2 de Febrero del 2016
Día 53Y el problema es que no lo podía mirar...
Como siempre íbamos a comprar nuestro desayuno, caminamos un rato, nos encontramos a una amiga pero no la quiso esperar diciéndome "hay veces que necesitamos estar solo nosotros dos", yo solo asentí, él era demasiado observador por lo que tenía que cuidar mis reacciones porque las podía confundir, podía confundir amor donde había amistad y es que ni siquiera yo lo sabia ¿porque tenía que ocultar algo que se supone no sentía?. Fuimos al centro comercial y nos situamos en el área de comida, la mesa para dos cerca de los juegos para niños siempre estaba para nosotros, charlábamos animosamente, nos dábamos consejos pero el problema estaba cuando lo miraba a los ojos, sentía como de nuevo mi cara ardía, no sabía si era rubor pero me sentía caliente, tal vez lo noto pero tal vez no así que trataba de responder igual, como siempre lo hacía, trataba de actuar como si no pasara nada "deben ser las hormonas" me decía a mí misma para tranquilizarme pues te recuerdo lector que cuando una mujer está en sus días fértiles quiere "hacerlo" a toda costa pero no con cualquier hombre, no no si no con quien despierte más feromonas y bueno... Como ya te había dicho el que para mí se estaba convirtiendo en mi mejor amigo era un adonis, un hombre realmente apuesto liberador de cientos de feromonas.Hablamos sobre la chica que está detrás de él, era mayor que él, trabajaba en el mismo grupo que él, ósea el de su padre, era bajita y bailarina, al principio me decía que no le gustaba y que no estaba interesado en ella pero ahora era diferente pues al parecer si le interesaba un poco y tenía la posibilidad de decirle que si quería formar una relación con ella aunque a mi parecer si eso llegaba a ocurrir no iban a durar mucho además de que él no estaba seguro de poder luchar contra las complicaciones que esto significaba por ejemplo una de ellas era que su padre al enterarse de ello podría haber la posibilidad de que la corrieran del trabajo. También tocamos un tema que me pareció un poco... Interesante... Era sobre mi chico ideal y su chica ideal.
El mío físicamente era como mi ex novio; tez blanca, más alto que yo, el cabello medianamente largo, delgado pero tampoco tanto al igual que no tan musculoso como lo era Andrei... Y bueno también existe una característica extra... Ojos color gris aunque sé que existen muy pocas probabilidades de que alguna vez conozca a una persona así, y en cuanto a la personalidad le conté que en el pasado me habían gustado mucho los chicos tímidos pues siempre ocultaban un misterio en esa timidez, un misterio que yo quería resolver pues mi naturaleza siempre ha sido curiosa pero con mi pasada relación me había dado cuenta que normalmente los chicos tímidos son los que más tienen problemas y eso era lo que menos buscaba en este momento, no quería tener más problemas que los míos propios por lo que en este momento mi ideal de personalidad no existía, si bien podría volver a gustarme un chico tímido también podría gustarme un extrovertido o incluso alguien como Andrei, un Casanova...
- Entonces... ¿Discriminas a los morenos?
Me hizo reír.
- No, también me gustan morenos solo que me atrae mucho una piel blanca, no se él porque, me dan ganas de acariciarla en todo momento.
- Te gusta mucho lo blanco ¿No crees?
- Algo así. ¿Y tú? ¿Cuál es tu chica ideal?
Recuerdo que me hizo pararme, me miró y antes de responderme me pidió que me sentara.
- Ella debe de ser de mi estatura o un poco más bajita que yo, como llegándome a la barbilla, tez color durazno aunque Morena también está bien, cabello color negro o rojo en todo caso, complexión mediana, rellenita pero que no se vea mal, caderas prominentes sino ¿por dónde saldría el chamaco?
- jajajaja señor Sherlock, usted piensa en todo
- Naturalmente señorita Watson, veamos... Que más... Supongo que en físico es todo
- ¿Y en personalidad?
- Mmm que sea inteligente, que le guste leer, que le gusten las aventuras y que proponga estar en nuevos lugares, que le guste conocer precisamente nuevos lugares y cosas, que sea divertida, buena onda, que me lleve muy bien con ella.
- Déjeme decirle que lo que usted pide en una amiga-novia
- ¿No hay?
- Si las hay, pero son escasas.
- Ahí está, las hay, con eso me conformo.
Sonó mi teléfono pero no alcance a contestar.
- ¿Quién es?
- Era mi madre
- Mmm tal vez llamaba para decirme que había encontrado a mi chica ideal.
Yo no pude responder aquel comentario más que con una risa nerviosa, ¿tú sabrías si todo esto eran indirectas o solo algo preparado por él para ver mis reacciones? Yo la verdad aún sigo con la duda... Lo único de lo que estoy segura es que me enojó... Me enojó el haber hablado de aquella chica que anda tras de él y ahora le interesa también. No sé por qué... Pero me enojó. Sentí mi sangre hervir.
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Cuando la luz se va
Ficção Adolescente¿Alguna vez has sentido que ya no puedes mas? que yo no eres la misma desde que aquello paso, que tu felicidad se fue, que no hay mas luz y te encuentras cayendo por un abismo que no tiene fin... Maia, una chica de 17 años te cuenta su historia, su...