-Narra Malú-
Todos en la discográfica se habían dado cuenta de que no era 100% yo, estaba muy distante y es que mi cabeza sólo podía pensar en llegar a casa y en hablar con Vanesa, poder explicarme.
Cuando llegué le mandé un mensaje a Vane para que lo supiera, arreglé la casa y sólo me faltaba cambiarme, pero entonces sonó el timbre. Abrí creyendo que era ella, pero no. Era Aida.
-Hola -sonrió mientras aprovechaba mi shock y pasaba dentro de mi casa.
-¿Qué haces aquí?
-He venido a verte.
-Eh... sí... mira, voy a ir a cambiarme que me tengo que ir, y espero que cuando baje ya no estés. -Me giré, subí las escaleras y fuí a mi habitación.
-Narra Vanesa-
No sabía qué me querría contar Malú, desde que quedó con Aida me tiene muy preocupada y la verdad, tengo miedo.
Sé que no se habrá besado con ella ni habrá llegado a más, porque sino no tendría sentido mi reconquista.
Antes de llegar paré en una floristería y le compré un ramo de rosas que sabía que le encantaban. Llegué a su casa y ví que estaba la puerta abierta, lo que me sorprendió. Al entrar ví a Aida sentada en el sofá.
-Hola, ¿quién eres? -me preguntó sin moverse, yo dejé las rosas en la mesa y me dirigí hacia ella.
-Soy Vanesa,¿y tú?
-La futura novia de Malú.
-Ah -me reí, sabía que Malú nunca estaría con ella- ¿Y eso?
-Bueno, antes de ayer me dijo que no quería nada conmigo pero poco después me besó, y cuando una persona te besa es porque siente algo por ti, ¿no crees?
-¿Cómo? -Me crucé de brazos, alcé las cejas y seguí preguntando dentro de mi asombro- ¿Es mentira? -Necesitaba que dijera que era mentira, todo un escalofrío se apoderó de mí e inevitablemente mis ojos se llenaron de lágrimas.
-¿Qué te pasa? -se levantó y me ofreció un pañuelo. Yo lo acepté pero no podía hablar, así que continuó- ¿Malú es tu amiga y no te había contado que era lesbiana?
-Aida... -dije como podía con voz entrecortada y casi sin aire- Malú y yo somos novias... o eso creía.
-Lo siento... Me dijo que estaba enamorada pero me besó y...
-¿Está arriba? -pregunté con rabia, ella asintió así que recargué toda mi furia dentro de mí. Cogí el ramo de rosas y subí las escaleras rumbo a su habitación, la puerta estaba abierta así que entré sin más.
-He sido una gilipollas -le grité mientras tiraba el ramo en el suelo y le daba una patada. Ella me miró, sin saber qué pasaba así que seguí- ¿Qué? ¿Haces como si no hubiera pasado nada? ¡Lo sé todo, Malú! Como he podido ser tan idiota...
-Vanesa, tranquilizate. ¿Qué te ha contado Aida? ¡No te tienes que fiar de ella!
-¿No? ¿No te besaste con ella un día antes de hacerlo conmigo? Me tuviste detrás tuya mientras tú estabas con ella sin decirme nada, soy una gilipollas pero tú una imbécil.
-Vanesa, relájate. Mira... le dije que no quería nada con ella, que estaba enamorada de ti. -Se sentó- Pero ella se abalanzó sobre mí y me besó... y al principio quise separarme, pero mi mente empezó a imaginarte con Axel y con Inma y... no sé, tuve rencor, lo mismo que te pasó cuando te besaste con Inma... tienes que entenderme.
-¿Entenderte? ¡Entenderte! -grité- ¡Utilizas tus rencores para hacer lo mismo que no te gustaría que te hiciesen! ¿En esto se basa nuestra relación? Entonces yo ahora por rencor me tocaría liarme con otra, ¿no? Vamos en cadena. En fin -Me dirigí a la puerta y bajé los escalones con prisa mientras Malú corría detrás mía. Aida ya se había ido, yo me paré en la puerta y la miré por última vez. Necesitaba saber una cosa más:
-¿Llegasteis a algo más?
