Capítulo 48: Busca ayuda

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–Kyungsoo escóndete ahora– ordenó Jongin. El chico no le hizo caso. Continuó llorando negándose a soltarlo y dejarlo solo. –Kyungsoo, corre. Corre, ¡maldición!

–¿Acaso estás loco? No voy a dejarte. Estás herido, estás sangrando. ¡No!– sollozó el muchacho histérico. 

–Yo estoy bien. No es nada. Lo importante es que te busca a ti y debes correr. Llama a la policía. Llama a los chicos. Busca ayuda. Tu auto está cerca. Corre y busca ayuda– insistió Jongin, pero su novio negó exageradamente con la cabeza y continuó ayudándolo a caminar. 

Jongin estaba herido, pero no era de gravedad. No le importaba su condición, siguió caminando mientras usaba su cuerpo como escudo para proteger a Kyungsoo. Avanzaban entre los oscuros pasillos donde se encontraba la sala de ensayos de la universidad. 

–Kyungsoo. 

–¡No! Tiene un cuchillo... o lo que sea. Estás herido. Dejarte solo sería una tontería– insistió tercamente el muchacho y Kai resopló por la frustración. 

–Llama a la policía. Yo puedo defenderme y no es a mí a quien quiere. Lo importante es que tú estés a salvo. Hyung, necesito que llames por ayuda. Mi celular lo tiene él y el tuyo está en tu auto. Puedes salir gritando, llamar la atención de un guardia, puedes correr a tu auto y encerrarte ahí mientras pides ayuda. Yo te alcanzaré enseguida. Sólo... sal de aquí.

–¡No quiero! No me quiere a mí, te quiere hacer daño a ti. Ya lo hizo. Quiere matarte. Ya lo  intentó. No voy a dejar que eso pase. Iremos juntos– el mayor de los dos limpió sus lágrimas y ayudó a su pareja a seguir avanzando. 

–Si finjo estar noqueado me dejará en paz. ¿Qué es lo que quieres tú? ¿Que te mate a ti?– las palabras de Jongin no fueron adecuadas para la situación, pero no encontraba la manera de convencerlo. 

–¡No me importa si me mata! Eso sería mi culpa... tú no tienes nada que ver con esto– exclamó Kyungsoo en medio de su ataque de ansiedad. 

–No... hagas mucho ruido. Y no digas tonterías. Te dije que iba a protegerte de ese loco y eso haré. Pero no puedo hacerlo solo. Necesitas ayudarme. Busca ayuda. 

Su conversación había llamado la atención de su atacante y en ese momento los pasos de Kang Dae se escucharon cerca, como si caminara apresuradamente mientras intentaba encontrarlos. Jongin, con su brazo sano, empujó a su novio a un rincón para protegerlo. Aquel psicópata los estaba siguiendo y estaba por encontrarlos. Les había atacado a traición mientras estaban en la sala de ensayos. Intentó herir a Jongin, pero escaparon a tiempo. Para su mala suerte, el criminal había apagado todas las luces y les resultaba complicado avanzar. La herida del chico no era muy profunda, pero sangraba y dolía mucho. Para mala suerte de Kang Dae, Kai conocía el lugar mucho mejor que él y logró guiar a Kyungsoo a un lugar seguro. Lo importante en ese momento era pedir ayuda. Pero su novio se negaba a dejarlo solo para correr a su auto y ahora estaban a punto de ser atrapados. Jongin rebuscó en la habitación donde habían logrado entrar y  encontró unas barras. Luego abrió una ventana y respiró hondo. 

–Kyungsoo, escúchame bien. Saldremos por aquí. Quiero que corras más rápido que yo y que me guíes a tu auto. Yo puedo resistir y estoy armado. Llama a la policía, busca ayuda. El 119 suele llegar muy rápido. Te juro que voy a estar bien. 

–No– susurró asustado Kyungsoo, apretando con más fuerza el agarre en su mano.

–Hyung, por favor. Si estamos los dos va a ser peor... por favor–rogó su novio y Kyungsoo le dio un rápido y doloroso beso en los labios antes de salir corriendo.

* * *

–Silencio... shhhh... Chanyeol, ¡cállate! Shhhhh ¡No toques ahí!– susurró Baekhyun mientras golpeaba a su gigante novio. Estaban escondidos, espiando para averiguar quién era la persona que acababa de entrar en la casa.

–Esto es gracioso– se rió el otro chico.

