capítulo 5

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Estoy ya fresca he tomado una larga ducha, abro la puerta-sigues aqui- suspiro, Christian esta sentado en una esquina de la cama.

-esta bien- mira por la ventana que da una buena vista a Brasil que es donde pasamos nuestra luna de miel.

mi diosa interior aplaude-¿perdón?-

-estaras en la universidad Ana- se pone de pie y camina hasta estar en frente de mi- ahora- me toma de la cintura y me acerca a el- cumple tu parte- lleva una de sus manos a mi toalla, lo detengo.

-creo que no entendiste Grey- frunce el ceño- no soy tan bruta- sonrió y llevo mis manos hasta las suyas que se encuentran en mi cintura - no me tocaras hasta volver a Seattle- le susurro al oído, le doy un beso en la mejilla y me safo de su agarre, tomó la ropa que me pondré y vuelvo al baño dejando a Christian como piedra.

Llegó a la cocina por un emparedado, me pongo de puntitas para alcanzar el basó ¡esta muy alto! Siento algo duro en mi nalga, este siempre piensa en sexo ¿verdad?, me giro rápido para quedar en frente de el.

-hola- le digo como si nada.

-hola- se acerca a mi lo que hace que yo me haga a un lado, suspira frustrado- Ana déjalo, ahora-

-¿dejar que?- me hago la inocente y me veo las uñas.

-te he dicho que si Anastasia-

-¡baia baia!- frunce el ceño, a de pensar porque hablo asi, cuando estoy de humor se pueden sorprender de lo que soy capaz de hacer- ¿ahora soy Anastasia?- intenta hablar pero mi celular suena y corro hacia el que se encuentra en el mesón, es la primera vez que estoy tan lejos de mi iphone, ¡es mi vida!.

-hola-

-¡Ana!- ¿es acaso?.

-¡Agustín!-

-que bueno que te acuerdas de mi, mira estamos en Brasil, vine con algunos de nuestras amigas para ir a una fiesta ¿te apuntas?- regreso a ver a Christian que se a sentado en uno de los taburetes y tiene una mano en su barbilla viéndome fijamente.

-¡claro!- me doy vuelta.

-¡bien! Te mandare después un mensaje ¿bien?-

-si adiós- cuelgo y regreso a verlo, odio tener que hacer esto pero, suspiro- puedo..-

-no- se levanta.

-¿que?-

-si piensas salir no-

-pero..-

-¡no!- saca tu carta Anastasia.

-¿ah no? Yo que pensaba perdonarte, se detiene, da vuelta y camina de regreso a mi.

-¿que quieres decir?-

-pensaba que podíamos- me acerco eliminando el espacio que quedaba entre nosotros- hacer unas cosas- traga en seco.

-por dios Anastasia, con eso no juegues, harás que me de algo- sus ojos están más oscuros, son penetrantes.

-¿que dices?- mi diosa interior sonríe victoriosa.

-Ana....- suspira- no-

-bien- me alejo de el no sin antes darle un beso rápido, doy vuelta.

-espera- sonrió y regreso a el.

-¿si?-

-hasta las 9- gruñe.

-12-

-no- lo miro y suspira.

-11- sonrió- ni un minuto más Anastasia- asiento, se acerca a mi pero le doy un beso en la mejilla.

-¡gracias! Iré a arreglar las cosas para hoy- me voy corriendo dejándolo atónito, ¡chupete otra más Grey!.

¿Si decido quedarme? #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora