro, lleno de preocupación y tristeza. Me partía el corazón verla así.
-Hermanita no pongas caras tristes, todo estará bien y pronto volveremos a ser una familia normal, ya lo verás. Solo te pido que confíes en mi.
Ahrielle, muy a su pesar, asintió como pudo tratando de mantener la compostura.
-Entonces decidido...
Se puso enfrente de mi y me miró a los ojos. Sabía que lo iba a decir.
-Bésame.

Touch my heart KumihoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora