Batalla en equipo

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En algún rincón del universo, se encontraba la nave del enemigo observando la situación desde un portal sentado en su silla con una copa de vino en su mano izquierda, esto no lo favorecía para nada, comenzaba a preocuparle, si no encontraba la forma de volver a capturarla ella con su poder oculto podría eliminarlo fácilmente.

-se levanta de su silla bastante enojado tirando su copa contra la pared y ésta se rompe en pedazos – ¡Estoy rodeado de incompetentes! – Exclamaba molesto dirigiéndose hacia la ventana – ¡Así no lograré detener a Kalula! – Escucha que alguien toca la puerta – ¡Largo! ¡No estoy de humor para recibir a nadie!

-se abre lentamente la puerta entrando un par de dragones de forma humanoides de piel escamosa y brillante uno de color dorado y el otro de color plateado ambos de largas y filosas garras acompañados con unos ojos color uva – lamentamos interrumpirlo mi Señor – se dirigen arrodillándose frente a él – pero le tenemos buenas noticias

-Háganlo rápido... – voltea

-¡Hemos vuelto con más de cinco mil esclavos! – le informa el dragón plateado

-Bien, de hecho, llegan en un buen momento – les comenta – tengo una nueva misión para ustedes dos – dijo con una sonrisa maquiavélica, con su mano enfocó la imagen de Kalula que estaba hablando junto con el namekusei

-¿Ella señor? – cuestiono el otro dragón algo extrañado

-Por ahora no quiero que me la traigan todavía, tengo algo que hacer primero antes de enfrentarla de una vez, solo quiero que se diviertan con ella sin matarla – ordenó

-¡Como usted ordene! – dicho eso ambos desaparecieron

Por ahora aquella chica no era su principal objetivo, tenía algo muy importante que hacer en otro planeta, algo muy preciado que no debía dejar escapar de sus manos, si quería llevar su plan a cabo tenia que estar seguro de que nadie lo interrumpirá durante su transcurso así que sin perder tiempo dirigió su nave a un planeta no muy lejano de la Tierra, sin duda alguna encontrara a Kalula antes de lo esperado...

Mientras tanto en la tierra, los días pasaron en un abrir y cerrar de ojos y como si acabara de hacerla en un dos por tres, Bulma le llamó a todos para anunciar el termino de la dichosa nave espacial pero antes de ir a la corporación capsula, después de almorzar, decidieron hacer un ultimo entrenamiento como repaso.

En lo profundo de las montañas donde había sido su primer entrenamiento, ella se encontraba inmóvil en su sitio muy alerta, todo estaba muy tranquilo, silencioso, tal vez demasiado, sin nadie alrededor preguntándose dónde estaban y en que momento comenzara el primer ataque. De repente dos atacantes en miniaturas aparecieron como un rayo para comprobar que tan alerta estaba ella para que pudiera esquivarlos, era un ataque frontal así que sin problemas la etherion se echó para atrás y dejó que chocaran uno con el otro

-¡AY! ¡Fíjate en lo que haces Goten! – se quejó Trunks molesto sobandose la frente

-¡Tú fuiste el que chocó conmigo! – le contestó igual de molesto

Si bien esto le causo gracia pero aun así no debía descuidar su defensa, rápidamente Goku y Gohan comenzaron a lanzarles enormes bolas de energía mientras volaban a una gran altura, la peliverde esquivo esa lluvia desapareciendo del lugar y aterrizando sobre las montañas mas altas provocando una cortina de humo en el lugar, Piccolo apareció frente a ella y Herion por detrás, se abalanzaron contra ella pero antes de proporcionarle puñetazos y patadas Kalula hizo explotar su aura creando una onda expansiva sacando a volar a sus oponentes al menos unos 100 metros de ella.

Los niños no quisieron quedarse atrás, se dirigieron una vez que ella ascendió a una gran velocidad y la atacaron con una intensa lluvia de puñetazos los cuales la chica bloqueaba con ambas manos y antebrazos, también contraatacaba de la misma manera igualando su velocidad y fuerza creando grande ondas expansivas con cada golpe, no era justo que solo los demás la atacaran, tenia que defenderse así que mientras el ataque continuaba en dirección a la cascada, Kalula aterrizó sobre una roca que sobresalía del agua y cuando observa el diminuto espacio que los pequeños habían dejado para interceptarle cada uno un golpe en la cara, se estiró hacia atrás rápidamente quedando en forma de araña esquivándolo. Esto los tomó por desprevenidos y, sorprendidos de su flexibilidad, descuidaron su defensa así que la chica estiro ambas piernas en forma vertical hacia arriba y tomando impulso con sus manos golpeo a ambos en el mentón mandándolos a volar, una vez hecho retomo su posición de combate. Permaneció en su sitio mirando a los seis oponentes que tenia en el aire, sabia que estaban planeando atacarla de nuevo así que sólo debía esperar, tal como lo predijo los guerreros lanzaron sus mejores técnicas especiales a la etherion creando enormes fisuras en el fondo del agua, destrucción de rocas, olas gigantescas como un tsunami y explosiones. Cuando esa ola desaparece mojando gran parte de la vegetación, Kalula había salido ilesa usando su campo de fuerza como escudo y con una sonrisa en su rostro.

El primer amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora