Regresa a mí de Ana G. Best [Parte I]

Capítulo 33

Me encuentro afuera esperando los resultados de mi tesis, mi futuro depende de esta evaluación. Estoy muy nerviosa.

Gracias al dinero que me dio el señor Collen, pude seguir mis estudios. Retorné a Illinois e ingresé nuevamente en la carrera de Medicina. Ha sido difícil, no pude trabajar por cinco años. Lo que representaba un problema mayor. El señor Collen se encargó de todo, mi única preocupación era pasar todas las materias y adquirir los conocimientos que me ofrecían en la facultad.

Sin poder evitarlo, me traslado a la noche del bar. Yo quería divertirme y salir de la rutina. La mayoría del tiempo, me reprimía. No iba de compras, los deportes no eran lo mío. Creo que mientras más encerrada me encontraba, más segura estaría.

En ese entonces mis padres eran muy estrictos y una de las normas era no dejarse tocar sin tu pleno consentimiento. Tu cuerpo era algo respetable, no estaban ni a favor ni en contra de las perforaciones o los tatuajes. Sólo decían que los años pasaban y esa forma de expresión era algo pasajero ya que uno mismo la trataba de esconder cuando ya alcanzabas cierta madurez y formabas un hogar.

En mi etapa de osadía quise realizarme un tatuaje, para recordar quién era. Pensaba en un símbolo, no lo sé solo quería demostrar que podía ser dueña de mi vida y hacer lo que me viniera en gana.

Me dispongo a pensar: ¿Y si no fuera asistido esa noche al bar, mi vida sería diferente ahora?

Supongo, que sí. Hoy día, fuera una chica sin experiencias que contar, no sabría marcar límites y todo el tiempo andaría insegura.

Todo lo que me ha ocurrido, me ha ayudado a ser mejor y estar consciente de que hay que sacrificar cosas. No podemos vivir en una burbuja y al final del día fingir que todo va viento en popa. Yo quería recordar quién soy a través de un tatuaje y recuerdo quien soy gracias a la cicatriz en mi espalda.

No la puedo borrar, simplemente está allí.

Visualizo una vida con Tock y no veo un futuro forjado ni por forjar.

Aparece Brianna en mi mente y me da tristeza. No le deseo mal, realmente espero que tenga otro concepto de felicidad y de la vida. A guardado mucho rencor a lo largo de su existencia, olvidó su identidad e integridad. Se enfocó en vengarse y hacer daño a terceros. He mantenido contacto con Gregorie, somos muy buenos amigos. No he establecido comunicación con mi madre, Naneth se lo ha prohibido.

Fui a buscar a Davon, pero no me atreví a tocar la puerta. Temo de su reacción, quizás me odia.

Me he topado con Catish en innumerables ocasiones.

-¿Cuándo piensas volver con la mierda de mi hermano? -siempre tan directa y puntual.

-¿Ya comiste, quieres que te pida algo?

-No te hagas la loca, responde.

-Catish, él no quiere saber de mí. Le hice daño, para resumir yo misma destruí nuestro mundo. Es mejor dejar todo tal cual.

-Cobarde.

-¿Perdón?

-Te estás rindiendo, mujer. Se aman como nunca y se quieren como siempre, aunque ninguno de los dos lo acepte. Si se diera el caso... ¿Volverías con él?

-Tenemos heridas que sanar, no es cuestión de volver sino de intentar estar juntos con la misma pasión de antes.

-¿Sabes a quién me encontré en estos días? -me pongo alerta- a Bullsom. Estaba con una mujer oriental y en cada mano sostenía a un niño.

-¿Conocías a Bullsom?

-Él y yo tenemos historia...

-Te juro que no quiero detalles sucios. ¿En serio no quieres nada?

-Un capuchino, por favor.

Me levanto del asiento y dejo a Catish cuidando la mesa. Al llegar a la caja pido dos capuchinos y unas caracolas de chocolate.

-Hola preciosa, ¿me das un café cargado? -me pongo tensa, conozco esa voz. No voy a voltear, no voy a voltear, es vano mi instinto puede más. Volteo y me quedo helada.

-Señorita, aquí tiene los capuchinos y las caracolas de chocolate -me informa la cajera. Sus ojos hacen contacto con los míos. Agarra su café y sale del local, corro detrás de él y hago que se detenga.

-Hayli, olvida que me has visto. Es por tu seguridad -lleva mucha prisa.

-Pero, ¿cómo?

-Sí, estoy vivo. Bullsom no cumplió su objetivo y te juro que salir del radar de Dudson era una opción. No quería hacerte más daño, no podía. Te ruego que continúes con tu vida -hablaba muy rápido.

-Tock, no estoy entendiendo nada -las personas caminaban a lado de nosotros.

-Estoy trabajando, cambio mi vida, deseo ser mejor -se acerca a mí y sujeta mi cuello provocando que se rocen nuestros cuerpos-. Por favor, discúlpame.

-Ya lo hice -cerré los ojos.

-Aléjate de Brianna y de Bullsom no acabarán hasta verte muerta. Mientras más lejos estés de mí, mejor -besa mi mejilla-. Adiós.

No puedo creer lo que sucedió hace unos minutos. Camino seis cuadras y suena mi móvil.

Catish

-¿Dónde andas, guapa? Me has dejado plantada y en mi cara.

-Lo siento, se me presentó un imprevisto. Te lo recompensaré -cuelgo y saco los auriculares de mi bolso, los enchufo al teléfono y me dejo llevar por la canción.

Close your eyes de Meghan Trainor.

Everybody is on the same page; no new chapters we'll never change.

Everybody wants to be cool. Yes, they do. I'm just like them, but I won't be no fool.

I guess I could waste all me time and my money, just trying to look right, but it doesn't change who

I am in my heart if I look like them.

So I want you to close your eyes. Seem to the world tonight and show them what's beautiful

I don't care what they think.

No I'm not listening

Cause I know I'm beautiful

So close your eyes.

Hay momentos en donde debes cerrar los ojos y enfocarte. Me digo a mi misma que soy fuerte, que hay mucho por lo que luchar. Debemos llorar, limpiarnos las lágrimas y mirar todo como algo momentáneo. Nada es para siempre, alzo mi cabeza y veo salir a uno de los doctores que evalúan mi tesis.

-Doctora Hayli Norman, puede pasar.

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Estamos a un capítulo del gran final. *-*/