La Princesita de Papá.

26. Al segundo intento.

Lilliana en multimedia.

Ya todo está listo, unas flores en un ramo y la casa estaba un poco desarreglada, hice una rápida limpieza y atendí a Abi, ha estado muy inquieta todo el día, como molesta por algo, por eso le di un bañito de agua tibia, y la vestí con ropa fresquita, algo de talquito, y listo, ya estaba de buen humor.

Le di su chupón y jugamos un rato.

Abigail está creciendo muy rápido, ha dejado mucha ropita, quien diría que hace unos meses era tan pequeña, ahora es grande y con mucho cabello rubio un poco rizado, es más ondulado, a Fio le encanta hacerle colitas, y ponerle prensitas o vinchas, es como una muñequita muy linda.

La verdad, me hace feliz ser su padre, me alegra que pudiera vivir, porque ahora que está conmigo, no me imagino sin ella, a veces me da miedo hacer algo mal y que ella se vea afectada, no sé qué decirle sobre Brenda, me da miedo que algún día venga Brenda y trate de quitármela, es su madre, lo sé, pero no quisiera que ella la apartara de mí.

Un timbrazo en la puerta me sacó de mis pensamientos, haciéndome levantarme de la alfombra en lo que estoy con Abi jugando.

Al abrir veo a una guapa y sonriente Lilly que trae un bolso bastante grande que los de costumbre, lo que me dio la intriga de saber que trajo allí. Y por si fuera poco, además del bolso, trae una bolsa de tela con cosas dentro...y otro bolso estilo mochila bastante gordo por lo lleno que estaba.

-¡Ten! me dijo mientras me extendía la bolsa de tela - ¡Son algunas golosinas y cosas de comer durante la película! Sacó dulces, pastelillos, galletas, bombones, y además de casi toda la dulcería.

- ¡Me gustan mucho las cosas dulces, así como tú! Me lanza una de esas sonrisas dulces y conquistadoras que me da. Me da un beso en los labios...con sabor a...malvavisco, interesante.

-¡Mmm, sabe bien! Digo sin pensar.

-¿Te gustó? se sonríe, se me acerca lento -¡Pues aquí te va otro! Me dio un suave y sensual beso que se fue profundizando en intensidad, que se vio interrumpido por el sonar del teléfono.

Era mamá. Lilly se quitó sus bolsos, dejo la comida en la cocina, y fue con Abi.

Cuando llegué estaban las dos bien entretenidas jugando con un pato de peluche y no pude evitar poner una sonrisa en mi rostro.

-¡Es una niña muy bonita Liam! Me dice Lilly mientras se levanta cargándola.

-¡Gracias! Le respondo.

-No me has...hablado sobre su madre... Dijo en un tono y una mirada algo desanimada.

-No hay mucho que contar sobre ella... No sé si quería que Lilly supiera sobre Brenda, bueno, no más de lo necesario.

-¡Vamos Liam, cuéntame! Me dijo con una sonrisa en su rostro, me lo dijo animadamente, como si la mirada anterior fuese sólo mi imaginación, tratando de ocultar su incomodidad ante el tema.

-¿Estás segura? Lilly asintió con una mirada curiosa e interesada.

-Bueno, era una gran chica, fue mi primera novia, teníamos 16 años cuando comenzamos a ser novios, íbamos juntos al colegio, sólo que en distintos salones, nos conocimos por una amiga de ella, que quería presentármela, nos llevamos bien de inmediato, y nos hicimos novios tiempo después...fue una bonita relación.

-Así que, ¿tu primera novia, es la madre de tú hija?

-Así es.

-¿Estuvieron juntos por dos años?

-Sí, dos años juntos.

-No entiendo, entonces fue reciente su rompimiento, porque me dijiste que ella se fue, días después de que naciera Abi.

-Sí, ella se fue dejándonos a Abi y a mí.

-¿Y cómo se llama?

-Su nombre es Brenda, Brenda Harris. El rostro de asombro de Lilly es indescriptible, es como si hubiese visto un fantasma aterrador.

-¿Brenda Harris dijiste? ¿Brenda Harris es...madre...de Abigail? ¿Harris fue...tu...novia? Dijo con susto y asombro.

-Sí, ¿acaso la conoces? Pregunte intrigado ante su reacción. Lilly estaba como en otra parte, parecía distraída y nerviosa.

-¡Lilly, reacciona! Le chasquee los dedos y ella reaccionó dando un saltito del susto.

- ¿Ah? sí, amm, no, es que...yo...amm, la conozco, pero... por las revistas y eso, nada más ¿es una chica blanca y rubia, de cabello rizado y largo, ojos verdes y delgada?

-Sí, a sí mismo es. Le mostré una foto que tenía de nuestro cumpleaños, donde aparecíamos todos.

-No puede ser. Dijo en susurro Lilly. No quise preguntar nada más, seguro se sorprendió de que Brenda, la Brenda modelo tuviera una hija, la verdad no quería yo seguir con ese tema.

-¿Y pues, que vamos a ver? Le dije para salirnos del tema.

-¡Cierto! ¡Vamos! Me tomó de la mano con Abi en brazos y llegamos los tres a la sala, la primera peli fue la que trata de la abeja Maya, Abi estaba de lo más entretenida, y puedo decir lo mismo de Lilly, que aunque Abi se quedó dormida, Lilly y yo la vimos hasta el final.

Llevé a Abi a la cama de Fio, estaba bien protegida y todo, me asegure de que no se fuera a caer.

Cuando volví a la sala, Lilly seguía distraída, como pensativa por algo, vimos la peli, pero ella no le prestaba atención, estaba como preocupada por algo, la tome de la mano y ella se dio un sobre salto, en verdad que estaba nerviosa.

-Lo siento, me sorprendiste.

-Descuida, ¿todo está bien linda?

-Sí, bueno no, es que yo... Vi como una lágrima comenzó a salir de sus azules ojos y rodó por su mejilla, sus ojos se tornaron vidriosos y su voz se quebraba.

-Lilly, tranquila, ¿por qué lloras? Le limpie la lagrima con mi pulgar y acariciando su mejilla.

-No es nada...de verdad ¿me abrazarías por favor? Me dijo con una mirada triste.

-¡Claro que sí! La acerque más a mí, y la abrace, le di un beso en la cabeza cuando ya la tenía cerca de mí y su cabeza bajo mi barbilla. Nos quedamos así un rato, pero luego Lilly se levantó de un instante al otro, no había dejado de llorar.

-Perdón Liam, hoy no puedo seguir más aquí, lo siento...me tengo que ir...te quiero...perdón...

-Lilly ¿qué ocurre? ¿Por qué estás así? ¿Estás bien?

-Sí...es solo que...ya me tengo que ir, luego vengo por mis cosas... Me dio un beso de la mejilla, y salió rápido de mi casa. Luego de eso, no hablamos más durante el día, y tampoco al día siguiente.

No supe porque ella se puso así ese día, tengo la impresión de que fue mi culpa, o de que dije algo que a ella no le agrado, solo espero que las cosas mejoren.