Que hayas nacido de un tamaño no significa que no vas a crecer

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El dolor que siento es increíble, lo cierto es que a pesar de que mi herida más grave era la del brazo, también me había clavado en las piernas. Odservo mi herida y vuelvo a apartar la mirada... a veces no soporto la sangre. En mí claro está, sino no hubiera estudiado Criminología.

¡Puto dolor! Lo único que está a mi vista claramente es el rostro de Mason y a Nathaly hablando con alguien desconocido que tiene el celular puesto sobre su oreja. Hay un gentío al rededor de nosotros y yo aún estoy sobre la mesa partida por la mitad, me quejo y me vuelvo a quejar por este dolor horrible.

Todo se me nubla, creo que ya perdí mucha sangre. De repente Mason me coje en sus brazos e iba corriendo hasta el hospital conmigo en brazos. Esta situación es muy incómoda.

-Espero que recuerdes esto cuando te pongas a pelear conmigo por Nathaly- dice Mason entrando al hospital.

Enseguida, y sin darme cuenta me ponen en una camilla y enseguida pierdo el conocimiento de todo. Al despertar estoy en una camilla y obviamente en el hospital, aún siento dolor pero creo poder soportarlo.

-¿Estás bien?- dice Daniel él cuál estaba sentado en un mueble y muy bien recostado. Oh Dios, Daniel, me había olvidado de que él estaba en el viaje. Digo ni siquiera lo vi con nosotros estaba totalmente perdido yo hasta lo llamé y mensajes, miles de mensajes le mandé ... bueno lo importante es que está acá.

-¿Dónde diablos estabas bastardo?

-Eso no te incumbe.

Esa respuesta me preocupa y a la vez me alarma. Conozco a Daniel desde hace años y si algo puedo asegurar es que es una tumba andante, él es la persona más discreta del mundo, él podría saber quién mató al rey de inglaterra y quedárselo.

-Daniel, por favor espero que esta vez no estés haciendo cosas raras.

-Lo dice la persona que se enterró un vidrio en el brazo.- él se ríe pero yo aún estoy serio haciéndolo entender que, no es broma, él deja de reír y pone los ojos en blanco- Bien, no estaba haciendo cosas raras, ni lo haré. Además si lo hago tú no te vas a meter en problemas siempre y cuando mantengas la boca cerrada.

-No..., si haces algo ni me lo informes. Por. Favor- digo moviendo mi mirada a otra parte que no sea su rostro- estoy cansado de ser tu complice.

-Siempre tienes buenos resultados- dice Daniel risueño.

-Por poco nos descubren la otra vez.

-Si, fue divertido. Esa mujer ya no vive ahí por lo tanto podemos ir cuando queramos.

-¿Y que nos metan presos por interrupción a propiedad privada? No, gracias.

-Vamos nadie se va a enterar, ya verás que vas a acceder- dice muy seguro de sí.

Entra el doctor y dice que puedo salir cuando me sienta mejor, obvio aún me dolía pero no por eso iba a estropear el viaje a París. Salgo de la habitación y veo a la francesa que antes estaba persiguiendo..., la cual grita sobresaltada algo en Francés.

-¡Es él! ¡Es él!

Daniel me mira confundido y yo enseguida corro fuera del hospital con Daniel atrás de mí.

Sigo y sigo corriendo, me aleje lo suficiente por segunda vez en el día. Daniel estaba atrás de mí y enseguida se tendió en la cera de París, lo cual era una bonita anécdota que contar. Con respiración rapida y levantándose se encontraba Daniel el cual pedía a gritos agua.

-Por favor... no vuelvas a hacerme correr tanto- dice Daniel cansado.

Yo también lo estaba pero me dominó la risa cuando veo la cara de Daniel.

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⏰ Última actualización: Jan 28, 2017 ⏰

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