_______ Adams no tiene miedo a morir, pero no se rendirá tan fácil.
Daryl Dixon solo tiene un objetivo: sobrevivir.
No tienen tiempo para cosas como el amor,
¿Será posible que eso cambie cuando se conozcan?
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Había logrado escapar de una horda de esas cosas, y logré llegar hasta un centro comercial.
Me miré en uno de los espejos de una de las galerías. Tenía manchas de tierra y sangre por todas partes. Mi cabello estaba desordenado y sucio, y mi jeans tenían algunos cortes. De todos modos no me importaba mucho, nunca me importó la apariencia. Además, vamos... Estamos en el puto Apocalipsis, no tengo porque lucir "A la moda" Pero si extraño las duchas... Lo que daría por darme una. Hace 2 meses que no encuentro ningún lugar.
Pero bueno, al menos tengo a Sombra, mi fiel lobo. Sé que es algo raro, pero es el mejor y único amigo que tengo. Además es muy inteligente y hábil. Siempre me ayuda cuando estoy en problemas.
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Entré a las galerías del segundo piso, esperando encontrar suerte con algo. Sentí a Sombra gemir un poco, y entendí a la perfección que es lo que quería. Por suerte entiendo que significa cada gemido, gruñido, aullido o gesto que hace, y él me entiende a mi. Suena algo loco pero, hemos estado tanto tiempo juntos, que es como si fuera.... Una persona más para mí.
Me senté en el suelo, vigilando que no hubiera amenazas. Dejé mi arco y el carcaj a un lado, y abrí mi mochila, donde llevaba 5 lista de comida, 2 paquetes de galletas sin sabor, 2 botellas de agua, una caja con balas, una cuerda, un mapa de la ciudad, dos blusas, un pantalón de cambio y lo más preciado, un reproductor de música a pilas con más de 1500 canciones, obviamente con los auriculares. No podría sobrevivir al Apocalipsis sin mi música.
Saqué el paquete de galletas sin sabor y se lo di a Sombra, el cual comía rápidamente mientras yo acariciaba su cabeza. Le tengo esas galletas solo por si acaso, ya que por lo general siempre caza su propia comida, al igual que yo. Solo cuando no encuentro nada o estoy muy cansada como la comida en lata.
Después de que terminara, volví a tomar mis cosas, y busqué entre uno de los estantes. Encontré una lata de arvejas y otra de comida para perro, que guardé en mi mochila. Vi a Sombra un tanto extraño, pero no le tome mucha importancia y seguí buscando. Sombra se acercó a mí, y lo miré extrañada, pero antes de hacer algo, sentí un grito, que no alcancé a escuchar muy bien, pero que era dentro de este mismo lugar. Unos minutos después, sentí un disparo, y supe que algo andaba mal.
Me asomé por la baranda, y vi a cuatro personas luchando contra docenas de cuerpos podridos. Mierda, la única salida está llena de esas cosas. Debo encontrar otra pronto.
- ¿Y no los ayudarás?
- ¿Y tú qué?
- Soy tu conciencia estúpida.
- Genial, gusto en conocerte, pero debo buscar una salida.
