Azul y Chocolate [GRAYLU]

Capítulo 13.

Era el quinto café que me tomaba esa mañana, pero aún así la sensación de mi garganta y labios secos no se quitaba, estaba temblando más de lo normal y si, eso significaba la falta de mis malas costumbres, sentía un nudo en el estomago, no tenía control sobre mí propio cuerpo, enojada solté un bufido y tire la taza ya vacía a la pared de "mi habitación", exasperada me lancé a la cama y frote mis ojos.
-¿Lucy estás bien?.- Gray estaba al otro lado de la puerta, pensé en ignorarlo pero preferí no hacerlo ya que podría entrar al cuarto y eso era lo que menos quería en este momento.
-Si Gray, estoy perfectamente.- mi voz salió ronca creando un silencio extraño.
-No te escuchas bien.
-Pues lo estoy.
-Si tú lo dices...-me empezaba a exasperar la voz de Gray y al parecer se dio cuenta ya que soltó la siguiente pregunta rápidamente como si se le fuera a acabar el tiempo.
-Pensaba en que podríamos ir a el Supermercado ya que necesito unas cuantas cosas para la casa, y quizas tú me podrías-
-NO.- le corte antes de que siguiera, no pensaba salir de la habitación por ningún motivo, sentía que si salía de ahí aparecería mágicamente en "The ZefZone" y no quería eso, no ahora que había estado consiente por más tiempo de lo normal, y por desgracia al estar consiente reflexione.
-Esta bien, no insistiré, si me necesitas llámame, volveré pronto.
Se escucho el golpe de sus zapatillas con el suelo y el chirriar de la puerta principal cerrándose y después nada.
Solté todo el aire que tenía sin darme cuenta que lo estaba reteniendo, me pare bruscamente y camine hacia el baño, ahí me lave la cara y me observe en el espejo.
-Tu eres mejor que esto Lucy y lo sabes, no más errores.

30 minutos después ya iba por mí décimo cigarrillo, Gray aún no volvía y eso me tenía un poco intranquila, el tono de mi celular me asusto tomándome desprevenida, observe la pantalla y me apareció un número desconocido.
-¿Aló?.
-Lucy, ¿eres tú?.
-¿Quien habla?.- fruncí el entrecejo.
-Por dios Lucy ya te olvidaste de mí que cruel.- se escucho un gimoteo e instantáneamente supe quién era.
-¡Loke!, ¡idiota porque no habías llamado!, me tenían preocupada.
-Tranquila princesa, estábamos un poco ocupados por eso no te llamamos, pero estamos bien.- sonreí inconscientemente mientras le daba una calada a mi cigarro.
-¿y cómo-
-Deja de fumar Lucy es un mal hábito.
-Pero qué demo- una risilla se escucho en la línea y supe que había sido Jellal.
-¿me estás observando con una cámara oculta o que?.
-No, es solo que te conozco bien.- solté un bufido y apague el cigarrillo.
-si, si, ahora cuéntenme como están las cosas.- me tome un mechón de pelo nerviosa esperando escuchar buenas noticias.
-La verdad es que han ido realmente bien, no se han visto movimientos extraños hacia ti ni nada, no hemos tenido encuentros ni percances.
-Me alegro mucho...chicos....
-¿si?.- canturrearon los dos al unísono.
-Los extraño.- me sentía realmente avergonzada al decir eso.
-¡Eres una ternurita rubia!, ¡nosotros también te extrañamos!, y ahora qué dijiste eso, tenemos buenas noticias.
-¿y cuáles serían?.
-¡Iremos a magnolia la próxima semana!.
Una gran sonrisa se apoderó de mis labios y sin poder evitarlo lance un gemido de felicidad.
-ahora debemos colgar, te llamaremos cuando estemos en el avión, ¡cuídate y sé bonita!.
-¡Los estaré esperando!.
-¡Adiós, te queremos Lucy!.- la llamada se corto y yo dejé mi teléfono en la mesilla. Para celebrar la buena noticia se me ocurrió poner música, fui al Living y encendí la radio, conecte mi celular a la radio y puse a mi canción favorita, Yellow Ledbetter de Pearl Jam. Amaba esa canción, comencé a cantarla a todo pulmón.

Estaba tan emocionada cantando que pegue un salto cuando una mano se posó en mi hombro, era Gray, me miraba entre divertido y anonadado, pare la canción y cuando iba a decir algo el me interrumpió.
-No sabía que cantabas tan bien Lucy.
-Era un secreto.
-Bien guardado te lo tenías he....me impresiona que te guste el rock, yo me había imaginado que te gustaba el pop.
-¿tengo pinta de que me guste Ariana Grande o qué?.
-puede ser...
-déjate de bromas Gray.- el solo soltó una sonora carcajada y me indicó que lo siguiera a la cocina. Cuando estábamos dentro me pidió ayuda para ordenar todas las compras, lo cual hice sin rechistar.
-¿tanto comes?.- lo mire anonadada, tenía comida como para unos 4 años.
-La verdad es que no, pero contigo aquí y con las visitas inesperadas de Natsu necesito toda esta comida.
-No te acostumbres mucho conmigo, no me pienso quedar mucho más, recuerda que tengo mi casa acá, y sobre Natsu te entiendo.- solté una pequeña risa al recordar a Natsu registrando mi refrigerador sin vergüenza alguna. Me golpeé mentalmente intentando olvidar esos recuerdos. Gray me saco de mis pensamientos.
-Prepararé la cena.
-Esta bien, yo- de repente unas terribles ganas de vomitar se apoderaron de mí y me sentí palidecer.
-¿Lucy estas- no lo deje terminar porque salí corriendo al baño, y al llegar vomite en el W.C, me sentía débil, cuando termine de vomitar unos golpes en la puerta llamaron mi atención.
-¿Puedo pasar?.
-No.
-Lo haré de todas maneras.
-Espera, Gray.- pero él ya estaba adentro mirándome preocupado.
-¿qué te sucedió?, ¿te sientes bien?.
-Hey tranquilo, estoy bien, es solo que algo me cayo mal al estómago.- me levante lentamente, me lave las manos, los dientes y la cara. Gray me observó meticuloso.
-para estar tan "bien", no lo pareces.- hizo comillas con sus dedos en la palabra "bien" y yo solo puse los ojos en blanco.
-Eres un misterio.
-Puede ser.
Después de esa pequeña "conversación" fuimos a cenar, cenamos en silencio y cuando terminamos Gray lavo la loza y yo me fui a el Living a ver una película, estaba cambiando los canales cuando mi celular sonó.