-No... Vanesa claro que no... Al separarme la eché de casa.
-Vale -abrí la puerta pero entonces me giró hacia ella.
-Vanesa, por favor. No dejes que esta tontería rompa todo lo que tenemos...
-Lo que tuvimos -corregí- No tengo confianza en ti, ni tú en mí. Sabía que esto no iba a funcionar...
-No, Vanesa, por favor -se arrodilló delante de mí mientras ambas llorábamos derrumbadas en un océano, que difícil se hacía esto de perder a la persona que te había enseñado qué era enamorarse.
-Malú, levántate -la incliné hacia a mí- No es culpa tuya, es culpa de las dos. Lo siento pero esto... no puede seguir. Nos estamos haciendo daño, mucho... Y no voy a caer más. -Me separé de ella y corrí hacia mi coche para que no pudiera frenarme. Poco después estaba perdida en mis sábanas, llorando, y sabía que me iba a llevar meses hacer vida nueva. Pero tenía que hacerlo, y ella también. Nos merecíamos ser felices y juntas no podíamos.
-6 meses después-
Hoy he sacado mi libro 'Mujer Océano'. En todo este tiempo no había hablado con Malú, sólo sabía de ella lo que decían las notícias, las cuales también indicaban que seguía con la farsa de que Gonzalo Miró y ella estaban juntos. Yo, por mi lado, había retomado relación con Inma, sólo éramos amigas pero me estaba haciendo olvidar a Malú.
En estos 6 meses me he refugiado en escribir,y de ahí salió 'Mujer Océano' mi libro lleno de poemas, casi todos, cómo no, describían a Malú.
Hoy, también, hacía una firma en Madrid en la que acudieron muchísimas personas.
Estaba tranquila, abrazando a cada uno de mis fans y sonriendoles a los que se merecían todo, porque gracias a ellos soy quien soy.
Pero entonces, un grupo de jóvenes se acercó a mí y empezaron a suplicarme:
-Vane, por favor, necesitamos pedirte una cosa.
-Eh, sí, decirme.
-Verás... dentro de nada es el cumpleaños de Malú -tragué saliva al escuchar su nombre- Y bueno, todos los famosos amigos aparecen en el vídeo. Es para que tú aparezcas, también.
-Eh... sí, vale. -Y no sé por qué dije que sí si ni siquiera sabía nada de ella. Respiré, me dijeron un 'ya está grabando' y las palabras salieron solas:
-Bueno, Malú, muchas felicidades... Ya te lo diré personalmente pero bueno... -Mentira. Seguramente no me atrevería a felicitarla- Pero bueno... que... te quiero. Tus fans me han pedido que haga este vídeo, las tienes locas -sonreí a la cámara- Un beso, Malú. Espero que todo te siga yendo así de bien.
Las jóvenes me agradecieron pero yo al instante ya me había arrepentido.
---Días después---
Hoy era el cumpleaños de Malú y tenía claro que la iba a llamar. Ya de ella dependería cogérmelo o colgarme.
Entre a las redes sociales y entonces ví que todo el mundo hablaba de 'valú', y no entendí por qué.
Entre al twitter de Malú y ví que había visto el vídeo de sus fans, y entonces un escalofrío me recorrió. Ya habría visto mi felicitación... Y en efecto, al instante recibí un whatsapp de ella:
'Hola, Vanesa. Gracias por tu felicitación, yo también me alegro de q te vaya tan bien y me compraré tu Mujer Océano. Saludos'
Escribí mil veces la respuesta y mil veces la borré, no sabía que decirle. Al final opté por:
'Estás en casa? Me gustaría felicitarte por llamada, por lo menos'
Y me arrepentí al instante. Soy de esas personas que siempre se arrepienten de todo, siempre pienso que haga lo que haga me estoy equivocando. Y respondió...
'¿y si vienes? Hay tarta, de la q te gusta ;)'