Donde los mejores amigos de Harry y Louis mueren, dejando a cargo su hija para ellos.
Basada en la película "Bajo el Mismo Techo" no en su totalidad, pero el trama es el mismo.
Habían sido miles de intentos hasta poder lograr convencer a ambos jóvenes para cuidar a su hija, ellos necesitaban una noche, una cita solamente. Pero con la pequeña niña de cuatro años acortaba sus necesidades.
Estaba claro que ambos chicos parecían llevarse terrible, fatal. Habían mantenido una pequeña historia hace unos cuantos años la cual termino peor que al comienzo. Pero los esposos sabían que eran los únicos que podían entender y saber como cuidar a su hija.
Harry siempre miraba al mayor, Louis. Y no, no era por su "belleza", simplemente se llevaban mal, había algo en su personalidad inmadura. A demás que desde donde sabía, Louis había sido siempre el estereotipo de "chico perfecto" cuando en sus pocas comunicaciones que habían mantenido siempre terminaban en una pelea.
Aún que no era poco obvio la pequeña tensión sexual que se mantenía entre ambos, Louis mantuvo un no tan pequeño crush en el menor, y quizá era mutuo, pero solo físicamente. Porque Louis nunca saldría con alguien como Harry, y Harry no saldría con alguien como Louis.
-Muchas gracias por cuidar a Lily esta noche, chicos.- Sonrió la pelirroja dándoles a ambos un abrazo para luego juntar su mano con la de su esposo, ambos cuerpos parados bajo el umbral de la puerta, la sonrisa nunca se marcho de sus labios y menos cuando se marcharon hacia su auto y luego comenzaron a alejarse, la puerta fue cerrada y en cuanto Harry se giro observo con sus ojos verdes al ojiazul que sonreía.
-¿Harry, cierto?
-Louis, de verdad. No tengo el humor para aguantar tus estupideces ahora mismo-Rodo los ojos, acomodando a la niña que estaba sobre su brazo abrazándose a él mientras dormía.
-Nunca estas de humor, ya se porque no tienes pareja-Se burlo observando al ojiverde rodar los ojos.
-Que bien, tienes la madurez de un niño de seis años. Y para que sepas, estoy viendo a alguien.
-¿A sí? ¿Pues, cómo se llama el afortunado?-Sonrió
-Ashton
-¿Ashton? ¿Se apellida Kutcher?-Sonrió de forma burlesca, observando el rostro del ojiverde teñirse de rojo.- Dime de verdad quien es tu "supuesta" pareja
-¿Qué te importa de todas formas?-Soltó un gruñido para darse la vuelta y dejando a la niña en su camilla para luego caminar hasta la cocina y abrir la heladera tomando algunas frutas. Orgulloso de su respuesta.
-No deberías tomar comida de las casa ajenas, se llama educación-Bromeó- ¿No escuchaste, bebé?-El sarcasmo no paso desapercibido para el menor, quien soltó un suspiro tembloroso.- ¿No te gustaría tener una cita conmigo?-Sonrió, el tono burlesco siempre presente.
-No me digas "Bebé", ¿Quieres?, Y mi mejor amiga me dejo tomar lo que quiero-gruño girándose para quedar frente a Louis- No saldría contigo nunca , cabe decir.
-Ouch-Coloco su mano sobre su pecho- Bien bien... te dejare solo, debo ir a ver a la bebé de todas formas-sonrió dándose vuelta para alejarse, Harry hizo un smoothie de frutas salvajes que por suerte compro Anna en un supermercado ecológico, luego de que Harry le de una larga charla de porque es mejor comprar ahí.
Luego de que Louis hubiese aparecido de nuevo, supo que Harry estaba cocinando por aquel exquisito olor a sopa. Tomo su celular para encaminar pasos hasta la cocina donde Harry estaba, quien tenía su cuerpo agachado levantando su trasero un poco mientras rebuscaba algo, Louis podía odiar a Harry, pero debí admitir que el cuerpo del menor era como un placer visual, sus muslos y su pequeño y redondo trasero lo hacían babear. Cuando se conocieron Louis no paso desapercibido lo hermoso que es el rizado, le coqueteo toda la noche pero solo obtuvo un bufido y ver como el ruloso se marchaba enojado, de todas formas admite que fue un estúpido y agradece haber madurado lo suficiente.
Y por ello, se pone en plan "odio", Josh decía que lo supere, que estar resentido por el simple hecho de que Harry no le dio importancia no merecía tenerlo como un grano en el culo, pero Harry es gracioso cuando se enoja.
Y eso, eso es divertido.
-¿Necesitas ayuda?-sonrió apoyando su espalda en la blanca pared.
-Me sería útil, gracias-Sonrió por primera vez en la noche- Necesito la sal, esta arriba en el cajón-sonrió, moviendo la masa.
Louis lo intento, de verdad, daba pequeños saltos cuando ponerse de puntas no fue posible, Harry aguanto la risa, se veía como un niño pequeño. Sin más Harry se coloco atrás de él tomando sin esfuerzo alguno la sal y sonriendole dulce a Louis para que no piense que se burla de él, aún que vamos. 24 años y no llega a tomar la sal, sí es gracioso.
-Yo estaba a punto de agarrarlo pero-Harry lo interrumpió
-Lo sé-sonrió gracioso
-¿Qué sabes?
-Que eres bajito
-¡Mido 1.75!-gritó- No es mi problema que seas un monstruo de dos metros
