Capítulo 40: Buscando una ¿solución?

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Baekhyun estaba seriamente afectado por los rumores de la universidad. No quería ir a clase y permaneció encerrado. Kyungsoo estaba muy preocupado por eso. Insistió en quedarse con él en casa, pero el chico se negó y le pidió que no perdiera tontamente sus clases por uno de sus dramas. El dueño de casa estaba muy afectado por esas palabras e intentó hacerle entender que estaba pasando por un momento terrible, no haciendo una rabieta. Jongin conocía un poco mejor a Baek, así que consideró que era mejor dejarlo solo por un momento y prácticamente arrastró a su novio a la universidad. 

Mientras tanto, Baekhyun se quedó solo. Empezó a llorar desconsoladamente cuando Chanyeol golpeó con insistencia la puerta de la habitación de Kyungsoo. El chico había entrado al departamento gracias a sus amigos, pero su novio se negaba a verlo. El gigante terminó con los nudillos rojos de tanto chocar su mano contra la dura madera. No le importaba. Lo único que quería era ver a Baek, hablar con él y ayudarlo. 

–Amor, abre la puerta por favor. Escúchame al menos. Baek, por favor, es horrible tener que hablarte así... sin poder verte. Déjame abrazarte, Baek. Por favor, abre la puerta.

–Deja de llamarme así– respondió el chico con voz ronca y quebrada. Chanyeol se sorprendió.

–¿Por qué?

–¡Esa horrible palabra lo arruinó todo el primer lugar!– gritó enojado- Chanyeol sintió un gran fastidio al escucharlo.

–¡Byun Baekhyun abre la puerta en ese instante!– le exigió con tono autoritario.

–¡NO!

–¡Ábrela!– insistió el gigante, pero la necedad del otro continuó.

–¡Ni en un millón de años!– vociferó histérico el castaño.

–Baek, si no abres la puerta voy a tumbarla. ¡Sabes que hablo en serio!– amenazó su fuerte y musculoso novio.

Efectivamente, Baek sabía que era verdad y que lo haría sin dudarlo. Así que se resignó a dejarle pasar. El muchacho entró y lo buscó con desesperación evitando que huyera, aún así Baek lo alejó cuando Chanyeol intentó abrazarlo.  

–¿Qué pasa contigo?– le interrogó dl gigante preocupado.

–Park Chanyeol... tú... al parecer no te das cuenta del lío en el que estamos. Sin darnos cuenta aceptamos frente a muchas personas que somos una pareja. Me llamaste amor y me cargaste a la enfermería cuando estaba herido– el muchacho todavía tenía la nariz un poco hinchada y morada. –Te aferraste a mí como si fuera lo más importante de tu vida y dejaste a tu novia sola. ¿En serio no entiendes?

–No, Baek. Tú no entiendes. Al parecer, después de todo este tiempo no me conoces. Yo siempre pongo las cosas que me importan primero y tengo bien establecidas mis prioridades. Tú eres mi prioridad ahora. Eres a quien quiero proteger. Ni mis estudios, ni una novia falsa ni un montón de personas curiosas iban a evitar que yo te cuidara. Me siento lo suficientemente miserable pensar que dejé que te hirieran... ahora es peor, porque me haces a un lado– Chanyeol rozó ligeramente el rostro golpeado del joven e hizo una mueca de disgusto.

–Chanyeol...

–Te amo. Eres el amor de mi vida. Eres lo más importante. Nada más. Si tengo que pasar por un mal momento por ti, lo haré con gusto– Baek no tenía palabras. ¿Acababa de escuchar lo que acababa de escuchar?

Las cosas con Chanyeol habían sido difíciles desde siempre. Primero fue un amor no correspondido. Luego fue un amor secreto con Cho Hee en el medio. En ese momento era un amor prohibido y criticado por la sociedad. El chico no podía creer que su actual novio le hubiera dicho que lo amaba de esa manera, especialmente porque sabía que era verdad. Lo podía ver en sus ojos, lo podía sentir en sus manos temblorosas.

Acéptame, acéptanos (Kaisoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora