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- Sueltalo ahora mismo.

Hablaba el profesor Min pero Jimin no obedecía. No esperaba que lo hiciera pero al menos le debía respeto.

- Jungkook. Hablaras conmigo.

Me volvió a mirar y sentí un pequeño choque de electricidad recorrerme. Esa mirada de la que quería escapar me hacía sentir mal, muy mal.

- Jungkook.

Escuché decir al profesor y pude ver de nuevo la mirada de furia en los ojos de Jimin. Temí lo peor en ese momento.

- Profesor Min -dije levantando la vista- ya dije todo lo que tenía que decir. Me marcho. Tengo clase.

Intenté de nuevo safarme del agarre de Jimin quien sorpresivamente me liberó.

- Te buscaré más tarde.

Lo oi decir mientras me alejaba. Me sentí tan pequeño de nuevo. Ya no quería seguir en sus redes. Lo peor era que él había prometido dejarme en paz. Yo ingenuamente le creí. Sigo siendo un niño.

Regrese a mi aula y me disculpe con la profesora de arte la cual me felicito en frente de mis compañeros. Definitivamente ya sabían la noticia. Mis compañeros me miraban con expectación en los ojos mientras yo me dirigía a mi asiento. Odiaba eso.

- ¿Y?

Preguntó la profesora cuando ya me hube sentado. Sólo levanté la cabeza para verla. Parecía esperar mi respuesta.

- Y ¿qué?

En realidad no queria responder.

- ¿Qué te parece? ¿iras?

- Estoy muy agradecido por la oportunidad pero no está en mis planes irme.

Escuché el murmullo de mis compañeros e inmediatamente me sentí mal. Murmuraban cosas sobre mi y aunque no podía escucharlos eso no me agradaba.

- Jungkook. Esto no puedes decidirlo tu sólo.

Habló la profesora mandando a callar a todos. Ya lo había escuchado del profesor Min ya no lo escucharía de nuevo.

- Lo sé. Podemos continuar con la clase por favor.

Volví a escuchar los alaridos y gritos e mis compañeros diciendo que era un nerd. Ni si quiera volteé. Continúe escuchando la clase que prosiguió normal. Como si nada hubiese pasado.

Para la última clase ya no soportaba. Todo mundo hablaba a mis espaldas o me señalaba. No entendía por qué. Sólo lo hacían. Así que yo sólo agachada la cabeza y fingia no escuchar. Tomé todas mis cosas y las guardé. Ni siquiera espere el timbre de salida. Sólo salí corriendo de ahí. Al cruzar el patio del colegio pude ver a lo lejos una figura que me gritaba que me detuviera. Era el profesor Min. Empezaba a odiarlo. ¿Por qué le interesaba tanto que me fuera? No me agradaba su insistencia y sabía que todo el colegio. Al menos los profesores tratarian de convencerme.

Mis padres.

Ellos no podrían estar de acuerdo ¿no?. Mamá jamás enviaría tan lejos a su bebé. O al menos eso quiero creer.

Salí del colegio sin si quiera detenerme a los gritos del perfecto. Sólo hui como tantas veces jamás me atreví.

Cuando Llegué a casa pude ver el auto de Jin estacionado afuera. Me pareció extraño al principio pero luego recordé que no había ido a clases por llevarme al colegio.

Entre sigilosamente y aunque mi intención era no hacer ruido tropecé con una de las mesas de centro que hay en la entrada y ademas casi me caigo.

- ¿Jungkook?

Lo escuché decir pero cuando quice salir corriendo a mi habitación, ya lo tenia parado justo frente a mi.

- Hola Hyung.

- Jungkook.

Volvió a decir. Sus ojos lucían extraños. Rojos. Como si hubiese estado llorando. Me miró y pude ver su expresión de dolor. ¿Estaba ebrio de nuevo?
Si, si lo estaba. Me di cuenta cuando se me hacerco oliendo de esa manera.

Me daba miedo. Que Jin siendo tan él perdiera la cordura al beber, no me agradaba para nada. Aun recordaba la última vez que lo hizo.

- Jungkook.

Volvió a decir y me asusté cuando me abrazó. Tenía tanta fuerza y apestaba a alcohol.

- Hyung ve a darte un baño. Apestas.

Lo escuché reír mientras me abrazaba y en segundos lo oí sollozar. Empezó a llorar y aunque hice todo lo posible por soltarme de su agarre nunca me dejo. Empezaba a asustarme.

- Mi pequeño Jungkook, ¿Cuando es que creciste?

- Hyung. Basta. Prometiste que ya no beberias.

- ¿Lo hice? Es cierto. Sólo te decepciono.

Seguía llorando mientras me abrazaba pero no decía nada. Sólo lloraba. No lo entendí. ¿Por que lloraba?

- Pase lo que pase. No dejaré que te vallas. Te necesito aquí.

¿Era por eso?. Yo. No queria.

- No me iré a ningún lado Hyung.

- ¡No mientas!. Siempre dicen eso y crecen tan de prisa. Siempre se van.

No pude evitar reír un poco. Parecía mi madre. Nunca lo había escuchado tan preocupado.

- ¡No te Rías! Es en serio Jungkook. Mi Jungkook.

- No pienso irme a ningún lado. Lo prometo.

- ¡Deja de prometer!. Si no cumples tu palabra te castigare ¿entiendes?.

Volví a reír y el me soltó. Se quedó un segundo observandome y sonrió.

Pase la tarde en mi habitación.

La leve brisa golpeaba la ventana de la pieza. Me sentía tan cansado emocionalmente que sólo quería dormir. Boté los cuadernos de mis deberes al piso y me acomode en mi cama. Era tan agradable sentir como el sueño empezaba a abrazarme. Tan cómodo. Cerré mis ojos y sentí el viento en el rostro. Me dormí.

Su nueva obsesión [Jikook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora