La Princesita de Papá.

49. Es Un Bonito Día.

Aquí les dejo este capítulo, de verdad disfrute escribirlo porque me parece muy romántico y bonito. Cuando vean esto "*" es para que tomen referencia en multimedia.

Con este capítulo damos inicio a las últimas partes de La Princesita de Papá.

9 Meses Después

Estamos en Abril de nuevo, una semana después del segundo cumpleaños de Abby. Mi princesita ya tiene dos añitos, es una niña muy lista, habladora, juguetona, muy dulce y le encanta el rosado al igual que las muñecas y los conejos de peluche.

Mi hermana ya cumplió sus dieciséis años y lo festejo con su tan soñada fiesta de disfraces, le regale un par nuevo de patines, le gusta ese deporte y mi amigo Gonzalo celebró sus veintiún años en Octubre pasado. Le regalé una camisa de su banda favorita y otra de un vídeo juego.

Alquilé una casita a unos treinta minutos de la casa de mis padres. Es pequeña, pero tiene una cocina y una sala acogedora, dos baños y tres cuartos. Un jardín delantero muy grande y el patio está lleno de árboles frutales. Todo eso lo logré gracias a que obtuve un mejor empleo en otra empresa de publicidad y estoy participando como integrante del grupo creativo.

En diciembre fuimos a pasar las fiestas en casa de mis abuelos, es bueno estar en familia, la pasamos increíble, llegó nuestra tía Dalia y llegó el tío Alejandro, no es tío de sangre, es más bien un muy buen amigo de ma y pa, estaba viviendo en Holanda, pero compró una casa cerca de los abuelos. Es un hombre con mucho dinero y en vez de casa es casi una mansión. Es un hombre simpático y alegre. Nos divertimos mucho.

Mi sospecha sobre mi hermana y su embarazo, no era cierta, no era más que un virus algo fuerte que le dio. Julia la examinó y nos dio ese resultado, un virus de vomito y náuseas que esparcio en el grupo de su colegio. Varios amigos suyos y unas amigas también presentaban la misma situación.

Pero volviendo al día de hoy, toda mi familia está hoy aquí, en el jardín de mi casa. Todos vinieron a un día muy importante en mi vida.

Me siento muy nervioso y emocionado a la vez, estoy aquí de pie al frente de todos los invitados. El lugar espectacular, hay muchos arreglos florales en varias partes. Estoy bajo un arco blanco decorado con rosas azules y celestes.

Vestido de traje y corbata mi hermana dice que parezco un muñeco de queque o un Ken.

A mi lado izquierdo se encuentra mi mejor amigo y padrino a la vez y al otro lado del arco está Vanessa y Fiorella, ambas vestidas con un vestido azul oscuro largo y de un hombro.

Quiero esto mas que nada en este momento, pero tengo miedo de quererlo tanto que sea sólo un sueño. La espera se me hace demasiada y me comienzo a sentir muy nervioso, ¿y si se arrepintió? ¿si se asustó y se fue? ¿y si casarse conmigo no es lo que quería? ¿y si lo que quiere es a alguien mejor?... Me empiezan a sudar las manos y Gonzalo nota mi nerviosismo, me da una palmada en la espalda.

-Tranquilo amigo, respira y espera, no debe tardar.- Me dice en un susurro y logra regresarme la confianza.

Una suave música se escucha en el jardín y allí viene mi hermosa princesita con su vestido azul y su corona de flores en la cabeza, viene regando pétalos de flores por el pasillo y unánime: "Awwww" se escucha al ver que Abby coloca los pétalos uno a uno los pétalos en la alfombra. Se quedó un momento viendo la cesta que traía y luego vio lo que le faltaba por llegar y decidió que era mejor idea regarlos todos ya al final del pasillo. Sonríe ante esta ocurrencia, es una suerte que mi padre esté grabando todo.

La música de la entrada nupcial comienza a sonar y todos los invitados se ponen de pie. Mis manos me sudan de nuevo y un escalofrío recorre mi cuerpo...