Capitulo 6

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Beck

Pasaron semanas, después del entierro de papá, al cual no asistimos por obvias razones, la casa quedo en más calma aunque mi madre estaba aún deprimida, hable con mis hermanos y mi madre les hice saber que me iría de casa por un tiempo para despejarme últimamente me he sentido cansada, con mucho sueño y un tanto mareada, mi cuñada dice que es una forma de canalizar el dolor y sanar heridas, yo personalmente lo dudo pero en una parte si tiene razón quiero sanar mis heridas.


Días después de la muerte de mi padre fui a un bufete de abogados para hacer los trámites de divorcio, llego al edificio está la recepcionista con otra joven aun así me acerco y le pregunto.

-Hola, si, disculpa quería saber si alguien aquí me puede asesorar para tramitar un divorcio?- la recepcionista mueve la cabeza afirmativamente pero antes de que sea capaz de hablar la chica que estaba ahí con ella nos interrumpe - Hola habla inglés?- me pregunta en un dificultoso español, asiento con la cabeza y se presenta -Hola me llamo Giselle Green soy abogada de esta firma - me extiende la mano y se la estrecho.- pero me mantengo en la que está en NY yo estoy de paso por otro asunto pero si gustas puedo ayudarte y disculpa mi español entiendo poco y de hablarlo menos – le sonrió sinceramente -está bien tranquila el inglés es uno de mis idiomas, pero si puedes ayudarme te lo agradecería un montón, por cierto me llamo Rebecca West pero puedes decirme Becca- me devuelve la sonrisa, esta chica es fácil de tratar me agrada

- mucho gusto, vamos acompáñame- nos dirigimos a una sala de juntas bastante ostentosa pero muy bonita ventanales desde el techo al piso todo de lujo

-toma asiento por favor- me indica Giselle y obedezco

-ok cuéntame el motivo por el cual te quieres divorciar-

Y así lo hice le conté todo sin omitir detalle alguno ella solo hacia asentamiento con la cabeza y tomaba nota. Cuando termine me dice -muy bien Becca tengo todo lo necesario para demandar a tu esposo no te preocupes que esto será rápido, toma esta es mi tarjeta para que me llames por cualquier cosa-

-gracias Giselle, ojala se resuelva pronto esto porque tengo ganas de irme de España- me mira un tanto extrañada

-en serio? Y donde tienes planeado irte? Me dice

-aun no lo sé, a cómo te dije mi vida no ha sido la mar de bonita pero me gustaría irme lejos y empezar de cero-

-mmm entiendo, bueno sabes me caísteis muy bien se ve que eres buena persona y créeme tengo un ojo crítico que soy abogada, dejadme ver qué puedo hacer al respecto cualquier cosa estamos en contacto- nos estrechamos la mano nuevamente y nos despedimos cuando estoy por salir por la puerta Giselle me habla.

-Becca por cierto, cuando dices irte de España, eso implica fuera del país?- lo pienso por un momento realmente no había pensado en eso, solo quería alejarme de casa pero pensándolo bien no es mala idea además dije que sería espontanea

-Bueno eso depende de cómo quede con el divorcio, no quiero dar lastima en otro país, si me entiendes verdad? Me sonríe ampliamente como que sabe algo que yo no luego dice

- claro tranquila nos vemos entonces!- tengo la sensación de que Giselle y yo seremos muy buenas amigas

Al poco tiempo de haber metido la demanda de divorcio sale la resolución y estoy felizmente divorciada, aunque claro cuando Leo se dio cuenta me busco y me rogo que no siguiera con eso que aún me amaba, que solo fue un desliz, pero yo ya había tomado mi decisión y no daría marcha atrás así que aquí estoy haciendo mis maletas, cuando el juez me dio mi libertad Giselle hablo conmigo y me dijo que en su casa tenía un cuarto desocupado ella solo vivía con su hermano, pero que por él no me preocupara él era un chico muy majo y no daría lata y seguro nos convertíamos en grandes amigos.

Yo le dije que no pensaba vivir de a gratis en su casa que buscaría empleo y pagaría el alquiler del piso, ella accedió y hoy me marcho con ella a NY, puesto que ya termino con la misión por la que fue enviada, es una gran chica nos llevamos bien, aunque no me dio tiempo de presentársela a mi familia ya lo haremos otro día ella lleva algo de prisa.

Cuando recibí la mitad de los bienes de Leo decidí que vender la casa de mi madre sería lo mejor para su salud emocional así que Giselle me ayudo a ponerla en venta y compre otra más grande, uno nunca sabe a demás

Santiago está casado y algún día tendrá hijos con Sara además prefiero que vivan con mi madre y no la dejen sola.

A Giselle no la conocen puesto que solo me reunía con ella en el despacho nunca en casa. Giselle pasa por mí y nos vamos juntas al aeropuerto le prometí a mama que en cuanto llegara la llamaría, en el avión mi salud no ha mejorado siento nauseas, y se lo achaco a los nervios de la nueva vida que estoy por empezar así que trato de relajarme en lo que nos suspendemos en el aire...Pasamos horas y horas en el avión y mis nauseas volvieron y salgo dispara al baño y empiezo a vomitar.

Como me demoro en el baño Giselle toca a la puerta –Beck te encuentras bien? Limpio la brisa que está en mi frente de sudor y le respondo

-si estoy bien enseguida salgo- y se va, salgo del baño hecha un papel de pálida, llego a mi asiento y Giselle se preocupa automáticamente – segura estas bien? Te ves pálida, estas enferma? Si quieres te pido algo con la azafata... muevo la mano ligeramente para quitarle importancia

-No claro que no, seguro es algo que comí que me hizo daño, estoy bien en serio- Aparentemente se lo creyó porque no siguió preguntándome más y ahora estoy pensando en otra cosa y me entra la náusea y regreso al baño, y crean o no pase gran parte del vuelo en el...


Cuando El Amor Llega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora