Perfume de Café [Cancelado]

Capítulo 29 "Dulces sueños"

De los labios de Rize, empezó a tornarse una sonrisa cada vez más notoria hasta tal punto de empezar a carcajear, así estuvo un buen rato hasta que por fin su ataque de risa terminó.
R-vaya -mientras se limpiaba los ojos ya que con la risa empezaba a asomarse una que otra lágrima. -si que te ves genial.
El aura oscura de kaneki se desvaneció igual que la imagen de yeison y el lugar donde fue torturado se desvanecierón, Re apareció sólo y oscuro como había estado antes. Sólo quedó un ken con la postura ergida no se había movido para nada, el cabello le cubría los ojos hasta que alzó la mirada y vio una sonrisa, pero esta vez era su sonrisa real.
K-gracias
Rize le miro fijamente a esos ojos llenos de luz y comprendió que su papel había terminado.
R-lo recordaste... ¿verdad?
K-si ... Se muy bien las cosas ahora
R-bien, mi papel ha acabado aqui - mientras se sacudia las manos en su vestido.
K-espero te encuentras bien.
R-no lo se, pero estamos hablando de mi, estaré bien, mostraba su brazo mientras con el otro tocaba su bicep.
-soy y no soy Rize... estas cosas son muy complicadas -mientras se rascaba la cabeza .
K-pero siempre serás parte de mi.
R- la chica soltó una sonrisa . -que tonto, mejor vete con tu mujer y déjame en paz.
K-lo haré, nunca te olvídate Rize.
R-mejor hazlo, si no quieres tener pesadillas otra vez ¿o si?
K- claro que no, sólo digo...
R-déjate de sentimentalismos, que lloro en las bodas -sonandose con y pañuelo  (¿de donde lo saco?, Ni idea)
K-¿boda?
De repente Rize empezó a llorar con sus pañuelo sonandose la nariz haciendo un ruido nasal gracioso, kaneki se puso nervioso al verla llorar tanto que el ambiente cambió a cómico de repente.
K-cal-¡calmate!.
R-no -mientras su nariz se inundaba de mocos y sus ojos de lágrimas.
K-pero si no me voy a casar.
R-ah no -con tono de duda. -¿entonces por que lloro?.
K-no lo se.
R-Kaneki no me mientas así, dijiste que te casarias.
K-¡yo!, pero, pero  ¡jamás dije tal cosa!
R-mentiroso -mientras Rize le daba la espalda.
K-l-lo siento -¿como rayos llegamos a esto?-pensó ken.
La chica de gafas volteó inmediatamente.
R-si quieres que te perdone, tienes que golpear traseros, es decir tienes que defenderte ¿lo entiendes?  -diciendole con su dedo índice alzado.
K-lo haré, ahora tengo un lugar a donde volver.
R-eso espero.
El silencio de hizo evidente en el lugar tanto que lo volvió incómodo.
K-extrañaré pelear contigo
Rompiendo el silencio pero no podía decirle  mirando le a los ojos asi que miro a un  lado para rascarse la nuca.
R-yo también, eres muy fácil de hacer enojar.
K-¡no es cierto!. Quitándole una mirada enojada
R-jajaja ¿lo ves?
Kaneki se sonrojo y se enconjio de hombros.
R-fue divertido -soltando y gran y profundo suspiro.
K-y ¿Que pasará contigo? ¿morirás ?.
R-no lo se, eso depende de ti, soy parte de tu imaginación ¿recuerdas?.
K-lo se pero...
R-soy parte de ti así que no moriré, vivire contigo, tal vez me tranforme pero no moriré, tranquilo.
K- de verdad Rize, no se como agrade...
Kaneki sintió un dolor en la cabeza, Rize le habia golpeado.
K-¡auch!
K-eso dolió ¿por que lo hiciste?
R-déjate de sentimentalismos.
K-pero...
R-pero nada -interrumpió.
K-es que no se que más hacer.
R-vive.
K-¿que?
R-vive.
Kaneki se quedo helado ante aquella palabra y más que nada la persona que lo decía.
K-¿de verdad eres tu?
R-¡claro que soy yo! si he cambiado tal vez la otra Rize tambien lo hizo, o tal vez tu cambiaste.
K-probablemente  -soltando una mirada triste hacia el suelo.
R-vamos, anímate al fin te desharas de mi.
K-No fue fácil.
R-no lo fue -siguiendole el juego. -pero ganaste- sonriendo.
K-si.
R-...
K-sabes, me gustaría platicar de libros contigo.
R-hubiera sido aburrido tener una platica tan monótona contigo  -
mientras bostezaba.
K-¡oye!
R-lamentó decirte que siempre fuiste muy entretenido, pero no cuando hablabas de libros.
Kaneki sonrió algo forzado miro a un lado como si recordará algo.
K-Rize... mientras estábamos en aquel accidente.
R-olvidalo -sacudía su mano.
R-es cosa de la otra Rize.
K-si, lo se pero aún así quiero que escuches.
K-yo nunca había tenido una cita, contigo pensé que era algo especial. Mirándola a los ojos.
R-y si que lo fue -interrumpió.
K-si fue una cita fuera de lo común.
R-pero fuiste un cena muy pesada, tienes mucho hierro y eso es malo.
-sonrió.
K- si probablemente fue eso.
R-por el momento no te dejes comer por nadie más ¿entendido? No hasta que la otra Rize te coma.
K-¿cres que podrá?.
R-no me subesrimes.
K-eres débil, yo he enterado mucho además eres más baja que yo.
Rize inflo los cachetes del enojo, Kaneki sólo sonrió.
K-esta vez te hice enojar.
R-la primera y la última vez.
K-fue lindo verte enojada, aunque se vio un poco fingido.
R-ahora ya no tendrás pesadillas.
Rize rio naturalmente, mientras su silueta se empezaba a desvanecer, Kaneki entro en un poco de nerviosismo y la miro algo asustado, Rize le siguió sonriendo sin decir nada solo asintió con la cabeza hasta que su figura desapareció en pequeños pétalos de flor del infierno que flotaban en el aire desapareciendo poco después.
T-kaneki ¿estas abajo?
Se escuchó a lo lejos.
Ken se percató de la voz de Touka quien lo llamaba y así miro a las escalas que esuchaba que bajaba.
T-aqui estas ¿que haces? Es muy noche.
K-nada sólo vine a tomar algo de agua.
T-bueno te espero arriba.
K-si, no tardo.
Así Touka regreso de donde vino y ken quedó a solas ante la oscuridad miro en el suelo y recordó aquel frasco Rize que tiró aquella vez, levantó los escombros con las poca visibilidad que tuvo y si, como era evidente se cortó un dedo dejando salir sangre, ken mordió el dedo tratando de chupar la sangre de la cortada.
Poco después ken se acostaba junto a Touka, le abrazo de la cintura mientras el olia su cabello de su nuca.
Así el sueño le alcanza, sus párpados pesados comienzan a cerrarse la vista borrosa hasta empezar estar en la oscuridad.

K-descanza, dulces sueños. -susurro pero no fue dirigido a Touka sino a esa persona que estima y se había ido quien había sido su fiel compañera y amiga, quien fue su salvavidas en ese mar de locura y también la culpable que le ocurría todo esto, no la odiaba, no podía, por una simple razón gracias a ella pudo tener un lugar al cual pertenecee.

Aquella mujer igual que el viento,
Vino como se fue, sin dejar rastro
Pero al igual que la ventisca
Al pasar te descontrola el pelo
Haciendo que lo sostengas
Para que no te golpee en la cara.
Aquella mujer que el viento se llevo
descansa, ten dulces sueños.

Nota: aquí el cap xD espero les guste. Tarde mucho, lo siento.