Una nueva vida es posible

Capítulo 30

N/A: Esto va viento en popa. Ahora con las tardes libres me he vuelto a poner manos a la obra y estoy avanzando con la historia rápidamente. Creo que más o menos la historia llegara a los 50 capítulos o se quedará muy cerca aun me queda para llegar ahí pero estoy intentando que el camino hasta el final sea el mejor posible para que podáis seguir enganchados a la historia. Quiero daros las gracias a todos por seguir la historia y como no en especial a ladydkl por su aporte a la historia y porque si no fuera por su rapidez y eficacia el domingo no podría actualizar. Así que muchas gracias a mi compañera por su trabajo y por su apoyo para continuar con la historia.

Los personajes no me pertenecen...

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POV RICK

Había llegado el día, y no recordaba haber sonreído tanto jamás, me dolían las facciones de hacerlo. Me despedí de todos y cada uno de mis compañeros de terapia, además de darles todo mi apoyo para que salieran pronto como hacia yo hoy. También hable ya con Lanie, y dejaba a mi doctora pero me llevaba a una muy buena amiga, incluso hicimos planes para vernos fuera, porque según dijo, se había hecho adicta a la relación que teníamos Kate y yo. Y la verdad es que cuando le contaba mis avances se le veía con muchas ganas por saber, me hacía mucha gracia su entusiasmo.

Mis maletas estaban hechas y estaba esperando a que llegara alguien a por mí. Me apetecía ver quien venía a por mí, ver a mi madre, o quizá a Kate, necesitaba verla y llenarme de ella, de su sonrisa, de su voz, de su sabor, de toda ella.

Recogí las cosas del escritorio que era lo único que me quedaba. Allí estaba la foto que ella me dio, en la que salía con Dani. Siempre me sacaba una sonrisa mirarla. Me había ayudado mucho los días que me encontraba solo y que las fuerzas empezaban a fallarme.

La metí en la cartera, la que me habían devuelto, junto con el móvil, la guarde junto a una foto de mi pequeña Alexis. También cogí la libreta en la que había plasmado una nueva historia en donde Kate era mi protagonista, al igual que en mi vida, ella era el centro de todo. Por supuesto, tenía que hablar con ella de ese tema para pedirle su autorización, aunque había tiempo para eso, no quería correr. Ni siquiera estaba seguro de querer volver a escribir, de volver a meterme en ese mundo. Ahora tendría una familia, debía pensar en ellos y como les podía afectar este mundo en el que llevaba demasiado tiempo metido. Si por mi fuera, estaba acostumbrado a las revistas y periódicos sensacionalistas, pero a ellos no les podía meter en ese mundo de habladurías y rumores que hacían daño.

Cogí las maletas y me encamine a la entrada, donde debía esperar para ver quién venía a por mí. Estaba allí quieto, esperando, cuando vi como la puerta se abría. Espere rezando para que vinieran pronto, hasta que vi a Kate entrar donde me encontraba. La sonrisa de mi rostro lo decía todo, deseaba tanto que fuera ella y no otra persona la que viniera a buscarme. Solté las maletas en el suelo y fui corriendo para a abrazarla. Ella se lanzó a mis brazos y la apreté contra mi cuerpo todo lo que pude. Quería que los dos fuéramos uno, que nunca pudiera separarse de mi... pero tuve que hacerlo porque la estaba dejando sin respiración. Cuando me separé, me beso, sentí sus manos sobre mi cuello acercándome para profundizar en mi boca que la recibió totalmente entregado. Estábamos ambos perdidos en nuestras bocas, hasta que tuvimos que separarnos porque nos habíamos quedado sin aliento debido a la pasión de nuestro encuentro.

- ¡Dios! Ha sido increíble.

- Si - dijo Kate sonriéndome - me miró fijamente y me dijo - creo que te alegras de verme...

- Ni te imaginas cuánto. Gracias...

- No me lo perdería por nada del mundo - dijo con esa enorme sonrisa que me tenía cautivado.