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Capítulo dieciséis

¿Quién me manda a mi a beber alcohol la noche antes del almuerzo con la familia de Benjamín?

Podría culpar a Derek, pero recuerdo que él me dijo reiteradas veces que dejara la cerveza, y lo ignoré. Bebi a la par de los clientes, y eso no es para nada bueno. Más allá de que Tate no sea como todos los jefes del mundo, y que sea mi amiga, debo comportarme en mi horario laboral. Volvi despues de tanto tiempo para embriagarme, genial, perfecto Ava.

Solo bebí por el simple hecho de éste día, y por todo lo que eso conlleva. Cuando Benjamín me invitó a la reunión de su familia, no me había detenido a pensar en todo lo que eso me iba a traer. Esa noche solo me sorprendí, y ahora estoy completamente nerviosa bebiendo un té sanador para la resaca.

—¿Recuerdas lo que hiciste anoche? —me pregunta Tate y cierro los ojos.

—Sé que lo que hice no fue bonito, Tate, lo siento.

Mi amiga se ríe y abro los ojos.

—No lo digo porque hayas bebido en horarios de trabajo.

Frunzo el ceño.

—¿Entonces?

—¿Has mirado tu celular? —niego con la cabeza y se ríe— Toda persona normal, luego de una noche de muchas copas, lo primero que hace al despertar es ver su celular. Muchas veces se entera así de cosas que no recuerda.

Tate me sonríe, y su sonrisa me hace sentir en una película de terror. Oh demonios...

Voy corriendo hacia la habitación, y busco mi celular. Tengo que buscarlo por todas partes, hasta que finalmente lo encuentro tirado en el suelo, cerca de la ropa de trabajo. Estaría teniendo mucho miedo de desbloquearlo, y ver con lo que me voy a encontrar.

Finalmente me animo, y desbloqueo la pantalla. Cuando lo hago, lo primero que me aparece, es el sector de llamadas entrantes. Hay una llamada de Benjamín, la cual dura diez minutos.

Me siento en la cama, e intentó recordar el momento en que hable con él, pero ningún recuerdo se hace presente. Por lo poco que voy recordando, solo sé que Derek me estaba diciendo algo de Benjamin, y que luego... ¡carajo, los mensajes!

Me dirijo a la casilla de mensajes, y casi con ojos cerrados abro mi conversación con él.

Mañana paso por ti a las 11 AM. Esta bien? Espero no haberte despertado, y lo siento por avisar tarde.

Jajjjajaj buenoteçfsdlkhfs ejspero jajsfbsweda

Qué?

Ava, estas bien?

—¡Soy una imbécil! —digo y me acuesto en la cama, todo comienza a darme vueltas.

Escucho la risa de Tate, y luego siento como se sienta a mi lado.

—Es algo normal, Ava, no es el fin del mundo.

Imito su posición, y me siento.

—¿Sabes lo que hable con él?

Niega con la cabeza, y suspiro. Temo por la Ava ebria y su bocota.

—Cuando te saque el celular, Benjamin se estaba riendo, pero luego se puso serio. Realmente estaba preocupado por ti, y quería que te trajera a dormir.