Iba corriendo hacia la academia, llegaba tarde como siempre, realmente hoy no tenía ganas de ir. Hacía un día horrible, el cielo estaba teñido de un gris sucio y hacía mucho viento. Mi pelo ondulado y de un color rubio extraño se me pegaba a la cara. Bufé exasperada y aceleré el paso. Dioses como me dolía la cabeza, y mañana tenía examen de matemáticas... Quién me mandaba a mí leer fanfics hasta las tres de la mañana. Puto Harry Potter, puto Draco Malfoy y puto Severus Snape.
En fin, lo único que podía hacer ya era darme prisa. Que jodido coñazo de vida... problemas del primer mundo... *remordimientos ON* Pasé corriendo delante de una tienda cuando...
-OH DIOS MIO- El giratiempo de Hermione estaba a la venta en aquella tienda de objetos de segunda mano. Miré mi reloj de bolsillo. Farfullé un par de maldiciones y entré en la tienda- Va a ser solo un momento, solo un momento. Miro el precio y me voy, miro el precio y me voy- Me repetía mientras miraba las estanterías en busca de aquella joya. -Disculpe - el dependiente, un hombre relativamente joven con perilla y el pelo largo suelto, me miró curioso- El colgante...el giratiempo cuánto cuesta- frunció el ceño levemente y sonrió- Ese es solo de muestra, busca por la tienda, tal vez haya otro... - No, no lo hay, ya he mirado. Y la verdad no tengo mucho tiempo- Dije mirando de nuevo el móvil- ¿Por eso quieres el giratiempo?- soltó una carcajada- Anda, mira al fondo, por aquellas estanterías, no sé si quedará algo- Me dirigí al fondo de la tienda y empecé a levantar comics, mangas y revistas de los años ochenta, llenas de polvo y manchas. Un destello dorado llamó mi atención, allí estaba, el famoso giratiempo de uno de mis personajes femeninos favoritos de la saga de Harry Potter. Contuve mis ganas de gritar al más puro estilo fangirl.
Alargue el brazo y cogí con cuidado el giratiempo, lo miré un par de segundos y lo pagué. El dependiente me miró extrañado cuando le dije que lo había encontrado, sin embargo no le di mucha importancia, me había retrasado veinte minutos- ojalá pudiera recuperarlos- dije mientras me lo colgaba del cuello. Sentí un tirón en el estómago y...
Me vi a mí misma, casi corriendo, por la calle, el pelo me tapaba media cara y tenía el uniforme arrugado. Aguanté la vergüenza que me producía verme de aquella forma y me llevé las manos a la boca, conteniendo el grito de sorpresa. Por fin, por fin había pasado. Me había vuelto completamente loca, la culpa la tenía el café, los libros y la falta de horas sueño.
Desee volver. Estar donde estaba antes... De nuevo aquel tirón en el estómago... Y aparecí, justo donde había desaparecido.
Sip, definitivamente me había vuelto loca. Detuve mis pasos, me senté en un banco y rechacé la idea de ir a la academia. Mandé a la porra los exámenes y las tareas...
...Acaricié el colgante y supe que a partir de hoy TODO iba a cambiar.
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Viajando En El Tiempo
RandomClara, una chica de 17 años, amante de la literatura compra un giratiempo pensando que es sólo un objeto de colección normal, sin magia. Las cosas se complican cuando al darle vueltas consigue viajar de verdad en el tiempo. ¿Llegará a conocer a todo...