–Claro que NO es gracioso– contradijo Baekhyun, mirándolo de mala manera. –Se supone que prometí respetar la casa de mi madre con respecto a este tema y no duré mucho tiempo. ¿Cómo lograste meterte en mi cama tan fácilmente?– le preguntó frustrado el mayor.

–Digamos, que no es mi especialidad– explicó orgulloso.

–Cállate, Chanyeol. ¡Ponte de una vez la camiseta! Si nos va a encontrar en la habitación, por lo menos que nos encuentre vestidos– le retó Baek y soltó un suspiro.

–Tu mami siempre ha sido linda conmigo, no sé por qué tienes tanto lío con que me encuentre aquí– se preguntó Chanyeol y Baek le volteó los ojos.

–Porque ahora sabe que eres mi novio, idiota– explicó el chico. El gigante abrió los ojos con sorpresa.

–¿En serio?- preguntó sin salir de su asombro.

–Bueno, ya le dije que era gay. Ya no hay nada que ocultar.

–Tu mami es realmente linda Baek, al final resultó ser mucho más comprensiva de lo que pensamos.

–Eso creo– comentó Baek un poco sonrojado.

 Su relación con su madre había mejorado significativamente después de su larga y sentimental conversación Y, contrario a lo que pensaba, cuando varios sus secretos fueron finalmente revelados y las cosas no habían sido un drama. Más bien, sintió que todo mejoraba y que tenía un apoyo incondicional.

–Pero no significa que puedo hacer lo que quiera ahora. No voy a contar detalles de este tipo de cosas. Es difícil e incómodo todavía. ¿Puedes ver algo?

–Falsa alarma, es la señora de la limpieza– gritó Chanyeol emocionado y se lanzó encima de su novio, comiéndolo a besos.

–¡YA! ¡Basta! ¡Chanyeol!– se quejó Baek, intentando quitárselo de encima.

–Gracias por decirle a tu mami que soy tu novio. Sé que siempre fui yo quien ocultaba esta relación, pero ahora quiero gritarla al mundo. Es muy significativo para mí saber que soy lo suficientemente importante en tu vida.

Baek dejó salir una risita suave al escuchar las palabras, se sentía especialmente feliz de la sinceridad en el tono de su gigante tonto. Acarició su mejilla con ternura y le dio un fugaz beso en los labios.

–Bobo– le dijo sonriendo. En ese momento les llegó un mensaje al mismo tiempo. Sólo Baek se dio el trabajo de revisarlo.

–Si tu mami no llega todavía a casa, ¿podemos continuar?– interrogó con una sonrisa traviesa Chanyeol, pero su ceño se frunce cuando ve la expresión de Baekhyun.

–Vístete Chanyeol– le dijo serio y muy tenso. –Parece que algo malo les pasó a Kai y a Soo

* * *

–¿Qué se siente?– preguntó repentinamente Sehun y Luhan se sorprendió.

–¿De qué hablas?– quiso saber, mientras colocaba un plato de comida en la mesa.

–De...estar con una chica– Sehun se sonrojó. –Nunca... nunca he estado con alguien más que no seas tú– admitió avergonzado.

–¿En serio?– Luhan se veía totalmente sorprendido. Eso sí que no se lo esperaba.

–El único. Y como van las cosas, quiero que seas el único– Sehun se sonrojó más todavía cuando Luhan no pudo evitar reírse.

–Eres tan tierno– declaró agarrándole de los cachetes, como si fuera un niño pequeño.

–¡Ya! Soy un adulto y soy tu novio. No puedes tratarme como si fuera un bebé– protestó Sehun, retirando las manos de su novio de su rostro, enojado.

–Eres mi bebé– bromeó Luhan y Sehun no paró de quejarse. 

–¿Cómo puedes llamar bebé a alguien que te....?– Sehun fue interrumpido por unas manos sobre su boca y el rostro de Luhan sonrojado mientras se reía.

–Está bien, ya entendí. No lo digas en voz alta, es vergonzoso.

El estridente todo de llamada de Sehun interrumpió la venganza del menor que miraba a su novio con disgusto. A penas si tuvo oportunidad de hablar y, cuando colgó, se levantó bruscamente y tomó de la muñeca a Luhan, para llevárselo con él.

–¿Qué pasa contigo?– preguntó sorprendido el mayor.

–Algo le pasó a Kai

Acéptame, acéptanos (Kaisoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora