La Princesita de Papá.

40. Un Maldito Vídeo.

¡Sorpresa, sorpresa!

¡Capítulo nuevo seguido!

-¡Bienvenido hermano!- saludé a mi amigo el día que llegó a visitarnos después de haber ido a ayudar a su tío.

-¡Todo bien hermano! Sigo vivo.

-¡GONZALO!- Se escuchó un grito de emoción bajar por las escaleras. Rápidamente bajó y se abalanzó en un abrazo hacía mi amigo. Entre giros y abrazos, se dieron su saludo.

Mi amigo se comió casi todo el queque que le hizo mi hermana. Abby también lo recibió con mucho cariño y Lobo, no dejaba de bailarle de lo feliz que estaba de verlo.

Y mientras mi hermana le preparaba otro queque para regalárselo al padre de Gonzalo, mi amigo y yo nos fuimos a la sala a ver un partido, es domingo de final.

-¿Ya todo bien con el restaurante de su tío?

-Afortunadamente sí, ya todo quedó arreglado, era una ampliación que necesitaba en la cocina.

-¿Tenía poco espacio?

-Demasiado poco de hecho, son como unas diez personas que le trabajan en la cocina y apenas le entraban como seis medio estrujados. ¡GOOOL, GOOL, TOMÉ HERMANO, SE LO DIJE, LE DIJE QUE LE IBA A GANAR!

-¡ESPERESE AL SEGUNDO TIEMPO! Va a ver, va a ver, nos reponemos.

-¡Lo que digas llorón! Se burló. -Ahh y por eso fue, ocupaba más espacio, mi pa y yo nos encargamos de eso.

-Al menos pasaste ocupado.

-Bastante, pero no te imaginas la falta que me hizo Fio.

-¡Tan enamorado mi amigo!

-Así como usted con Julia, a propósito, ¿cómo va todo Julia?

-Todo va muy bien, la verdad me siento bien con ella.

-Me da gusto hermano.

Nos quedamos un rato en silencio, viendo el partido y recordé esa estúpida invitación de boda que me envió Brenda, y por si fuera poco, en el sobre venía, además de la invitación, una nota que decía:

Espero contar con tu presencia en mi día importante, de lo contrario, puede que te arrepientas. Recuerda que no puedes traer a la niña.

Con amor: Brenda.

-¿Algo más te pasa, verdad?- Me preguntó de un de pronto mi amigo.

-Algo así. Es Brenda.

-¡Uuuuhh! ¿Y ahora qué paso?

-Pues para no hacertela larga, me invitó a su boda.

-¿Qué? ¿A su boda? ¿Con quién?

-Con un corredor, al parecer está embarazada de él y por eso se casan.

-¿No estaba casada?

-Se divorcio.

-Ya veo. ¿Y vas a ir?

-¿¡Crees que estoy loco viejo?! Yo a eso no voy, no quiero tener nada que ver con ella. Pero hay algo que me tiene preocupado.

-¿Qué cosa?

-Dijo que me arrenpentiría si no voy, temo que haga algo en contra de Abby.

-No te preocupes, sólo lo hace por meter miedo, pero seguro no es nada.

-Eso espero.

Seguimos viendo el partido y para mi desgracia, el equipo de Gonzalo ganó, así que ahora le debo un six pack. Pero no importa, le seré fiel a mi equipo, aunque tiendan a perder, ya es el tercer six pack que le doy a mi amigo por un partido, debo dejar de apostar.

* * * * * * * * *

Hoy es sábado y Julia viene a casa para hacer maratón de películas de acción.

-Amor, te ves preocupado, ¿te sucede algo?

-No, no linda, es sólo...

-Dime, sabes que puedes confiar en mí. - No quisiera contarle esto a Julia, pero estoy muy preocupado, hoy fue la boda de Brenda y temo que pueda hacer algo por no haber ido. La incertidumbre me ataca y debo contárselo a ella.

-Brenda me invitó a su boda.

-¿Cómo? ¿Boda?

-Sí, está esperando un hijo del que debe ser ya su esposo y me invitó a su boda.

