Hijo del Señor Kim
A pesar de que ambos chicos eran provinientes de familias con dinero, eran sencillos. Vivían bien, pero eran igual de normales que cualquier otra persona, en el sentido de no sentirse superior a otros.
Park Eun Jan
El despertador timbró por tercera vez, anunciando eran las ocho diez de la mañana, la luz del sol se asomaba por el gran ventanal que cubrían unas enormes cortinas color salmón. Hoy sería mi primer día de entrenamiento y comenzaría con mis labores en una importante agencia de modelos. Listo, de ser modelo de nuestra compañía, pasé a ser la aprendiz del hijo de un gran director, que además es amigo de mi padre.
Decidí permanecer bajo las cobijas cinco minutos, luego de observar el reloj una vez más decidí levantarme antes de retrasarme. Fui directo al armario para buscar algo de ropa, terminé de encontrar lo que usaría este día y pronto me apresuré a tomar una ducha.
Al sentir el agua tibia recorrer mi cuerpo quise permanecer debajo por más tiempo, era tan delicioso. Al salir traté de alistarme lo más pronto, se hacía tarde y no quería causar una mala impresión.
Cerré la llave que daba salida al chorro de agua caliente y en seguida envolví mi cabello con una toalla para después tomar otra y hacer lo mismo con mi cuerpo. Estando ya en mi habitación procedí a vestirme, luego de ello peiné mi cabello lo más rápido que pude, tomé una de mis gafas de sol favoritas, recogí mi bolso de la cama y salí de la habitación. Bajé hasta la cochera y fui directo a mi auto, esta vez ni siquiera pude retocar mi rostro, es hora de irme.
Kim Hyun Joong.
Otro día más, el sol comenzaba a hacer presencia y yo tenía que alistarme para el trabajo.
El clima frío era perfecto para pasar el día entero en cama, no me quería levantar, pero hoy tenía mucho por hacer, mi padre quiere presentarme al nuevo socio y a su hija, quien trabajará conmigo un tiempo.
Después de levantarme tomé un baño rápidamente, me vestí, calcé, perfumé y puse en orden mi portafolio dispuesto a irme ya, no sin antes almorzar algo. Me dirigí a la cocina y preparé café,mientras lo bebía echaba un vistazo al diario de ésta mañana. Bebí hasta la última gota del líquido caliente en aquella taza y enseguida fui a encontrarme con mi padre que esperaba por mi en el jardín, vamos juntos hoy.
Ya en el auto comenzamos nuestro recorrido hasta la agencia.
-Necesito que trates bien a la hija de Jun Hoo, también quiero que la ayudes en todo lo que necesite, ¿entendido?- dijo mi padre volteándo a verme.- Choi, acelera un poco más, necesitamos estar un poco antes allá.- ordenó al chofer.
-¿Por qué es tan importante para ti?- cuestioné de pronto, me surgía la duda.
-Hyun Joong, Park Jun Hoo es mi mejor amigo. Así que velo como alguien más de la familia.- finalizó y yo asentí.
Nos tomó al rededor de cuarenta y cinco minutos llegar, y una vez que lo hicimos mi padre fue directamente a su oficina. Yo por otro lado decidí ir por una Coca Cola a la máquina de bebidas y posteriormente devolverme donde mi padre.
Eun Jan
Llegué a mi destino, me adentré al lugar y fui a recepción para poder registrar mi visita.
-Buenos días, quisiera saber en dónde se encuentra la oficina del Presidente Kim.- dije amablemente a la pelirroja detrás del mostrador.
-¿Tiene cita?- preguntó.
-Si, mi padre y yo tenemos cita con él en quince minutos.
-¿Puede darme su nombre?- la pelirroja volvió a preguntar.
-Claro, Park Eun Jan.- respondí.
Aquella chica revisó en el ordenador una lista que al parecer eran citas programadas con el presidente de la agencia. Detuvo la mirada en un punto fijo de la pantalla y leyó atentamente.
-Señor Park Jun Hoo y su hija Park Eun Jan, 10:45 am.- la mujer se inclinó y buscó dentro de un cajón.- Aquí tiene. Piso 32.- me esbozó una sonrisa luego de entregarme un gafete con el nombre de la empresa y la palabra visitante escrita en él.
-Gracias.- respondí devolviendo ese gesto amable que tuvo conmigo.
Caminé hasta el ascensor, éste abrió sus puertas rápidamente dejando salir a gente que venía de arriba. Entré luego de que bajaran todos y presioné el número de piso al que iba.
En menos de tres minutos ya estaba en el piso que deseaba. Busqué el número de la oficina y al dar con él esperé otro poco más en lo que llegaba la hora de la reunión. Me acerqué a la ventana del pasillo que tenía una preciosa vista de la ciudad y observé por algunos minutos. Me encontraba entretenida cuando de pronto sentí una mano en mi hombro, me giré y vi que era mi padre, acababa de llegar también.
-¡Buenos días hija! ¿Lista?- sonrió mientras me tomaba del otro hombro con la mano que tenía libre.
-Buen día papá. Estoy un poco nerviosa, nunca he trabajado en lugares agenos a nuestra fábrica, pero todo bien.- sonreí.
-Todo saldrá bien hija, lo verás, además recuerda que es por bien de la compañía.
-Lo sé.- finalicé con una sonrisa.
Una de las empleadas nos indicó que pasaramos a la oficina del señor Kim y eso hicimos.
Después de unos minutos, ellos aparecieron allí, Kim Seung Ji y su hijo mayor.
-¡Mucho gusto Eun Jan! , tu padre me ha hablado mucho sobre ti, bienvenida.- Aquel hombre de la edad de mi padre estrechó su mano con la mía.- Espero te sientas cómoda el tiempo que estés aquí.- finalizó con una sonrisa.
-Mucho gusto señor Kim, gracias por darme la oportunidad de trabajar para ustedes.- sonreí también.
-Bueno, ahora déjame presentarte a mi hijo, Kim Hyun Joong.- señaló al chico que estaba justo a su lado.-Él se encargará de enseñarte todo lo que necesites saber.
Me quedé observando al chico frente a mí unos segundos, comenzaba a verme obvia así que decidí saludarlo y presentarme con él.
-¡Qué tal! Soy Eun Jan, Park Eun Jan- me presenté con el chico y luego le ofrecí mi mano para saludarlo un poco más formal.
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UN ROMANCE SIN FINAL [EN EDICIÓN]
FanfictionKim Seung Ji, dueño y presidente de una agencia de modelaje muy reconocida en Seúl, Corea del Sur, decide aliarse con Park Jun Hoo, su mejor amigo, quien también es dueño y presidente de una famosa fábrica de confección de prendas de vestir a nivel...