Reflexionando Después De Los 40 '!

Extra

Elena *.*

Han pasado ya 3 meses desde que perdí mi bebé, y decidí en una tarde, convertirme en alguien que superaría cada obstáculo que la vida le presente.

Mis padres y yo vacacionamos juntos, y fue algo muy bueno para todos, pues pudimos compartir mucho más como familia, tal y como lo hacíamos cuando yo era a penas una niña; además, puedo decir que nuestra confianza aumentó muchisimo. En verdad puedo decir que, más que mis padres, son mis amigos; los únicos en los que confío plenamente y que sé que estarán para mi en todo momento.

Recuerdo que una tarde de esas en nuestras vacaciones, mamá se acercó a mi y me dijo lo siguiente: Amiga tuya soy yo, y lo seré siempre. Puedes contar conmigo sin importar lo que se te presente, porque soy tu madre. A veces quisiera ser al menos un poquito como ella y sé que en algún momento lo voy a lograr. Entiendo que cada cabeza es un mundo y que todos tenemos un pensar distinto, pero mi mamá me inspira a ser como ella; a superar todo, a estar siempre con una sonrisa y su sarcasmo para evitar tomar todo tan en serio. A veces pensaba que estaba mal eso de ser sarcástica, pero es que ella es así porque sabe que sólo de esa manera, evitará preocuparse por todo.

Mañana celebro mi cumpleaños 16 y espero que al igual que todos los años, sea una fiesta calmada; aunque, pensándolo bien, no quisiera ni celebrarlo con una fiesta, me gustaría salir a algún lugar a despejar mi mente e intentar hacer algo diferente; como escribir, por ejemplo. Mamá siempre dice que no hay mejor manera de hablar con uno mismo y desahogarse, que escribiendo.

... Salgo de mi cuarto y me dirijo a la sala, según mamá, alguien me busca, pero no dice nada más que eso.

-¿Por qué el misterio ? -pregunto a mi mamá al notar su extenso silencio

-Nada. Si necesitas algo, sólo llámame. Por cierto, tu padre no lo quería dejar pasar, pero creo que sería bueno que aclares tu cabeza de u a vez por todas.

Dicho esto, se va y me deja sola, y segundos después, veo a Alan frente a mi. Siento mi corazón latir muy fuerte, y no sé si es porque me he asustado de verle, si es porque lo quiero aún, o si es porque lo detesto ...

-Hola El...

-¿Qué quieres?

-Saber de ti y del bebé ...

-Estoy bien y el bebé no está. ¿Algo más que quieras saber?

-De verdad lo siento Elena. Mi mamá enloqueció y quiso que me marchara, yo... no tenía opción.

-Vaya que olvidas rápido.

-Sé que probablemente me odies, pero juro que no fue mi culpa, y sí fui un idiota por no luchar por ti y nuestro hijo...

-Suficiente! . Creo que es mejor que te vayas. No es necesario que te disculpes, igual ya hice de cuentas que no existes.

-Y créeme que lo entiendo.

-Pues no se diga más. Cuídate en el camino.

Me retiro de la sala y dejo que la nana conduzca a Alan a la salida.

-¿Estarás bien? -Pregunta mamá que me ve de camino a mi cuarto.

Asiento con la cabeza, pues un nudo enorme se formó en mi garganta y creo no poder hablar.

Ha dolido mucho ver a Alan de nuevo, y quizá deba agradecer sus disculpas, pero me lastimó muchísimo que se fuera, y aún me sigue me doliendo. Y tal vez aunque llore aquí, en este preciso momento, puedo decir que quizá lo haya superado; aunque no creo que el ser cortante con él signifique superarlo.

-Elena- escucho a mamá tras la puerta- Cariño, ¿Me dejas pasar?

-Sí mah.

-Te ha dejado esto conmigo. Te dejaré a solas para que lo leas; y como te dije antes, si me necesitas, llámame ¿sí?

-Okey! ...

Me quedo pensando unos segundos si en verdad valdría la pena leer esta nota, carta o lo que sea: en estos tiempos ¿Quién escribe cartas? Además de mis padres, claro.

Sé que mañana es tu fiesta de cumpleaños, pero quise acercarme a ti hoy porque en verdad me has hecho falta. Quizá he sido un completo idiota por no enfrentar la situación cuando debí, y en verdad es algo que también me ha lastimado.

Tal vez te preguntarás ¿por qué decidí escribirte? Pero creo que sabía que no me escucharias. Siento mucho de verdad todo lo que te he podido causar, no te pido que vuelvas conmigo, no te pido que me ames; porque sería muy egoísta de mi parte; sólo quiero que seas feliz, aaunque no sea conmigo.

Elena, perdóname por todo lo daño que te haya podido causar. En verdad no fue mi intención; pero tampoco soy perfecto, y espero que eso en algún momento lo entiendas. Me enamoré de ti, y es por esto que puedo entender totalmente como te sientes.

Te deseo lo mejor!

Alan*

......

Creo que no será necesario llamar a mamá, pues aunque siento una enorme presión en mi pecho, no quiero llorar. No sería algo justo para mi misma. Al contrario, no sé si reírme por las cosas que hay aquí escritas.... tomo la carta y la tiro en el retrete.

Elijo salir de mi habitación y pedirle a papá que me lleve por un bocadillo. Necesito estar fuera de la casa al.menos unos minutos.

-¿Dónde quieres que te lleve, cariño?

-Pues a algún lugar divertido.

-No sé qué consideran los adolescentes de hoy, "divertido".

-Sabes que tengo gustos particulares ...

-¿Y Cómo te fue con Alan?

-Casi no hablamos, puedes estar seguro de eso.

-Pero,, ¿te sientes bien?

-No lo sé. Me ha dejado una carta

-Algo intensa al parecer. Rara vez te antojas de salir conmigo.

-La he eliminado, pero recuerdo exactamente lo que decía.

-Entonces no la has eliminado en su totalidad.

-Estaré bien papá. Así me lo he propuesto y así estaré. Ya verás.

-OK! ...

-¿Qué hacen tú y mamá para permanecer juntos y enamorados?

-Confiamos el uno en el otro, y ambos podemos decir que nos conocemos. A veces tenemos nuestras diferencias porque no todo es perfecto; pero sabemos manejarlo.

-Pues... espero y se mantenga así siempre. Yo creo que voy a dedicarme a algunas cosas más importantes.

-¿A qué te refieres con eso?

-Creo que me gustaría escribir algo en algún momento.

-Eso sería estupendo y a Jul le encantará a idea.

-Lo sé, pero no es que quiera hacerlo como una carrera, es que me parece más bien un pasatiempo.

-Igual te apoyamos ... Sólo, no escribas algo de seco si lo quieres compartir conmigo y con tu madre.

-No prometo nada ....