"La forma en la que trato de seguir viviendo como un amigo, esa manera de vivir... se ha convertido en mi más grande pecado. Perdóname amigo mío, por darte esta amistad."
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Por esas veces que he derramado lágrimas, por esas veces en las que grite desgarradoramente, por esas veces, me he prometido sonreír cada vez más y más. Esa sonrisa que alguna vez fue fingida, hoy es autentica y llena de alegría. Así que gracias, por darte esta oportunidad de volver amar.
Sin temor a las miradas, llegamos a el osario donde yace Yerim, tomados de las manos mientras que Seyeon tomaba mi otra mano, confuso y curioso queriendo saber en donde estábamos.
- Jung Seyeon, necesito que escuches a papá, ¿si?.- dice Taekwoon mientras se acuclillaba para acariciarle la mejilla y mirarle sus ojos confusos.- Lo siento por no hablarte de ella cuando empezaste a crecer y a entender, pero necesito que ahora comprendas algo. No solo tienes dos padres Seyeonie, también tienes a una hermosa mamá que cuida de ti en el cielo.
- ¿Mamá?, ¿Tengo una mamá en el cielo?.- pregunto inocentemente intentado entender lo que su padre le decía.- ¿Y por qué no baja a verme?.
- Porque mamá ya no puede volver.- dice dificultosamente intentado encontrar las palabras adecuadas, y le acaricio el cabello para darle animo.- Ella nos esta cuidando siempre desde el cielo y hoy quería verte. ¿Quieres saludar a mamá?.
- Si, ¿Dónde está?.- pregunta emocionado con esa sonrisa dulce que lo caracterizaba. Así que lo tomo en brazos para que pueda llegar a ver el osario de su madre.
- Mira Seyeon ah, ¿Vez esa urna detrás del vidrio?, allí está tu mamá que te ama un montón.- le digo viendo que queda mirando el osario dudoso.
- Debe ser chiquita para entrar en esa cajita.- comenta ingenuo haciendo que le bese la mejilla por su inocencia.
- Salúdala Seyeon, que te ha extrañado un montón.- comenta Taekwoon quien intentaba no entristecerse con cada palabra inocente que decía su hijo.
- Hola mami.- la saluda formalmente inclinando la cabeza.
- Aigoo que educado.- le digo mientras lo apretujaba entre mis brazos.
- Papá, ¿Por qué tengo dos papás y una mamá?.- me pregunta dejándome desconcertado.
- Por que... papá Hakyeon y papá Taekwoon se quieren un montón, un montón y ayudan a mamá Yerim a cuidarte mientras ella desde allí, arriba entre las nubes, te cuida y protege.
Seyeon quien seguía en su confuso mundo, infla las mejillas pensativo mientras me pide que le baje y así poder salir corriendo a jugar. Tenía tan solo 3 años, y todavía tenia mucho que procesar siendo tan chiquito. A pesar de que Taekwoon había expresado no dejar que el recuerdo de Yerim se pierda en su corazón, había permitido que Seyeon crezca con la idea de que solo tenía 2 padres, no iba a intervenir, era su decisión, pero hoy luego de 2 años, decidió que Seyeon supiera parte de la verdad.
- ¿Estas bien?.- le pregunto a Woon quien seguía mirando el osario de Yerim.- ¿Quieres que te deje un momento a solas?.
- No mi amor.- dice tomando mi mano.- Quiero decirle algo a ella y que tu estés a mi lado y escuches.- me dice besándome la mejilla mientras suspira.- Yerimie, se que debes hartarte de verme siempre, y que nunca cambie mi expresión de tristeza. Pero quiero decirte que en estos 2 años, he aprendido a cambiar esas lágrimas con sonrisas, y todo es gracias a él.- comenta besando mi mano para mirarme a mi.- Estoy enamorado de este hombre, que es un asombroso padre, y que siempre me enseña a ser mejor cada día. Quiero que sepas Lee Yerim, que los dos prometemos llenar de amor a Seyeon, y que no dejaremos que nada ni nadie lo lastime. Así que la próxima vez que te visite, volveré con una sonrisa en mi rostro para demostrarte que no debes preocuparte por mí, que soy feliz y que he vuelto amar.
- Cuidaré muy bien de los dos Yerim.- digo dejando un pequeño racimo de flores dentro del cristal.- Te lo prometo. Y también prometo hablarle más seguido de ti a Seyeonie.
- Gracias mi amor, no se que haría sin ti.- me agradece abrazándome fuertemente.- Te amo un montón.- dice besándome suavemente en los labios.- A ti jamás voy a perderte.
- Eso nunca, siempre estaré a tu lado.- le digo acariciándole el rostro para depositar un casto beso en sus labios.- Te amo, y nunca, jamás en la vida, dejaré de amarte a ti y nuestro hermoso y loco nene.
- Hablando del nene loco, ¿Dónde se metió este niño?.- dice empezando a molestarse y buscarlo desesperadamente.
A veces era inevitable no sonreír al verte, tan amoroso y protector, tan malhumorado y cambiante, cada humor tuyo, lo amaba profundamente.
He sido bendecido por el cielo, y debo decir... Gracias, por ser tan afortunado de poder amarte.
//Primera parte del capítulo final, realmente no quiero pero debo;;;. Esta es la última visión de Hakyeon, la segunda parte tendrá la visión de Leo y sabremos lo que significa Hakyeon para Leo ahora luego de convivir 2 años juntos, y otras cosas más que quise agregar en el final para cerrar y tener un final limpio. La razón por la que decidí avanzar 2 años la historia es porque necesitaba que Seyeon se comunicara mejor con sus padres y por otro motivo que tal vez lo pasaron por alto, y es donde dice "sin temor a las miradas", "tomados de las manos". Recuerden que hace 2 años atrás antes de que Leo aceptara estar con N, Leo temía que la sociedad lastime a su hijo al ser criado por dos padres y luego cuando quiere estar con él, le dice que lo ayude a cambiar su mente, eso se verá en la parte última donde veremos la visión de un Leo muy distinto. Actualizaré en unas horas, así que, esten atentas... VOTEN♥ COMENTEN♥ Y GRACIAS♥//
