Novios oficiales y reencuentros

293 13 16
                                    

Al abrir mis ojos me encuentro con los cegadores rayos del sol que para estar muy soleado el frio sigue de lo peor, al tratar de levantarme siento un brazo (Más bien el de Louis) rodear mi cintura, me atrae hasta chocar mi espalda con su pecho y posa su nariz en mis rizos, rio bajo para no hacer mucho ruido y despertarlo, doy otro intento de levantarme pero este me aferra más a su cuerpo soltando un fuerte gruñido que me hace temblar, creo que estaré un rato más aquí. Después de casi 15 minutos el agarre se vuelve débil dejándome en libertad, me levanto con tal rapidez que casi me tropiezo con mis botas, me coloco las prendas en su lugar y seguido camino a la planta baja.

-Buenos días Hazz- Saluda mi madre con una sonrisa.

-Buenos días mami- Doy un bostezo.

-¿Qué tal durmieron Louis y tú?- Pregunta sacando del sartén un panqueque.

-Bien, de hecho yo ya había despertado hace rato pero él se puso algo posesivo entre sueños y pues tuve que quedarme hasta que decidiera soltarme- Me siento en una silla frente a un gran plato de los deliciosos panqueques -Huelen deliciosos- Olfateo.

-Casi termino ¿Por qué no vas por Louis para desayunar juntos?-.

Asiento y me levanto de la silla, me encamino a las escaleras y las subo de 2 en 2, llego a la puerta y la abro con cautela, me acerco a la cama y lo veo ahí con sus parpados cerrados, sus largas pestañas reposando sobre sus parpados, su boca un poco entreabierta de está saliendo ronquidos, sonrío de lado y acerco mis labios a su mejilla y doy un pequeño beso.

-Louis- Le llamo moviéndolo con delicadeza.

-Mmm- Se remueve un poco.

-Louis despierta- Le sacudo más fuerte.

-Deja dormir- Se cubre todo el cuerpo con la sabana.

-Anda levántate a desayunar-.

Se destapa y me enrolla la cintura con sus fornidos brazos subiéndome sobre él quedando recostado en su pecho, levanto mi cabeza para ver su rostro, se acerca a mí para darme un beso pero giro la cabeza.

-No, mi aliento apesta- Digo haciendo una mueca de asco.

Él ríe y luego niega con la cabeza.

-No importa dámelo- Se acerca de nuevo a mí.

-No Louis, enserio- Hago un puchero.

-Solo uno, rápido-.

Dudoso de hacerlo termino aceptando el beso mañanero, uno dulce y cariñoso, nos separamos por la falta de oxígeno, le doy una de mis grandes sonrisas acompañada de mis hoyuelos, con su dedo índice picotea mi agujerito de la mejilla y suelta un suspiro, toma mi cabeza entre sus manos y la coloca en el lado de su corazón.

-¿Escuchas eso?- Pregunta con ternura.

-Tus latidos están acelerados- Respondo confundido.

-Eso es lo que causas cuando te tengo cerca- Dice con sus ojos cerrados

-¿Desde cuando eres así de cursi Lou?- Cuestiono riendo un poco sintiendo mis mejillas arder.

-Creo que desde que te conocí, me has cambiado por completo- Vuelve a besarme.

Sonrío ampliamente enternecido por sus palabras.

-¡Chicos el desayuno está listo!- Mamá grita llamando nuestra atención

-Hora de bajar-.

Salimos de la cama, espero a que Louis se vista por completo y los dos entrelazamos nuestras manos, bajamos las escaleras y entramos a la cocina oliendo el delicioso aroma de los panqueques recién hechos.

Cortes De Amor-(Larry Stylinson)-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora