Una nueva vida es posible

Capítulo 37

N/A: Gracias a todos los que leéis la historia y en especial a aquellos que dejáis un comentario tanto en la misma página como en twitter, y aquellos que retuitean o dan favoritos a mis tweets con los enlaces de los capítulos. Gracias a todos por seguir de cerca la historia y por participar de ella. Como no darle las gracias a mi compañera por su trabajo.

Los personajes no me pertenecen...

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POV KATE

Todo el camino Rick fue muy callado, apenas me miraba a mí, en cambio le veía fijarse en nuestras manos unidas, como si eso le diera fuerza. Necesitaba ver su sonrisa de nuevo, ese Rick triste, en estos momentos tan bonitos no me cuadraba, me faltaban bromas, su voz cantarina...

Llegamos a casa y notamos el silencio, estaba claro que no había nadie. Rick se quedó en el sofá mientras yo entraba en mi habitación para cambiarme, me puse cómoda y cuando fui a la cocina encontré una nota.

"Hemos ido al parque un rato, volvemos enseguida. Un beso mami"

Pensé en contárselo a Rick, a ver si conseguía sacarle una sonrisa. Me acerque despacio sentándome a su lado. Entrelacé mis dedos con los suyos, entonces nuestros ojos se encontraron.

- ¿Estás bien? - pregunte por milésima vez preocupada.

- Si - mintió.

- Yo... no se verte así Rick, me duele - Ojala hubiera podido decirle cuando le quería, seguro que eso le hubiera sacado una sonrisa. Pero no podía, no me salían las palabras. ¿Y porque no me salían, si era lo que sentía realmente?

- Kate, lo siento, sé que he chafado la maravillosa velada de ayer, pero quiero que sepas que soy muy feliz a tu lado, y no cambiaría el haberte conocido a ti, a Dani y a Jim por nada del mundo... solo dame un poco de espacio, deja que coja fuerzas de vuestra compañía y mi alegría volverá, y si voy a sonreír y ser feliz a partir de ahora es todo gracias a ti. Así que, no quiero verte mal por mi culpa - dijo dedicándome un pequeña sonrisa.

Sentí mucho no poder expresar con palabras mis sentimientos, pero al menos debía demostrárselo así que junte mis labios a los suyos en un suave y tierno beso que el recibió del mismo modo hasta que escuchamos la puerta y nos separamos despacio ambos con sonrisas en la cara y sin apartar la mirada el uno del otro. Escuchamos la llave como abría y al instante apareció entre nuestros brazos Dani, con su vitalidad y fuerza cual terremoto.

- Mami, mami - gritaba mientras nos abrazaba

- Hola amor. Mira quien ha venido - dije señalando a Rick y enseguida se lanzó a darle un fuerte abrazo, instantáneamente el rostro de Rick cambio y abrazo al pequeño como si pudiera así contagiarse de su fuerza.

- Hola colega - le dijo mientras se saludaban dando una combinación de choches de manos.

- Hola Rick, ¿Has visto mama? Me lo enseño el otro día... es secreto. - dijo orgulloso.

- Cariño - dije tirando de él para que se sentara en mis piernas - ¿Te apetecería que Rick se quedara unos días con nosotros?

- ¿De verdad? - dijo el niño con una sonrisa en la cara, pero a mi él en estos momentos no me importaba, sabía que el niño iba a estar feliz, mi preocupación era mi padre, al que mire. Solo me dio un simple asentimiento con una sonrisa por respuesta, y eso me bastaba, sabía que todo estaba bien.

- ¡Guau! Entonces podremos jugar mucho - dijo Dani feliz.

- Claro, todo el rato... si mama nos deja - dijo Rick feliz con el crio entre sus brazos, se notaba que se le caía la baba con mi hijo.