-¿Embarazada? Pero ella no pue... ¿Brenda? ¿La madre de Abby? ¿¡Y tuvo el cinismo de invitarte?!

-Sí, pero...- Y justo antes de que yo dijera algo, sonó una notificación de un correo nuevo en mi pc, debe ser del trabajo. Me levanté del sofá para ver de que se trataba y era de un remitente desconocido, no traía nada escrito, sólo un archivo adjunto, así que lo abrí al terminar su descarga.

"Hola Liam, soy Brenda, me di cuenta de que no asististe a mi boda, lo cual me entristece, es por eso que no podía dejar que te perdieras de este importante momento, así que, disfruta de la grabación especial de mi boda.

-Brenda Marie Harris Wayne, aceptas a GianCarlo Augusto Moretti como tu legítimo esposo...- toda la parte del "sí" acepto y la promesa y lo demás, fue lo que ella grabó, grabó su maldita boda para mí...

Te dije que te arrepentirías Liam, aquí lo tienes, espero lo hayas disfrutado, porque yo sí"

Y fue así como ese maldito vídeo terminó, de nuevo lo hace, de nuevo fastidia mi vida, ¿porqué rayos lo hace? ¿qué gana? Un teclado terminó estrellándose contra la pared, la silla contra el suelo, estoy harto, desesperado, quiero que me deje tranquilo, papeles terminaron regados por el suelo, mi puño contra la puerta de mi cuarto unas tres veces, ya no puedo, estoy cansado... Y de pronto, Julia viene e intenta abrir la puerta, pero mi puño no la dejaba, me aparto y me dejo caer en el suelo al lado de mi cama, estoy...mal...

-Liam, oí mucho ruido...¿está...todo...bien?- Julia inspeccionaba con asombro, todo el desatre que había causado.

-July yo...no...- Se acercó rápido hasta mí, se sentó en el suelo a mi lado y antes de que yo lo pidiera, me abrazo.

-Tranquilo ¿si? Todo estará bien, juntos lo arreglaremos ¿te parece?- Me sostuvo en su cálido abrazo, me sentía terrible, no entendía porque me hace esto a mí, quiero ya estar tranquilo con Abby,Julia y mi familia, pero ella insiste. Quiero que pare, temo por lo que pueda hacer, y más por Abby, soy yo quien la protege, y si no estoy bien yo, ¿de qué forma protegere a mi hija de una madre así.

Nos quedamos un rato así, hasta que ya me sintiera calmado, me dejé rojos los nudillos y me dolían un poco, decidí crear una cuenta nueva para evitar esta situación de nuevo.

July se quedó a dormir acá con Fio, ya era muy tarde para que volviera a casa.

Aliste a Abby para dormir y ya con todo listo, me llegó un mensaje de texto:

-¿Te llegó mi vídeo? :* Ten cuidado, te conozco bien Liam.

Sentí un calor y una furia recorrer mi cuerpo, pero trato de calmarme recordando las palabras de mi linda July:

"-Tranquilo ¿sí? Todo estará bien, juntos lo arreglaremos ¿te parece?"
Y recordar la calidez de su abrazo me ayudó a finalmente conciliar mi sueño.

Como a las diez de la noche, Abby se despertó llorando.

-¿Qué paso mi princesa?- Lagrimitas bajaban por sus mejillas y hacía unos pucheros, parecía ser que no pudo dormir.-¿Un mal sueño bebé?- Sus ojitos se veían vidriosos y sin dudarlo me extendió sus bracitos para sacarla de la cuna. -Ven mi niñita, duerme con papá hoy, así no sueñas feo y papá duerme más tranquilo.- Pareció entenderme a la perfección, porque duró sólo unos minutos acomodandose en la cama y cayo rendida de sueño a mi lado. Al igual que yo a los pocos minutos, sólo espero que las cosas mejoren de verdad.

Hola a tod@s, les invitó a darse una vuelta por la página de facebook de La Princesita de Papá, aún no tiene muchas cosas ni nada, apenas estoy empezando :) pero dejen sus comentarios e ideas y sus "me gusta" :) gracias. Aparecen dos páginas, pero la que cuenta es la que ya tiene como tres o cuatro publicaciones. :)